La
mala semilla
The Bad Seed (La mala semilla) es una novela del año 1954 del escritor
estadounidense William
March, que resultó ser la última de sus principales
obras publicadas antes de su muerte. The Bad Seed fue nominada al Premio
Nacional de Libros de Ficción en 1955. Su éxito crítico y comercial se
realizó en gran parte después de la muerte de March, solo un mes después de su
publicación.
William March (1893-1954)
era un escritor norteamericano, quien se destacó por su participación como
marine en la Primera Guerra Mundial. Su obra escrita obtuvo un gran
reconocimiento, aunque él no llegó a convertirse en un autor conocido para el
gran público. En The Bad
Seed, March
narra la historia de una madre que se da cuenta de que su pequeña hija es una
asesina. El éxito crítico y comercial de la novela se dio después de la muerte
de March, solo un mes después de su publicación. En 1954, la novela fue
adaptada a una obra de
teatro de Maxwell
Anderson, que resultaría exitosa y de larga
duración y a una película dirigida
por Mervyn LeRoy en
1956 con la joven actriz Patty McCormack, nominada al Premio de la Academia. Debo
confesar que, en la oportunidad de ver el filme en mi lejana juventud, la
película y la inocentona actuación de la actriz niña, me impresionó. Tal vez
por ello, es ahora en 2022 cuando regreso a comentar este escabroso filme de
terror.
Sinopsis: Rhoda
Penmark, de ocho años, es encantadora, sin embargo, la mayoría de los niños se
mantienen alejados de ella, sintiendo que hay algo que no está del todo bien en
ella. Fern Grammar School, es su nueva escuela en el pequeño pueblo de
Benedict. Rhoda es única hija de Christine Penmark y su esposo Kenneth, quien
se va por negocios. Uno de sus compañeros de clase(Claude), se ahoga en un
picnic escolar. La muerte se presume accidental, aunque su rostro estaba
impreso con marcas en forma de media luna. Christine se entera de que Rhoda se
peleó con Claude y de que Rhoda mintió sobre la última vez que vio a Claude y
la madre comienza a reevaluar incidentes; Rhoda suplicó a sus padres que le
dieran un perro como mascota, y el animal murió en una "caída
accidental" por la ventana, Clara Post una vecina anciana, sufrió una
caída fatal mientras cuidaba a Rhoda, que orgullosamente posee algo que era de
la señora Post. Perturbada por sus sospechas Christine investigará para
descubrir que ella fue adoptada por sus padres y su madre biológica era una
notoria asesina en serie que murió en la silla
eléctrica. Christine se culpa a sí misma por
transmitir el gen asesino de la "mala semilla" a su hija y escribe a
su esposo unas cartas sobre Rhoda pero nunca se las envía. Leroy Jessup, el
hombre de mantenimiento que vive en el complejo de apartamentos de los
Penmarks, es el único otro adulto además de Christine que ve lo de Rhoda, se
burla de ella, y le dice es responsable de la muerte de Claude, que debe haber
usado sus zapatos con tacos explicando las marcas en forma de media luna en la
cara del niño. Leroy se da cuenta de que tropezó con la verdad… Rhoda espera
que Leroy se duerma y enciende su colchón antes de encerrarlo adentro.
Christine se enfrenta a Rhoda, quien inicialmente intenta mentir y manipular a
su madre antes de confesar haber matado a Claude, a Leroy y a Clara Post, sin
expresar ningún remordimiento. Desesperada por evitar que Rhoda mate a alguien
más, Christine le da en secreto unas pastillas y se dispara a sí misma en la
cabeza con una pistola. Christine luego muere en el hospital, sin embargo, un
vecino que escuchó el disparo salva a Rhoda. Christine había destruido sus
cartas no enviadas y sin otras pruebas, Rhoda es libre de volver a matar…
En la década en que se publicó la
novela, la delincuencia juvenil comenzaba
a documentarse más extensamente en la idea de que los delitos contra los niños
era un fenómeno nuevo. Esto daría origen a una controversia sobre la naturaleza y la crianza cuando
se propusieron explicaciones psiquiátricas para la delincuencia juvenil, y el
debate sobre las tendencias innatas "la naturaleza", era más o menos
importante que los factores ambientales "la crianza" para explicar la
conducta desviada de algunos jóvenes. Los partidarios de la “naturaleza”
sugirieron que algunas personas nacen malvadas o con tendencias maliciosas y se
planteó la idea de que la naturaleza prevaleciendo sobre la crianza estaría implícita
en The Bad Seed .
Surge la pregunta de… ¿Existe
un rasgo genético asesino que
se transmite de generación en generación? Un criminólogo y médico italiano, Ezechia Marco Lombroso (1835 -1909),
conocido con el pseudónimo Cesare
Lombroso fue fundador de la escuela de criminología positivista. Lombroso buscó los orígenes
biológicos del crimen y planteó que las causas de la criminalidad están
relacionadas con causas físicas y biológicas. Sus explicaciones se centraban en
la biología, esto es, en rasgos que permitiera diferenciar biológicamente la
figura del criminal de los que él consideraba “normales”. En el caso que nos
ocupa, nada más remoto a esta teoría ante la apariencia inocente de Patty
McCormack, la Rhoda de la película.
Hace unos años, un
estudio publicado en la revista Molecular Psychiatry relacionó las variantes de
dos genes –MAOA y CDH13– capaces de producir una enzima que actúa sobre las sustancias
químicas del cerebro haciendo
que funcionen
negativamente y, en consecuencia, que sean capaces de
desencadenar la agresión con la propensión a cometer crímenes violentos. El
trabajo fue realizado por un equipo de investigación del Instituto Karolinska
de Estocolmo. En otro estudio llevado a cabo por la
Universidad de Florida en 2018, se encontró que el gen MAO-A, aparentemente hereditario, parece jugar un papel
importante en esta cuestión; este gen es
responsable de afectar los niveles de dopamina y serotonina secretados en el
cerebro, neurotransmisores que afectan el humor y el comportamiento. Sin
embargo, no ha sido posible hallar indicios más allá sobre este tema, donde
adicionalmente también se mencionó la teoría del gen criminal en los hombres
que son genéticamente xyy.
El psicólogo Robert D. Hare al analizar la
novela The Bad Seed sugirió que la psicopatía es un rasgo innato, lo
cual mostraría en su libro de no ficción de 1993 Sin conciencia . En este libro, una larga cita de la
novela escrita por Hare, le lleva a considerar que la novela de William March resulta
ser como un retrato "notablemente
fiel del desarrollo de una psicopatía en
la infancia”… James Kelly, del New York Times diría sobre La
mala semilla, que la novela le llevó a recordar otra novela publicada
por el escritor March veinte años antes (La compañía K) la cual es una
muestra de lo que les sucede a los hombres en la guerra, tan sólo igualada
por la novela Tres soldados. de John Dos
Passos(1896-1970).
Mervyn LeRoy fue el director de
la película del año 1956, y en su carrera en Hollywood, LeRoy produjo o dirigió
más de 70 películas, incluidas las recordadas Little Caesar y Little
Women. Nancy Kelly, Patty McCormack y la mayoría del elenco original quienes
actuaron en la película de 1956, aceptarían que el final de la película de 1956
se cambiase el de la novela para cumplir con el Código de Producción de
Hollywood. Así vimos que Rhoda es repentinamente fulminada y muerta por un rayo
cuando regresa a la escena de su crimen para recuperar la medalla (una
interpretación de la intervención divina), y Christine sobrevive a su intento
de suicidio. Durante los créditos finales, LeRoy agregó una secuencia alegre de
Nancy Kelly,-Christine, sosteniendo a Patty McCormack, -Rhoda, sobre sus piernas
y azotándola, posiblemente para recordarle al público que la película es solo
una obra de teatro...
Maracaibo, miércoles 23 de marzo del año 2022
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