miércoles, 6 de marzo de 2019

La Talidomida


La Talidomida

La Talidomida había emergido como un agente efectivo en el tratamiento de una neoplasia del sistema linfohematopoyético, el mieloma múltiple, y luego se introdujo como sedante en el año 1953, de manera que fue comercializada en más de 40 países. Desafortunadamente su efecto teratogénico no fue descubierto hasta 1961, cuando se descubrió que alrededor de 10 000 niños se afectaron en todo el mundo, por  malformaciones congénitas. La Talidomida, aquel fármaco que había salido al mercado en los años cincuenta del siglo pasado y se usaba en la primera etapa del embarazo para calmar el dolor, las náuseas y el malestar,  hasta el momento cuando los médicos se dieron cuenta que provocaba graves malformaciones en los fetos, en algunos casos llegaba hasta provocar la muerte, por lo que fue retirada del mercado en 1962.

La Talidomida, comercializada como sedante y como calmante de la hiperémesis gravídica, (náuseas durante los primeros meses de embarazo). Como sedante tuvo gran éxito ya que se decía que no causaba casi ningún efecto secundario y en caso de ingestión masiva no era letal. Este medicamento, había sido producido por Chemie Grünenthal, de Alemania, y afectaba a los fetos de dos maneras: 1- Que la madre tomara el medicamento directamente como sedante o calmante de náuseas. 2- Que el padre lo tomara, ya que la talidomida afecta al esperma y transmite los efectos nocivos ya en el momento de la concepción.  Las malformaciones solían producirse en la primera etapa del embarazo, cuando se desarrollan los brazos y las piernas del bebé, por lo que la malformación más conocida es llamada Focomelia, con la ausencia de gran parte del brazo o de la pierna y la presencia de manitas en forma de aleta. En los casos más extremos los bebés no tenían ninguna extremidad; además el medicamento también producía malformaciones en los ojos, oídos, corazón, genitales, riñones y tracto digestivo. Muchos de los bebes morían poco después del parto.  El fármaco fue retirado del mercado a comienzos de la década de los años sesenta cuando se comprobaron los efectos teratogénicos, y fue retirado en los países donde había sido comercializado bajo diferentes nombres, Imidan, Varian, Contergan, Gluto Naftil, Softenon, Noctosediv, Entero-sediv, Entero-Sediv-Suspenso…
 
La devastadora experiencia con la Talidomida, llevó a la percepción de los riesgos de los medicamentos  y, muchos años después de esta tragedia, aunque resulta difícil imaginar una nueva epidemia como la que produjo la Talidomida, sin embargo, la historia siguió mostrando ejemplos como fue el caso del dietilestilbestrol y el aumento del riesgo de adenocarcinoma de células claras en mujeres. Este ejemplo, dejó demostrado que todavía queda un largo camino para aprender qué tratamientos son los más seguros y eficaces durante el embarazo para prevenir, evitar o reducir los potenciales riesgos en el feto/recién nacido/niño/adulto. Ha transcurrido más de medio siglo, y los niños que nacieron con graves malformaciones tras la toma del medicamento por sus madres durante su gestación, hoy casi ancianos, son un ejemplo todavía vivo de los riesgos asociados a la laxitud de la regulación farmacéutica”.

La angiogénesis o crecimiento de nuevos vasos sanguíneos en el organismo, es fundamental para el crecimiento y la diseminación de los tumores. En junio de 2007 GlaxoSmithKline (GSK) ha presentado los resultados de estudios en curso de Fase III sobre Pazopanib en carcinoma avanzado o metastásico de célula renal (RCC),e n el cáncer de ovario y en sarcomas de tejidos blandos. Pazopanib como inhibidor de angiogénesis, actúa sobre el receptor del factor de crecimiento endotelial vascular (VEGFR), el receptor del factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGFR) y el receptor c-kit. El primer estudio clínico para demostrar el beneficio de la Talidomina en el cáncer de ovario recurrente donde las pacientes que recibieron la combinación de Talidomida más Toptecan se presentó con un 30 % de respuesta completa.
 
Después de la trágica historia de la Talidomida, cualquiera pensaría que la Talidomida se convertiría en un medicamento maldito, una ignominia de la farmacología. Sin embargo, no ha sido así, y vemos como en la actualidad, la Talidomida se vuelve a utilizar, con el apoyo de la OMS, en algunos países, al haberse comprobado su eficacia antipruriginosa en enfermedades como la lepra. Todavía se conocen casos de nacimientos de niños con dismelia en Etiopía y en Brasil, hijos de padres tratados con Talidomida. Aun cuando su indicación es muy específica, los médicos la prescriben en otras enfermedades. Todavía más: la Talidomida ha servido de punto de partida para el desarrollo de un importante medicamento anticanceroso, Lenalidomida. Se puede encontrar en venta en Internet, pero este tipo de venta es totalmente fraudulenta. No obstante existe un programa (STEPS, de System for Thalidomide Education and Prescribing Safety) que vigila, que no pueda administrarse la Talidomida en mujeres encinta ni en edad de procrear. 

Mississauga, Ontario miércoles 6 de marzo de 2019

2 comentarios:

miguel angel campos dijo...

Leí una historia casi épica sobre la mujer que evitó su introducción y aprobación en los EE UU, entró de asistente a un laboratoria donde casi no había mueressm al parece envió una fotografía masculinizada, ella resultó una bioquímica destacada*

miguel angel campos dijo...

Leí una historia casi épica sobre la mujer que evitó su introducción y aprobación en los EE UU, entró de asistente a un laboratoria donde casi no había mueressm al parece envió una fotografía masculinizada, ella resultó una bioquímica destacada*