viernes, 29 de septiembre de 2023

Leer “bien” y escribir “bien”...

En 1973 asistía a unos “talleres de narrativa” del CONAC dirigidos por Eduardo Liendo, donde aprendí algo que es crucial en el oficio de escribir. Quien escribe, debe hacerlo desde el fondo de su ser, desnudando su alma, sin afanes de pedagogía ni ideales políticos o proclamas reformistas, sin ser rebasado por lo sociológico ni por sus propios conflictos. Sosteniendo siempre algo como principio lógico: “lo menos que se le puede pedir a un escritor es que escriba bien”. La frase es del escritor Oswaldo Trejo y es por demás evidente que es necesario cuidar la ortografía, la sintaxis y la prosodia, pero, ante todo nos decía nuestro maestro el escritor Eduardo Liendo, una cosa hay que es muy cierta: “Para escribir bien hay que leer bien”.



En mi novela “Escribir en La Habana”, uno de sus queridos personajes decía: “Leer siempre es difícil, es complejo, leer un libro es más complicado que leer un periódico... Un libro puede leerse dos o más veces, la literatura es para releerla... Lo que cada quien encuentre en los libros, depende más del lector que del autor, sobretodo del lector que sea capaz de releer”. Esto suena lógico, pero en ocasiones es muy complejo, y puede ser difícil de entender.

 

El escritor además de sus vivencias personales, las de cada quien, existe lo que cada escritor haya ido incorporando a su intelecto como lector de muchos autores.  Aunque el escritor sea un testigo de su tiempo, la lectura lo habrá llevado a investigar otras épocas, y citando a Federico Amiel, ya nos lo decía Liendo que todos, escritores y lectores no somos más que “copia de copias reflejo de reflejos”. Es importante que el escritor evite transformarse en exégeta de sus admirados literatos…


A través de la lectura el escritor debe buscar su estilo, con el tono y el ritmo de sus palabras, e ir hacia el uso polifónico del lenguaje como instrumento comunicacional, el cual desde antes de los tiempos de Don Alonso Quijano creado por Miguel de Cervantes, en la mente del escritor provoca el hermoso proceso de plasmar en palabras escritas, lo que él trate de reinventar sobre la vida misma. Por ello, ya lo dijo Kundera “el novelista solo tiene que rendir cuentas a Cervantes”.

 

El estilo de quien escribe puede ser hiperbólico como ocurre en el barroco, y hasta desmesurado como los textos de Lezama Lima o de Sarduy, puede ser de una erudición apabullante cual Palinuro de Fernando del Paso, o como en ocasiones se mostraba en sus textos Denzil Romero, pero más importante que una copiosa erudición, quizás tan densa como la de Terra Nostra de Carlos Fuentes, puede resultar la economía de los medios de expresión. En ella justamente reside el secreto de la difícil sencillez que nos legara Tolstoi, o la diáfana claridad de Borges quien sin circunloquios verbales siempre nos demostró que no es lo mismo ser simple que sencillo.

 

Un lenguaje críptico, con frecuencia entorpece la lectura. El lenguaje de la lectura y el del escritor debe ser claro, diáfano y preciso. Al escribir, en ocasiones, cuan problemático puede ser lo obvio, y es impresionante como los lugares comunes pueden degradar un texto literario. Los riesgos que se corren al escribir, son numerosos y como le escucháramos comentar a Eduardo Liendo, podríamos citar a Santa Teresa por aquello de que, de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno”.



 

De nuevo citaré unas frases sobre el oficio de escribir, puestas en boca de una joven, personaje de mi novela Escribir en la Habana. Para escribir yo no quisiera plagiar la realidad, esa está en la prensa... Yo no escribiré para relatar mis vivencias, una debe escribir para inventar la vida


Ednodio Quintero, ha descrito al novelista como un investigador que se asoma a los pasadizos del túnel de la novela, armado con la linterna del lenguaje, y José Napoleón Oropeza ha señalado que: La grandeza de un creador está en su poder de sugerencia, en su inventiva y en ese don de convencer al lector de que aquello que está presenciando es pavorosamente real” .

 

Por todas estas cosas, es la novela un género híbrido que permite, el mayor grado de aproximaciones; es un arte de imprecisas fronteras, el cual curiosamente posee esa capacidad inquisitorial, pero dada su sorprendente plasticidad, resulta también ser muy vulnerable. Repetiré algo que ya he citado previamente en palabras de Ednodio Quintero “La novela no es el lugar apropiado para la prédica, ni púlpito, ni Cátedra, ni tarima, es un espacio abierto, desolado tal vez, abismo a la intemperie, donde el escritor acompañado de su cómplice, puede desplazar los múltiples registros de su voz, donde le es permitido expresar su ansia por reconocer lo que aun le resta de humano, donde acepta, al fin, su parentesco con los dioses mortales, con el agua que corre y con el polvo estelar”.

 

Quisiera concluir con unas palabras de mi amigo, el escritor Eduardo Liendo, a quien debo el saber una buena parte de lo que les he comentado hoy : Lo que más me fascina de la literatura es la posibilidad de ser otro, de ser yo y múltiple. Ser zorro y pez, nube y cometa, héroe y ratero, espuma y roca, eco y silencio... El escritor, por muy desamparado que se encuentre, por suicida que sea, es el amante preferido de la existencia. Por eso quizás su mayor desafío es vencer a la muerte con el filo de la palabra”.

 

Maracaibo, sábado 30 de septiembre del año 2023

 


“Deep Mind” una IA mutacional.


El santo grial de la medicina moderna consistiría en identificar las alteraciones en el genoma que son capaces de provocar la aparición de enfermedades de origen genético. La tarea no ha sido nunca fácil, ya que hay miles de mutaciones en cada persona respecto de la información genética que heredó de sus padres. Afortunadamente la mayoría son benignas, pero hay un porcentaje que pueden ser patogénicas.

Aunque la ciencia solo había clasificado el 2% de las variaciones detectadas hasta hoy, gracias a la inteligencia artificial de DeepMind, ahora es posible detectar mutaciones en las proteínas que son capaces de generar enfermedades. Las investigadores de la empresa de inteligencia artificial (IA) Google DeepMind, de Alphabet, han catalogado 71 millones de estas mutaciones, encontrando que un tercio podría modificar el funcionamiento de las proteínas, provocando serias patologías.

La noticia fue anunciada el 19 de este mes (Sept 2023) en diario español El País, por Miguel Ángel Criado señalando que el ADN contiene las instrucciones de todo ser vivo y como es capaz de crear células, órganos y sus funciones en secuencias de sus componentes básicos. Estos componentes son las proteínas -los ladrillos de la vida- formadas por series de aminoácidos, a veces centenares, formados por tríos de nucleótidos, que son las letras del abecedario genético.

Cuando se produce una mutación, uno de estos nucleótidos es reemplazado por otro y aunque en su mayoría, estas variantes no afectan a la función de la proteína, existen otros casos, donde la mutación es catastrófica, y termina degenerando en patologías como puede ser la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) de base genética, o en el caso quizás menos grave, de la anemia de células falciformes.

Hasta ahora, se habían identificado unos 4 millones de estas variantes contrasentido, pero ahora, la inteligencia artificial (IA) ha multiplicado por 18 el número de variantes conocidas y clasificado la mayoría de ellas por potencial de impacto en el funcionamiento de las proteínas. Los autores de este logro, publicado en la revista científica Science, son los científicos de DeepMind. David Baker, un bioquímico que dice: “Hemos creado una tecnología que nos lleva más allá de las posibilidades de la biología”.

Este grupo desarrolló hace unos años AlphaFold, un programa de IA capaz de predecir la estructura de la práctica totalidad de las proteínas, el cual es considerado uno de los mayores avances de la biología computacional. Lo que han hecho ahora ha sido rediseñarlo y reorientarlo para detectar mutaciones contrasentido en la expresión de las proteínas. AlphaMissense, y clasifica con elevada probabilidad el impacto que esta variante puede tener en la función de la proteína.

El investigador de Deep Mind, Jung Chen, primer autor del estudio, explica lo que hace AlphaMissense: “Sabíamos que AlphaFold era un modelo muy bueno para predecir la estructura tridimensional de las proteínas partiendo de una secuencia masiva. También sabíamos que esta estructura en 3D de las proteínas es muy importante para su función, básicamente revelando cuál es”, explica Chen. Si de la estructura se puede deducir su función, cualquier alteración en esa estructura podría ser fruto de una mutación. Otra pieza fundamental es la capacidad de AlphaMissense de aprender de las limitaciones evolutivas de las secuencias relacionadas.

La evolución ha moldeado cómo puede ser la estructura de una proteína y cómo no debería ser si no se quiere tener problemas. Para mejorar su conocimiento de este aspecto, el sistema fue entrenado con las estructuras de proteínas humanas y de primates. “Mediante el entrenamiento, ve millones de secuencias de proteínas y aprende cómo es una secuencia de proteínas normal. Y cuando se nos da una con una mutación, puede decirnos si mala o no”.

Cheng acaba haciendo una comparación: “Esto es muy similar al lenguaje humano. Si sustituimos una palabra de una frase en inglés, una persona que esté familiarizada con el idioma puede ver inmediatamente si esta sustitución de palabras cambiará el significado de la oración o no”. Su AlphaMissense fue capaz de clasificar el 89% de los 71 millones de variantes contrasentido que identificó, y de ellas, el 57% eran probablemente benignas y un tercio como probablemente patogénicas.

Del 11% restante la IA no sabría su impacto. “El modelo asigna una puntuación entre cero y uno a cada una de las variantes e indica la probabilidad de que la variante sea patógena. Por patógeno, queremos decir que nuestra variante patogénica tiene más probabilidades de estar asociada con una enfermedad o causarla”, detalla el científico.

Las aclaraciones de Cheng destacan tanto la fortaleza de AlphaMissense, su altísima capacidad para clasificar las variantes, como una de sus debilidades: los porcentajes se refieren a probabilidades. Hasta la era de los potentes ordenadores y la IA, caracterizar la estructura de una proteína, o de sus mutaciones, era un trabajo titánico. Antes de la llegada de estas tecnologías, se había conseguido determinar la estructura de unas 200.000 proteínas, una labor que llevó 60 años y la participación de miles de científicos. Para hacerlo se necesitaba muchas horas de laboratorio o el uso de aceleradores de partículas. Pero eran observaciones reales, de la estructura real de una proteína real. En el caso de la biología computacional, son proteínas y variantes virtuales, que después hay que confirmar. En el caso de AlphaMissense, la precisión lograda para sus cálculos es del 90%.

En cuanto a las posibles aplicaciones, Žiga Avsec, también de DeepMind y coautor sénior del estudio, dijo en una conferencia online que, “el primer paso para encontrar tratamientos es tratar de comprender bien la enfermedad y tanto para las enfermedades complejas como para las raras, eso significa encontrar genes asociados con ellas”. Para Avsec, herramientas como AlphaMissense,pueden ayudarnos a intentarlo, a poder identificar mejor las variantes, ayudarnos a descubrir genes potencialmente nuevos; al comprender mejor la genética, podremos tener opiniones más sólidas sobre algunos genes de los que antes quizá no estábamos seguros si estaban relacionados con la enfermedad”. “La idea general, es a través de una mejor genética, encontrar nuevos genes, obteniendo un poder estadístico adicional para detectar nuevas asociaciones, pero eso directamente no conducirá a nuevos medicamentos como tal”, añadió.

Hace unos días, se publicó el análisis de los 200 millones de proteínas descubiertas por AlphaFold el año pasado. En ese análisis clave participó el bioinformático español, Íñigo Barrio, que no es tan entusiasta con AlphaMissense, diría: “Es relevante, es una nueva forma de evaluar variantes y podría servir para monitorear enfermedades raras. Pero ya hay otros software de predicción”. Barrio destacaría también una de las limitaciones de esta inteligencia artificial. AlphaMissense cataloga variantes contrasentido de forma individual, pero muchas de las patologías con base genética “son el producto de la combinación de varias de estas mutaciones”, recuerda.

El biólogo José Antonio Márquez, que dirige la Plataforma de Cristalografía del Laboratorio Europeo de Biología Molecular, opina igualmente: “Es una de las aplicaciones del método [AlphaFold], quizás no es tan relevante a nivel científico, pero sí en el sentido de empezar a transferir un descubrimiento en posibles aplicaciones”. Entre esas aplicaciones, Márquez destaca su uso para acelerar “la investigación en enfermedades genéticas y particularmente enfermedades raras, puesto que ayuda a generar hipótesis sobre el mecanismo que provoca la enfermedad”.

Maracaibo, viernes 29 de septiembre del año 2023

miércoles, 27 de septiembre de 2023

Un antropólogo en Marte

 

Oliver Sacks (1933-2015), el neurólogo y escritor británico de origen judío de quien ya conversamos en este blog (https://tinyurl.com/dhvrxms7 ) nos presentaría en el libro “Un antropólogo en Marte” siete casos de pacientes neurológicos al cual más interesante.
Un pintor que tras un accidente de coche deja de ver el color; un cirujano cuyos continuos tics y compulsiones sólo remiten cuando opera o pilota su aeroplano; un hombre que tras toda una vida de ceguera recupera la vista sólo para darse cuenta de que no sabe ver; y una profesora autista capaz tan sólo de tratar y comprender a los animales, y quien ante la complejidad de las emociones humanas queda tan perpleja, que se siente como “un antropólogo en Marte”.

Sacks, en cierto modo también se sentiría compartiendo esa condición de sentirse como antropólogo en Marte, ante sus “relatos paradójicos” e insistiría en que no se trataba tanto de qué enfermedad tenía la persona, sino de cómo la persona se hallaba atrapada en su enfermedad. La tesis del autor es que el asunto no es “curarse” ya que algunas de esas enfermedades como el autismo, el síndrome de Tourette, la acromatopsia, entendemos que no admiten curación; se trataba entonces de aprender a vivir con ellas, a pesar de lo grotescos que sean algunos de sus síntomas y de lo diferente que puedan sentirse los pacientes respecto a los que denominamos seres normales.

El doctor Sacks no era sólo un médico atento, intuitivo y perspicaz, además era una persona que compartía las vidas de sus pacientes y aplicaba el método empático en su investigación. En siete parábolas sobre la mutabilidad de la condición humana, Oliver Sacks demostraría su excepcional talento como narrador, su vastísima cultura y su capacidad para hacer que estos personajes a primera vista estrambóticos, acaben pareciéndonos familiares y normales.

Otro de los libros de Oliver Sacks muy interesante se titula “Musicofilia. Relatos de la música y el cerebro” (Anagrama, 2009). Como es sabido, el tema del significado de la música es uno de los problemas más viejos y controvertidos alrededor de este misterioso arte, y ha dado muchos quebraderos de cabeza entre aquellos autores que se han interesado en la música; compositores, filósofos, sociólogos, antropólogos, musicólogos y escritores, cada uno desde sus respectivas áreas y enfoques, se han visto arrastrados por los cantos de sirena de la pregunta sobre que es realmente la música…

Oliver Sacks al comienzo de este libro, insiste en que la música es necesaria y fundamental para la vida humana. Sacks plantea que “seres alienígenas enormemente cerebrales si deciden descender a la Tierra para asistir a un concierto, no entenderán que les ocurre a los humanos cuando hacen o escuchan música, pues a ellos no les pasa nada. Para Sacks, son escasos los humanos que carecen del aparato nervioso que les permite apreciar tonos y melodías. Un fenómeno que Sacks denomina “la musicofilia”, surge desde la infancia, y es algo que va más allá y que está arraigado en la naturaleza humana. “La musicofilia” se define como nuestra afinidad con la música, algo que es fundamental y central en todas las culturas.

A esta apreciación estructural y en gran medida inconsciente de la música se añade una reacción emocional muchas veces intensa y profunda. Vladimir Jankélévitch, como filósofo opina que la música actúa sobre nosotros, sobre nuestro sistema nervioso, e incluso sobre nuestras funciones vitales. Durante esta travesía el ser humano es susceptible de sufrir diversas distorsiones, excesos y averías musicales, el autor relata un gran número de casos clínicos en los que describe diversas dolencias neurológicas relacionadas con la música. Un antropólogo en Marte, es un libro que el autor dedica enteramente a los efectos de la música en el cerebro, y por tanto, en la vida.

Daniel J. Levitin cuyo último libro, El cerebro y la música, ha sido traducido recientemente al español y ofrece una visión unificada de este tipo de experiencias de fácil lectura y de modo coherente, permitiendo con ello su comprensión por parte del lector común. Sacks elaboraría un extenso análisis de la identidad humana a través de fenómenos como la amusia (o incapacidad para sentir la música), la imaginería musical excesiva e incontrolable, las alucinaciones musicales, las melodías pegadizas que se repiten incesantemente en nuestra cabeza, o los “trastornos de destreza” que afectan a los músicos profesionales.

La música, es un factor clave para la identidad, ya sea de una manera patógena o como un agente positivo a la hora de tratar enfermedades como el Parkinson, el síndrome de Tourette, el síndrome de Williams, la demencia, la afasia, la amnesia o el autismo. Para Sacks, todos los pacientes con estas enfermedades y muchas otras podrían reaccionar de manera intensa y específica a la música la idea de una terapia musical surgiría a finales de los años cuarenta, relacionadas con la gran cantidad de soldados que regresaban de los campos de batalla de la Segunda Guerra Mundial con heridas en la cabeza y lesiones cerebrales traumáticas o lo que clínicamente se denomina “fatiga de combate” o “neurosis de guerra” (el equivalente a “estrés postraumático”).

Sacks relata cómo la terapia musical afecta especialmente a pacientes con la enfermedad de Parkinson. Los movimientos y percepciones de la gente con Parkinson son demasiado rápidos o demasiado lentos, si la música está presente, su tiempo y velocidad tienen prioridad sobre el parkinsonismo mientras dura la música, a la velocidad de movimiento que les era natural antes de la enfermedad la terapia musical es muy útil para las personas que sufren la enfermedad de Alzheimer. La música que ayuda a los pacientes con Parkinson posee un fuerte carácter rítmico, no tiene por qué resultar familiar o evocativa. En Alzheimer su objetivo son las emociones, las capacidades cognitivas, los pensamientos y los recuerdos, si bien este objetivo podría parecer demasiado complejo y casi imposible en pacientes con un Alzheimer avanzado), la percepción musical, la sensibilidad, la emoción y la memoria musicales pueden sobrevivir mucho después de que otras formas de memoria hayan desaparecido. Cuando los pensamientos y mundos que parecían haberse perdido del todo” música, existe en ese “yo” que sobrevive en alguna parte de sus cerebros.

La imaginación musical es rica y variada casi todos somos capaces de imaginar, interpretar y canturrear melodías en nuestras cabezas. la música interna, la que suena en nuestras cabezas. Muchos compositores, no componen en un instrumento, sino mentalmente, con el instrumento de su imaginación. Beethoven, siguió componiendo años después de haberse quedado sordo. no hace falta ser compositor o intérprete para desarrollar las facultades de una vívida imaginación musical puesto que todos, en mayor o menor grado, tenemos música dentro de nuestras cabezas, y podemos imaginar, escuchar y (re)producirla mentalmente todos tenemos música sonando sin parar dentro de nuestras cabezas.

El libro de Sacks ofrece una vasta panorámica de las complejas relaciones entre la música y el cerebro, ya sea a través de casos clínicos, de anécdotas de músicos profesionales o de ejemplos extraídos de la vida cotidiana. No hace falta tener estudios musicales ni ser una persona especialmente “musical” para disfrutar de la música o responder a ella en los niveles más profundos. Existen zonas específicas del cerebro que están al servicio de la inteligencia y la sensibilidad musical pero se diría que las respuesta emocional a la música está muy extendida, de manera que incluso en una enfermedad como el Alzheimer la música aún puede percibirse, disfrutarse y provocar una respuesta.

Para los pacientes de Alzheimer la música no es un lujo sino una necesidad. Oliver Sacks insistiría en la necesidad de no trivializar la música, el hecho de que podamos oírla en cualquier sitio y momento, no nos haga olvidar la suerte que tenemos al poder disfrutarla, sentirla y vivirla de forma natural.

Maracaibo, jueves 28 de septiembre del año 2023

Amadeus


Amadeus fue una película fuera de época, que bajo la dirección de Milos Forman se enfocó en la fatal obsesión de Antonio Salieri con la genialidad de Mozart y con los roles protagónicos de Tom Hulce y F. Murray Abraham, el filme se convirtió en uno de los más vistos y celebrados del año 1984.

Precisamente se estrenaba en 1984, el año de la distopía imaginada por George Orwell en su novela homónima. El 84, un año en el que la cultura parecía que empezaba a cambiar al menos musicalmente, en la radio se escuchaba “Self Control” de Laura Branigan, y “Jump” de Van Halen, con otros artistas como Tina Turner, Phil Collins, Cindy Lauper y Prince. En tecnología, el inicio de las franquicias y secuelas publicitarias de Apple comenzaban a dominar el mercado y lo harían durante décadas, y en el cine ya veíamos a Blade Runner dirigida por Ridley Scott y Los cazafantasmas, los Gremlins, Indiana Jones y el templo de la perdición, y Karate Kid . En política, Ronald Reagan era el presidente de Estados Unidos, de esta manera en el contexto social y cultural, una película que duraba 2 horas 40 minutos sobre un compositor del siglo XVIII no parecía estar destinada a tener mucho éxito. Pero no fue así.

Amadeus nació como una obra de teatro ideada por Peter Schaffer en base a especulaciones y rumores sobre la supuesta rivalidad entre el austríaco Wolfgangus Theophilus Mozart y el italiano Antonio Salieri. El encargado de adaptar la obra para la pantalla grande fue, el director checoslovaco Miloš Forman que había ganado el Oscar en 1975 con Atrapado sin salida, y se interesó por esta obra que también es un relato sobre la locura oscilando entre el drama y la comedia. Los límites borrosos entre lo que fue real y lo que inventa la película son secundarios si se los compara con el impacto cultural que tuvo.

En el imaginario colectivo, Peter Schaffer y Milos Forman redefinieron a figura de Salieri convirtiéndolo en un concepto "La cochina envidia". El argumento, en apariencia, era simple. Salieri un compositor respetado y venerado por la corte del archiduque austríaco aficionado de la música José II, Salieri es de los que “entienden” sobre arte y su fama ante el emperador se derrumba cuando aparece la figura bufonesca de Mozart, un joven, mujeriego, irrespetuoso, poco serio y vulgar. Salieri es una figura trágica porque es el único que parece darse cuenta de sus propias limitaciones y de la genialidad de su nuevo rival.
Salieri no puede comprender por qué él, siendo un creyente y devoto de Dios, es merecedor de tal castigo. En la reimaginación de Mozart como un enfant terrible, Tom Hulce, apareció con una risa estridente que Salieri interpretaba como una burla de Dios. Así, el verdadero protagonista de la historia no es Mozart, sino Salieri. El punto de vista de la película está anclado en ese personaje, que confiesa haber “asesinado” a la voz de Dios. Explicaba el director Forman que “la obsesión de Salieri tenía que verse reflejada en la cara del actor”, y Salieri luciría una expresión mortalmente seria y viste ropas oscuras que contrastan t con las pelucas y atuendos coloridos de Mozart.

Salieri se siente traicionado, porque es profundamente religioso, siente que hizo todo para Dios y lo único que pide a cambio es talento, cuando de pronto conoce la música de Mozart… Muchas personas se darían por vencidas, pero Salieri se enfrentaría al destino. Saul Zaents, quien años más tarde se embarcaría en la adaptación de El paciente inglés, se encargó de la producción de la película que recrearía la vida en Viena en el siglo XVIII. La película se filmó en Praga, donde fue el estreno de Don Giovanni y la genialidad de Mozart siempre fue admirada.
Cuando se encendían las cámaras, Hulce (Mozart), intencionalmente, no respetaba el libreto para confundir a Murray (Salieri), de modo que, en una producción descomunal, la obra no solo reflejaba la conflictiva relación de Salieri ante Mozart, sino la de Mozart con su padre, un hombre serio y devoto de la fe cristiana, todo sumado a la relación de los espectadores y los críticos con el arte con el filme.

Es cierto que Salieri y Mozart se conocieron y trabajaron juntos. Algunos historiadores especulan sobre la gravedad de la rivalidad que existió entre ambos. Mozart compuso su última gran ópera, La flauta mágica, entre vómitos, sudor y fiebre mientras en su delirio, creía que las visitas de una mujer que le encargó un réquiem para su difunto marido eran las visitas del Ángel de la muerte. En la película, ese rol lo ocupa Salieri, y la leyenda cuenta que, cuando Salieri intentó suicidarse cortándose la garganta, admitía haber envenenado a Mozart, de modo que la película comienza con esa confesión.

Algunas de las escenas o diálogos que parecen inventados realmente ocurrieron. El emperador José II realmente le corrigió a Mozart, luego de una función de El rapto en el serrallo, señalándole que la obra tenía “demasiadas notas”, y no es difícil trasladar la imagen del emperador a la de cualquier productor que trata de revisar el trabajo de un artista.

Contra todos los pronósticos, Amadeus fue una de las películas más taquilleras del año. La película le encantó a la crítica y ganó 8 premios Oscar, incluyendo la mejor película, la mejor dirección y el mejor actor para F. Murray Abraham. La versión latina del nombre griego Theophilus, como se llamaba Mozart, tiene dos posibles interpretaciones: el “amante de Dios” o “amado por Dios”. Ambas interpretaciones sirven para los dos protagonistas de esta historia. Maracaibo, miércoles 27 de septiembre del año 2023
Maracaibo, miercoles 27 de septiembre del año 2023

lunes, 25 de septiembre de 2023

Recreando un ensayo…


Carlos Yusti (Valencia, Venezuela,1959) es pintor, y ha realizado alrededor de 40 exposiciones individuales e intervenido en 20 exposiciones colectivas de pintura. Como editor, fue cofundador de la revista Zikeh y del grupo literario Animales Krakers en Valencia y formó parte del equipo de la revista cultural Predios. Tambien fungió como director editorial de las revistas impresas Fauna Urbana y Fauna Nocturna. Como escritor ha publicado los libros Pocaterra y su mundo (1991), Vírgenes necias (1994), Cuaderno de argonauta (1996), De ciertos peces voladores (1997), Los sapos son príncipes y otras crónicas de ocasión (2006), Dentro de la metáfora: absurdos y paradojas del universo literario (2007), Para evocar el olvido y otros ensayos inoportunos (2007) y Poéticas del ojo (escritos sobre arte).

Nos recordaba Carlos Yusti en un ensayo literario publicado en la revista “Carcavas” (Año I, Número 2 -2021), algunos detalles sobre los últimos días en la vida del filósofo Friedrich Wilhelm Nietzsche (1844-1889) y de cómo iría a terminar “en una habitación de manicomio comiendo sus propios excrementos”.

Aquel radical planteamiento de Nietzsche el filósofo, de que “Dios ha muerto”, y la importancia de la voluntad del poder y del superhombre, no impedirían que Friedrich Wilhelm Nietzsche cayese bajo los embrujos seductores de Lou Salomé (1861-1913). La joven rusa, ante las propuestas de Nietzsche y de Rée, les plantearía a los tres que viviesen en una comuna célibe intelectual, discutiendo filosofía, literatura y arte.

Nietzsche, inicialmente, entusiasmado con lo que llamó "una santísima trinidad", aceptó sus razones y viajarían con ella por Italia, Suiza y Alemania los dos amigos y la madre de Salomé. Nietzsche volvió a proponerle matrimonio, pero Salomé le dijo que, no se casaría con él ni en ese momento ni en el futuro. Para no perderla por completo Friedrich Wilhelm sugirió que se tomaran una foto que se volvió famosa.

En 1887, la convivencia llegó a su fin debido a un hombre llamado Friedrich Carl Andreas, y la mujer que le había dicho "no" a Nietzsche y a varias de las mentes más destacadas de la época, le dijo "" a Andreas, un profesor de estudios orientales con la condición de que jamás tuvieran relaciones íntimas entre ellos y así fue. Se convirtió en Lou Andreas-Salomé quien vivió con él hasta el día de su muerte, en 1930.

En 1988 Nietzsche escribió cinco libros basados en sus voluminosas notas que pensaba reunir bajo el título de La voluntad de poder. Su salud pareció mejorar y aquel verano estuvo de buen humor. Pero hacia finales de 1888, sus escritos y cartas empezaron a revelar una sobreestimación patológica de su estatus. Desde 1867, Nietzsche venia siendo tratado por una infección sifilítica que finalmente lo llevaría a la crisis mental de enero de 1889, la cual a la postre terminaría con de la vida pensante del filósofo, aunque viviría, perdido en sí mismo, hasta 1900.

El 3 de enero de 1889 Nietzsche sufrió un colapso mental en Turin… Yusti brevemente se refirió a la crisis nerviosa de Nietzsche del 7 de abril de 1888 en plena calle y de cómo Davenport al trascribir las impresiones del filósofo sobre la ciudad de Turin, “una urbe luminosa y de apariencia aristocrática”.

Guy Davenport, se refiere a la claridad de la ciudad, aquella que nace de esa especie de la “luz metafísica en Turín”, donde precisamente “toda la ciudad es amarilla o café rojizo”. Y en aquel entorno luminoso de la ciudad, “habría de ser en la propia Turin, donde un inesperado final llega para Nietzsche el 3 de enero de 1889, cuando en la plaza Carlo Alberto vio cómo golpeaban cruelmente a un viejo caballo de tiro y el trató de defender al caballo, abrazándolo y llamándolo hermano, y seria en ese momento cuando su mente se oscureció para siempre”.

De este trágico incidente, el director húngaro de cine Béla Tarr y Ágnes Hranitzky, filmarían la película El caballo de Turín (A Torinói ló, 2011) la película dirigida fue premiada con el Gran Premio del Jurado en el Festival de Berlín de ese mismo año, y ganaría el Premio Internacional de la Crítica Fipresci. El filme de Béla Tarr no sigue la trayectoria de Nietzsche, sino del caballo y de su dueño durante seis días.

Yusti nos relata la manera como el cineasta a través de la vida del caballo, del cochero y de su hija, nos muestra otro incidente, de cuando un individuo que llega pidiendo aguardiente a la casa, se sienta a discurrir en una perorata sin interrupción que dura casi seis minutos ofreciendo un discurso que recuerda al Zaratrusta de Nietzsche. La película termina así, sin que aparentemente haya sucedido nada, aunque “en verdad ha pasado algo vital, profundo, terrible e intangible”…

Carlos Yusti señalaba en su ensayo, como la luz “lógica y geométrica de Turín se contrapone a la oscuridad borrosa por la brisa y el polvo de la película de Béla Tarr”, para finalmente, citar un interesante texto del libro “Formas breves” de Ricardo Pligia donde dice que: “…la llamada locura de Nietzsche que, como el suicidio de Sócrates, es un acontecimiento inolvidable en la historia de la razón occidental. Lo increíble es que la escena es una repetición literal de una situación de Crimen y castigo de Dostoievski, cuando Raskólnikov sueña con unos campesinos borrachos que golpean un caballo hasta matarlo. Dominado por la compasión, Raskólnikov se abraza al cuello del animal caído y lo besa. Nadie parece haber reparado en el bovarismo de Nietzsche que repite una escena leída”.

Para concluir tras asimilar todo los relatado en este ensayo, al leerlo es posible asumir parafraseando a Yusti, que es prácticamente imposible “no sentirse atrapado como una mosca en esa gran telaraña de la literatura”…

Maracaibo, martes 26 de septiembre del año 2023

sábado, 9 de septiembre de 2023

Carmen


Cuando era un muchacho de 9 a 10 años, tuve un profesor de piano… Alvino Solivo, semanalmente me fue instruyendo en descubrir la música en los secretos del Wurtlizer de la casa, el piano que solamente era usado por mamá. Ante una acuarela con un paisaje de Venecia, que enmarcado se sostenía ante el piano, se suponía que yo, ya ducho en teoría y solfeo, debería ejercitarme con Hanon el pianista virtuoso, Czerny y muchos ejercicios de autores que no recuerdo, quizá porque no los estudiaba. Esto me llevó a que sabiendo ya cómo mover mis dedos para sacar los sencillos acordes que llegaban a mi mente, abandonase mis rigurosas clases, lamentablemente.

Entre las sencillas partituras que aprendí a leer y a interpretar, una de ellas recuerdo con especial cariño; era “La canción del toreador” y desde entonces supe que era de “Carmen” la ópera del músico francés George Bizet. El piano siguió en su sitio y lo hacía sonar mamá, interpretando entre otras la Polonesa de Chopin, mientras yo intentaba crear acordes de música popular… Más adelante, ya en bachillerato, nuestro genial compañero “el viejo” Pablo Lasala nos deleitaba con el concierto para piano y orquesta de Serguei Rachmaninoff mientras nosotros soñábamos con la Marilyn del filme “viviendo arriba” y padeciendo todos “la comezón del séptimo año”.

Me parece que ya he contado como fue que en mi primera visita a Budapest, en un hotel de la cadena Internacional, y detrás del telón de acero, estando bajo la regadera con agua tibia, -toallas gruesas con olor a lavanda, lozas con flores azules- mi sorpresa fue grande al escuchar en el televisor encendido, los compases de “la canción del toreador” y corrí secándome hasta el televisor para admirar atónito, a Harry Belafonte y a Dorothy Dandridge cantando en la película Carmen Jones, doblada en un idioma que no entendía -no sabía si era ruso, o húngaro- y recuerdo que sin doblaje en las canciones, Carmen le decía a su amado militar …“You are for me and I am taboo”. Carmen Jones la película musical de 1954 fue protagonizada por Dorothy Dandridge y Harry Belafonte, y estuvo producida y dirigida por Otto Preminger.

Después, o antes y desde siempre, escuché y sabía de “Carmen la que contaba dieciséis años, Carmen la hermosa de la pradera, que linda era, con su sonrisa Carmen de primavera” y puede que siguiera luego con el señor juez que le diga la verdad, que se ido el carnaval y uno escuchaba aquel merengue por Los Cañoneros o Los antaños del stadiun, música muy caraqueña, pero lo cierto es era que esta Carmen, siempre era para mí la imagen de la bella hija de Charles Barry y Ligia Lezama, la inolvidable Mayra Alejandra. La había visto en el cine. Carmen la que contaba 16 años es el título del filme de 1978 de Roman Chalbaud representando a la famosa -allí tropicalizada- Carmen de Bizet, con un Miguel Ángel Landa de Guardia Nacional celoso y William Moreno el torero que no era Escamillo, ni el ambiente era otro que el característicamente sórdido del cine de Chalbaud.

Días atrás (https://tinyurl.com/puy3tn2h) hablaba del Monte Carmelo y de la virgen del Carmen y entre tantas doctoras de cuantas me tocó conocer durante mi “exilio capitalino” en el IAP de la UCV, formando “los anatomopatólogos del futuro”, conocí muchas colegas, todas hermosas y recuerdo a varias Carmelas, una era Camauta y otra de estirpe hispana, era Carmenchu, quien usaba rímel en su ojos negros y a veces dejaba el rastro de su mirada en los oculares de los microscopios, pero hay una muy especial que es primerísima, la única neuropatóloga de Venezuela. Carmen Lara, quien siempre fue una brillante y competitiva estudiante y es ahora la heredera de los conocimientos de Jesús Enrique, -Henry- González Afonso. Contamos con ella en Neuropatología.

En mi adolescencia conocía a una Carmencita que era muy querida de todos y tenía una mamá que se vestía de andaluza llena de pepas y faralaos y usaba “robacorazones” en sus peinados. Íbamos siempre a sus cumpleaños en los predios de la avenida Rafael María Baralt, pero con los años fue una muy triste noticia cuando supe que había fallecido en el terremoto de Caracas del año 64.

Hace unos días en el mes pasado(https://tinyurl.com/536jjj5b) hablábamos en este blog del “El Arreglito” una habanera creada por el músico vasco Sebastián Iradier y de cómo fue que Bizet la tomaría “prestada” para su ópera Carmen. Ahora todos podemos por YouTube escuchar en la voz de Maria Callas la melodía de la famosa habanera de Carmen “El amor es un pájaro rebelde” y así es como he regresado mentalmente al piano de mi casa, a mi madre y a la canción del toreador.

Georges Bizet(1838-1875) fue un compositor francés muy exigente, nacido en una familia de músicos, ingresó en el Conservatorio de París con tan sólo nueve años. En 1857 gano un prestigioso Premio de Roma que le permitió proseguir su formación en Italia. De regreso a Francia, compuso las óperas Los pescadores de perlas (1863), La hermosa muchacha de Perth (1867), y La arlesiana (1872), sin mucha suerte hasta Carmen (1875) considerada obra maestra del teatro lírico galo.

La caracterización musical y dramática de Carmen (1874-1875), la convertiría en una de las obras de más éxito en la historia de la ópera, y aunque el estreno de Carmen fue casi un fracaso, seria precisamente este mismo realismo el que liberó el genio de Bizet. Profundamente afectado por violentas e injustas críticas, Bizet falleció la noche de la trigésimo tercera representación de Carmen. Poco antes había destruido la mayor parte de sus manuscritos que vacilaba en confiar a un editor…

NOTA: Para mis consecuentes lectores; aunque este blog anda desde 2013 y a diario he tratado de escribir desde el 2019, debo ausentarme al hermano país para gestionar la visa americana en el pasaporte, y esto me obligara a hacer un receso de unas dos semanas. Espero regresar a mediados de este mes de septiembre.

Maracaibo, sábado 9 de septiembre del año 2023

viernes, 8 de septiembre de 2023

Del esqueleto cuticular


Los genes involucrados en la construcción del exoesqueleto -entre ellos los que codifican para proteínas cuticulares-, constituyen un excelente modelo experimental para el estudio de la expresión genómica durante el desarrollo. Sin embargo, los estudios en biología molecular de proteínas cuticulares están sólo en sus inicios. Se han realizado pocos trabajos sobre este asunto.

La existencia del exoesqueleto representa para los artrópodos una restricción en tamaño y forma. La cutícula es cambiada varias veces durante el desarrollo, permitiendo el crecimiento. El desarrollo se produce en forma discontinua, y en distintos estadios. El proceso de transición entre un estadío y el siguiente es denominado muda. De acuerdo a estos cambios, los insectos se dividen en dos grandes grupos: holometábolos y hemimetábolos.

Los holometábolos, o de metamorfosis completa, sufren un cambio completo en la forma del organismo. Ejemplo de éstos son las moscas y mosquitos (Dípteros) y las mariposas (Lepidópteros), cuyos estadios-larvales son de tipo anelidiano, blandos y marcadamente diferentes del adulto, un hexápodo, alado y generalmente mucho más rígido. En los hemimetábolos o de metamorfosis incompleta, los estadios larvales, son usualmente denominados ninfas, y son bastante similares al adulto. Las cucarachas y langostas son ejemplos de insectos hemimetábolos.

El desarrollo de los insectos holometábolos abarca un estadío embrionario, y varios estadios larvales, seguidos por un estadío pupal, durante el cual se produce una gran reorganización tisular y las estructuras del adulto se generan a partir de grupos de células que han permanecido sin diferenciarse hasta este momento. Estas son las células de los discos imaginales y los histoblastos. Las cutículas de los distintos estadios son sintetizadas por distintos linajes celulares.

En la síntesis de las cutículas larvales interviene la epidermis larval únicamente, en tanto que las cutículas pupal y adulta son sintetizadas por células de la ex-epidermis larval y células de linaje imaginal. Dependiendo de los estadios, la nueva cutícula puede tener propiedaes fisicas y biológicas distintas de las de la cutícula anterior. En insectos holo'metábolos, las cutículas larvales, pupal y adulta son usualmente muy distintas: es flexible y parcialmente extensible durante el crecimiento de la larva, la pupal es menos flexible y la de adulto está en gran parte esclerotizada.

La cutícula de los artrópodos está compuesta fundamentalmente por quitina y proteínas. Constituye una importante adquisición evolutiva: sirve a la vez de esqueleto externo, ofreciendo una superficie donde anclar los músculos y de interfase con el medio ambiente. En los insectos, la cutícula reviste todo el cuerpo y los apéndices, los tubos traqueales, los ductos de ciertas glándulas y las regiones anterior y posterior del tracto digestivo. Puede ser blanda y elástica, o dura y rígida, y adaptarse a distintas funciones, desde permitir la visión hasta brindar protección física mediante estructuras muy duras, como en los coleópteros (escarabajos).

El grosor, flexibilidad, resistencia y permeabilidad de una cutícula son características que dependen de su composición. El compartimento cuticular no es una estructura inerte, sino que está metabólicamente controlado por la epidermis mediante secreción, endocitosis y transporte de iones y moléculas a través de la membrana plasmática.  La estructura de la cutícula ha sido descrita en numerosos insectos, mediante estudios por microscopía óptica y electrónica. Todas las cutículas descritas son variaciones de un mismo esquema fundamental. Están formadas por capas, siendo las dos principales la epicutícula, que es la más externa y delgada, y la procutícula, que constituye la mayor parte de la cutícula, seguida inmediatamente por la zona de deposición o zona de autoensamblado. Esta se halla en contacto directo con la epidermis, constituida por una monocapa de células que secretan los componentes cuticulares.

En el conjunto de cutícula más tegumento, el tegumento constituye una unidad anatómica y metabólica bien diferenciada del resto del animal y se denomina epidermis. Cada una de las capas mencionadas está compuesta por sub-capas, las cuales corresponden a distintas actividades secretorias de las células epidérmicas. Estas capas son distinguibles por microscopía electrónica y la composición de algunas de ellas no se conoce aún definitivamente.

Los resultados de estas investigaciones apoyan la idea de que durante el desarrollo de los insectos holometábolos “se disparan" secuencialmente distintos programas que dirigen la morfogénesis y diferenciación. En la epidermis, el programa de construcción del exoesqueleto es activado varias veces durante la vida del animal, de manera que la expresión de proteínas cuticulares constituye un buen modelo de regulación genómica durante el desarrollo.

En los dípteros, se activarían en los distintos estadios, grupos de distintos genes codificantes para proteínas cuticulares. En Ceratitis capitata, estudios in vivo, han determinado con precisión el momento de síntesis de PCG-lOO, proteína cuticular pupal mayoritaria. Esta proteina se expresa sólo durante las 24 horas siguientes a la eversión de la cabeza de la pupa. Es decir, el gen correspondiente estaría inactivo la mayor parte del tiempo de vida del insecto y se activaría específicamente en el momento en que existe una activa maquinaria de síntesis de cutícula: entre las 48 y 64 horas se acumula en la cutícula pupal la mayor parte del material proteico que la constituye. La regulación de la síntesis de esta proteína estaría a cargo de la hormona de la muda (B-ecdisona), la cual directa e indirectamente es capaz de ejercer el control de la expresión genética a nivel transcripcional.

En Drosophila, no se conoce en detalle el mecanismo por el cual la hormona de la muda controla la expresión de los genes que codifican para proteínas cuticulares. Aparentemente, sería más complejo que la simple unión de un complejo hormona esteroide-receptor a secuencias del ADN.

En el caso de otras proteínas de expresión variable a lo largo del desarrollo, como las proteínas de la hemolinfa, la B-ecdisona parece ejercer un doble control: a nivel transcripcional y traduccional. Se ha iniciado en colaboración con otros grupos el estudio de los niveles de fiecdisona durante el estadío pre-pupal y pupal temprano. Los resultados hasta la fecha han sido poco concluyentes ya que los valores de dosaje de hormona para un momento dado presentaron una gran dispersión.

Aunque suene demasiado sofisticadamente especializado, este articulo vale para señalar detalles sobre la genética para destacar la importancia de la regulación genómica en el desarrollo de todos los seres vivos, desde los insectos hasta los humanos.

Maracaibo, viernes 8 de septiembre de 2023

jueves, 7 de septiembre de 2023

Del Monte Carmelo


La Virgen del Carmen o Nuestra Señora del Carmen es la denominación que suele recibir Santa María del Monte Carmelo, es una de las diversas advocaciones de la Virgen María. El nombre de mi madre, quien era conocida como Muruja, era “María Amelia Jacinta del Monte Carmelo”. Denominación que procede del monte Carmelo, en Tierra Santa, cerca de Haifa la mayor ciudad del norte de Israel erigida en las laderas del Monte Carmelo, actualmente la ciudad con el puerto marítimo más importante de Israel, situado en la bahía de Haifa, en el litoral Mediterráneo. Carmen o Carmelo derivan de la palabra hebrea Karmel o Al-Karem que se podría traducir como “el jardín de Dios”.

La advocación mariana da nombre a todas aquellas personas que se llaman Carmen, Carmela o Carmelo, quienes celebran su onomástico en la festividad de Nuestra Señora del Carmen, que la Iglesia católica conmemora el 16 de julio. La veneración de esta advocación mariana ha sido difundida en el mundo por la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo, llamados carmelitas.

La Virgen del Carmen se dice que fue la patrona del Ejército de los Andes liderado por el general José de San Martín que selló la independencia de Argentina, Chile y Perú. En España, Puerto Rico y Costa Rica es patrona del mar, y es la patrona de la Armada española. Es considerada reina y patrona de Chile, y de sus Fuerzas Armadas; es también patrona de la Policía Nacional, y del Ejército Nacional en Colombia; en Bolivia de sus Fuerzas Armadas; en el Perú es “alcaldesa perpetua” de la ciudad de Lima y en Venezuela es patrona del Ejército.

El escapulario del Carmen es el hábito de la Orden Carmelita, bajo la protección y patronato de Nuestra Señora del Monte Carmelo, advocación de la Virgen María como Reina y Señora del Monte Carmelo. ​En su versión reducida, ha servido, probablemente, como prototipo del resto de escapularios. La fiesta litúrgica del Nuestra Señora del Monte Carmelo, el 16 de julio, se asocia popularmente a la devoción al Escapulario.

Según la tradición, la Virgen María se apareció a San Simón Stock, Prior General de la Orden del Carmen en el año de 1251, a mediados del siglo XIII. La primera referencia a esta tradición, data del siglo XIV, y explica que San Simón Stock, era un inglés de gran santidad y devoción, quien en sus plegarias le pedía a la Santísima Virgen que favoreciera a su orden con algún privilegio y la Virgen se le apareció portando en las manos el Escapulario y entonces le diría: “Este es para ti y los tuyos un privilegio: quien lo porte será salvado de todo".

La tradición marca el año 1251, y no el día preciso, pero la fiesta del 16 de julio tiene origen en una fiesta antigua de los Carmelitas. En la Edad Media, el hábito era parte esencial de la identidad de los miembros de las órdenes religiosas. La Constitución Carmelita de 1369 estipulaba excomunión automática para los carmelitas que cantaran misa sin el escapulario, y las constituciones de 1294 y 1324 consideraban una falta seria dormir sin el escapulario.

Con el moderno estudio académico de los primeros siglos de la Orden Carmelita, aparecieron dificultades para la historicidad de la aparición. La primera mención de la aparición de Nuestra Señora a San Simón Stock es de finales del siglo XIV, casi 150 años tras la fecha en la que generalmente se databa la aparición, 1251. Tampoco existen referencias en las primeras noticias sobre la vida y milagros de San Simón Stock. Entre estas pruebas confusas, se ha sugerido, que otro carmelita en lugar de San Simón Stock tuvo una visión mística cuya historia fue posteriormente asociada a la vida del santo. Una historia dominica compilada por Gerard of Frachet en 1259-1260, relata la muerte en 1237 ahogado de un santo dominico, el beato Jordan de Sajonia, frente a la costa de Acre, Israel (cerca del Monte Carmelo). No hay que olvidar que, durante la Edad Media, la cuidadosa historiografía no es como existe hoy en día, siendo lo común recubrir las creencias teológicas y espirituales en la forma de un cuento o historia.

En la Corona de Castilla la primera fundación fue en Valladolid, en el convento de San Pablo de la Moraleja (1315). ​Su propagación fue rápida por toda la península ibérica, llegando a Sevilla en 1358, ciudad desde la que se impulsará la creación de la destacada Provincia Bética Carmelitana, en 1499. En España prácticamente todos los pueblos y ciudades de la costa española rinden culto religioso a la Virgen del Carmen, organizándose procesiones y vistosas romerías marítimas cada 16 de julio. Nuestra Señora del Carmen ha sido Coronada Patrona de la Armada Española y de la Ciudad de San Fernando (Cádiz).

Durante el siglo xvi, Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, introdujeron profundas reformas en el seno de la Orden dando origen a los "Carmelitas Descalzos", una nueva congregación más austera que se separa de la orden matriz, la cual pasó a llamarse "Carmelitas Calzados" o de la "Antigua Observancia". Es la época cuando empezarán a surgir las primeras comunidades femeninas de religiosas carmelitas en todo el territorio español.

En el sur de Italia, en el pueblo de Acquafondata, se rinde culto a la Virgen de Monte Carmen en el pequeño santuario construido en el lugar de la aparición de la Virgen María el 16 de julio de 1841. La ciudad de Palmi conmemora cada 16 de noviembre el denominado "milagro de la Virgen del Carmen". En la noche del 16 de noviembre los fieles improvisaron una procesión y cuando la procesión llegó al final de la ciudad, un violento terremoto sacudió todo el distrito de Palmi, y quedaron arruinadas la mayor parte de las casas, pero sólo hubo nueve víctimas de sus 15.000 habitantes, ya que casi toda la población estaba “procesionando” la estatua de la virgen. La Iglesia católica reconoció oficialmente el milagro, con el decreto emitido por la Santa Sede el 22 de septiembre de 1895, siendo coronada la estatua el 16 de noviembre 1896.

En Hispanoamérica la Virgen del Carmen es venerada en la Argentina, México, Perú, Bolivia, Panama, Guatemala, Nicaragua, Puerto Rico, Uruguay, Ecuador, Costa Rica, Chile, Colombia y Venezuela. En Venezuela la devoción a la Virgen del Carmen es una de las más populares. En el pueblo San Joaquín de Carabobo, se venera desde hace ya 300 años. En Boconó del Estado Trujillo existe la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen y también en la ciudad de Carache en el Municipio Pampanito, en el municipio Sucre del estado Trujillo celebran a Nuestra Señora del Carmen también en la Parroquia Sabana de Mendoza cuya Iglesia lleva por nombre a Nuestra Señora del Carmen. En el Municipio Colina y en el Municipio Píritu del Estado Falcón; también es venerada en la isla de Margarita en las ciudades de Porlamar, La Asunción y Juangriego.

En Petare, del Estado Miranda, es la patrona de la parroquia de Araira y en el sector El Calvario en el Hatillo, en el Barrio de Candelero en Ocumare del Tuy del Estado Miranda. También es venerada en el Estado Táchira, en la iglesia Virgen del Carmen de Cuqui en Rubio, desde 1891. En el estado Zulia, en La Guajira Venezolana, desde los tiempos de la Colonia, los misioneros destinados a la evangelización de los pueblos indígenas Añú y Wayuu inculcaron la devoción a su patrona y protectora. En el estado Zulia se celebra en la población de Carrasquero, del Municipio Mara y es una devoción que se le profesa desde hace más de 70 años. En San Rafael de El Moján desde la llegada de su imagen proveniente de Italia cuyo destino original era Maracaibo, según se afirma que la imagen no quiso partir de esta población. En el municipio La Cañada de Urdaneta, en la parroquia el Carmelo (lugar de nacimiento del General Rafael Urdanteta) y en San José de Potreritos se celebra, devoción de más de 200 años el 16 de julio y el 15 agosto respectivamente.

En Mérida, en el municipio Campo Elías celebran el 31 de mayo la Bajada y Coronación de la Virgen del Carmen en la Iglesia Ntra. Sra. del Carmen de Montalbán de la ciudad de Ejido, después, continúan las peregrinaciones y llegan las tan esperadas fiestas patronales. Es patrona de Barquisimeto con una celebración desde los inicios de la colonización española. En la parroquia, Aguada Grande, Municipio Urdaneta del estado Lara La Virgen del Carmen es la patrona que intercede por ellos en los sembradíos de cocuiza y maíz; además las mujeres solteras aprovechan a pedirle novio. En la ciudad de Guasdualito, en el estado Apure, es la patrona desde 1835. En Ciudad Guayana, la parroquia de Vista al Sol celebra en la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, una procesión donde se entonan cánticos religiosos y calipsos a la patrona parroquial.

Maracaibo, jueves 7 de septiembre de año 2023

miércoles, 6 de septiembre de 2023

Anatomistas


Santiago Ramón y Cajal recibió un premio Nobel y hasta hoy perdura como el único premio en ciencias de la Academia Sueca que ha sido otorgado a quien era cien por ciento español; el otro científico español con un Nobel, es Severo Ochoa, quien trabajaba en Estados Unidos y compartía su nacionalidad de origen en Venezuela con la de adopción, cuando le fue concedido el galardón pues obviamente el bioquímico asturiano nunca habría dispuesto en España de los medios y del entorno necesarios para desarrollar su trabajo. Pero, esa dificultad tan evidente, como tantas otras hasta más duras, no fueron nunca un impedimento para Ramón y Cajal.

Recordemos que en 1869 su familia se trasladó a Zaragoza, donde su padre había ganado por oposición una plaza de médico de beneficencia y fue nombrado profesor interino de disección, de manera que ya en 1873 Santiago se licenció en Medicina en la Universidad de Zaragoza. Asignado a la sanidad militar (1874), fue destinado a Cuba como capitán médico de las tropas coloniales, y allí contrajo malaria y tuberculosis. A su regreso a España, en 1875, fue nombrado ayudante interino de anatomía de la Escuela de Medicina de Zaragoza.

En 1877, se doctoró por la Universidad Complutense de Madrid; por esa época, habría de ser Maestre de San Juan quien le iniciaría en las técnicas de observación microscópica. Cajal sería nombrado director de Museos Anatómicos de la Universidad de Zaragoza en 1879, y más tarde Catedrático de Anatomía de la de Valencia (1883), donde destacó en la lucha contra la epidemia de cólera que se desencadenó en la región valenciana.

Parte del mérito de Ramón y Cajal consistió en ver algo inédito donde otros ya habían mirado. En 1888, mientras estudiaba al microscopio las “mariposas del alma”, como llamaba a las neuronas de sus preparaciones, “observó que en el árbol de prolongaciones de un tipo de neuronas llamadas piramidales las ramas no eran lisas, sino que estaban cubiertas de diminutas espinas”.

Ramón y Cajal propuso que estas espinas funcionaban como conexiones entre esas prolongaciones neuronales, llamadas dendritas, y los axones, los cables que lanzan el impulso desde el cuerpo de la neurona. Por tanto, las espinas dendríticas actuarían como receptores en la transmisión nerviosa. “No le creyeron”…“Los neurohistólogos de su tiempo, sobre todo alemanes, decían que sus dibujos solo eran interpretaciones artísticas de la realidad”. Ramón y Cajal hizo famoso su grito de guerra: “puestos a tenacidad, a los aragoneses que nos echen alemanes”...

En 1920 Cajal (https://tinyurl.com/yzhr84yd) renunció a la dirección del Instituto Nacional de Higiene y el rey Alfonso XIII autorizó la fundación del Instituto Cajal de Investigaciones Biológicas, que quedaría instituido dos años más tarde y al que Cajal tras abandonar la docencia universitaria dedicaría sus esfuerzos hasta su muerte. Todavía de este período (1933) sería la publicación, en del trabajo titulado «Neuronismo o reticulismo», en la revista Archivos de Neurobiología, aportación que se considera su testamento científico.

La investigación en el campo de las espinas dendríticas continúa revelando hallazgos y se ha señalado que dormir después el aprendizaje estabiliza las espinas recién formadas para consolidar la memoria, un mecanismo que explica por qué el sueño ayuda a fijar los nuevos conocimientos. Posteriormente, un grupo de investigadores italianos (Pagani et al., 2021) publicaron un artículo en la revista Nature Communications en el que señalan que hay un exceso de sinapsis en la corteza cerebral de las personas con autismo y un estudio en la revista The Journal of Neuroscience hace años identificaba un gen cuyos defectos provocan una sobreabundancia de espinas dendríticas, otro fenómeno descrito como característico del autismo. Aunque las mutaciones en CTNND2 relacionadas con el autismo son muy raras, la identificación de este gen en relación con el trastorno supone una pieza más en el rompecabezas que supone el autismo para los investigadores.

Pero hoy quiero aprovechar al mencionar nuevamente en el blog a don Santiago Ramón y Cajal (https://tinyurl.com/2eedmsyu) para poder hablar brevemente sobre otro importante anatomista español, don Aureliano Maestre de San Juan (1828-1890) quien nació en Granada en 1828. Estudió medicina en Granada y Madrid, licenciándose en 1847. Ejerció la medicina y la cirugía hasta que, en 1860, ganó por oposición la cátedra de anatomía de la Facultad de Medicina de Granada. La influencia de la escuela francesa fue muy intensa al principio, hasta que asumió los principios de la escuela alemana encabezada por Rudolf Virchow.


Antes de centrarse en la histología publicó varios trabajos sobre problemas médicos. En 1849 tradujo el tratado anatómico de Joseph E. Pétrequin. en 1856, en la revista El Siglo Médico describiría el cuadro clínico y anatomopatológico como una falta total de los nervios olfatorios con anosmia. En 1872 publicó el Tratado de anatomía general... precedido del conocimiento y manejo del microscopio, de la preparación y conservación de objetos micrográficos.

Maestre de San Juan se presentó a las oposiciones a la cátedra de segundo año de anatomía. No las ganó, pero logró impresionar, a Rafael Martínez Molina, quien era el verdadero creador del Instituto Biológico y defensor de las teorías histológicas de Charles Robin, hecho que, unido a su prestigio, hizo que se creara la primera Cátedra de Histología en la Facultad de Medicina de Madrid, en 1873.

A Maestre se le debe también la fundación de la Sociedad Histológica Española en 1874 que supo ser integradora de los esfuerzos de los cultivadores de la disciplina y afines. En 1879 publicó el Tratado de histología normal y patológica, precedido de un resumen de técnica histológica.

Lamentablemente Aureliano Maestre en 1888 sufrió un accidente de laboratorio que lo dejó ciego. Un año y medio más tarde (1890) moría en Alicante casi olvidado y en la pobreza.

Maracaibo, miércoles 6 de septiembre del año 2023

martes, 5 de septiembre de 2023

Para contar un cuento…

 

Yo siento, “en el alma una alondra cantar” le decía Rubén el poeta, a Margarita Debayle, pero no miento si les digo que ni siquiera percibo un sonoro cantar, ni un acento, con mi tinitus, mejor ni lo intento, soy habitante del país nacional, es fácil entender la situación actual… Sobrevivimos sin desfallecer en el intento, y es proverbial; más, sin embargo, he decido de momento, que un buen cuento creo poderles contar, como un divertimento; de ello seguro estoy y haré el intento… Pues aquí voy…

El cuento nos relata sobre un marqués que tenía, un palacete brillante-no un palacio de diamantes, ni tampoco poseía -un rebaño de elefantes, nuestro amigo, era sencillamente un marqués -tampoco el de Carabás con el gato que inventó aquel francés- y aunque parecía musiú; era sencillamente un marqués criollo, gordito y rubicundo, a quien sus padres bautizaron como Edmundo; y he aquí el meollo…

Era colega nuestro, aquel señor marqués, les juro, era simpático, un tipo de fiar, muy “buena gente”, algo pasado en kilos por demás, él inocentemente -a través de su señora esposa- nos había extendido la invitación para cenar, no era otra cosa. Invitados estábamos, nosotros, “par de dos”, y siempre amigos nuestra presencia provocaba las más inusuales y disparatadas ocurrencias, esas que se pueden rememorar sin perder la decencia, lo siento, mas con cierto rubor… Lo pienso y queriendo engañarles, acá aparezco como relator de este cuento.

“Como han pasado los años, como cambiaron las cosas”, sin ser Rocío quien entonaba la canción todo regresa en un simple reacomodo mental, nada se pierde y lavoasiéricamente se transforma para poder lograr “el cuento echar”. Con gran emoción, ya del marqués, en su mansión estábamos, y al saludar a Edmundo, del navegante marsellés ambos nos acordamos. ¡De la novela pués! Montecristo: no era marca de traje ni tabaco cubano lo que la mente de mi compinche germinó, ante el condenado conde, que no marqués en su imaginación de lector memorioso, de sopetón pero angustiado casi le preguntó dizque inocentemente. ¿Inmundo, es su nombre de usted? ¡Sorpresa del marques! Oh, pues, perdone usted, marqués Edmundo…

Metida ya la pata, mi compinche presto rectificaría. ¡Es Edmundo! ¡Perdón! ¡Qué tontería! Seguramente Usted, se apellida Dantés. Como el padre de Alexander Dumás. El del castillo de If, ¿será?, pués… ¡Cachafás! ¿Si? El propio conde de Montecristo. ¿No es verdad? Trece años allí preso, pero al final escapó, salió ileso… Lo recuerda ¿Verdad? Se pudo quedar tieso. ¡Pero qué bien!, se escapó... Pues mire usted, y me disculpará señor marqués, le agradecemos mucho su invitación… Así era y ha sido siempre mi especial amigo, el inocente gentil, decente y siempre, muy ocurrente...

Apareció, o sea, hizo irrupción ahora, nada menos que su señora, quien, ya nos conocía y sin embargo nos había invitado, y al hacerlo ella se había arriesgado, y esto pensé, achacarle a ella misma ser la culpable de aquel desaguisado; mientras el buen marqués algo mosqueado, evidentemente, asimilaba su primer encuentro con ambos dos, nosotros… Se hizo entonces presente un joven con pantalón corto de kaki bien planchado, tostado por el sol y con un turbante disfrazado, muy respetuosamente hizo una venia y nos llamó “sahibs”. Quedamos asombrados. Habría de conducirnos al elegante comedor, que era imponente, con cuatro grades candelabros iluminando una gran mesa… Pude escuchar a mi amigo preguntándole al Gunga por su corneta, ¿si, la tenía?, más el discípulo de la diosa Kali, ni sonreía, mientras yo ante aquel Gunga Din resucitado pensé en Rudyar Kipling y hasta en Mogli y sus micos, ya convidados ante la mesa...

Mejor aclaro para ustedes que era este, u otro, mi amigo, un veterano marinero avezado, él decía haber servido en la marina armada de su patria. Se percibía un Lord Jim y se bebía su café con hielo. Realmente yo me valía de la amistad para extraerle cual sanguijuela cuanto él sabía de la navegación a vela, había yo releído a Melville y a Conrad no en Disneylandia, mientras él sus andanzas me relataba desde Malmo hasta Islandia, tormentas en los mares de un norte congelado, iba explicándome el real significado de la vela cangreja, del estay, la mesana y tener los obenques tensados, de aventuras en las costas de Goa, y lo que pudo hacer ante un tifón, en fin, la suculenta cena finalizando con un macedónico frutal postre de mangos, casi ya terminando estábamos, cuando olvidaba un asunto especial sobre mi amigo: los tangos.

Cuando era joven siempre estuvo presente el tema musical y era mi amigo el marinero, como dije, todo un experto en tangos. Era genial. Para mi con el rasgar de un cuatro escuchaba cantar a la Morillo y me sobraba, en todas las taguaras de mi tierra caliente, pero aprendí con él a precisar en las rockolas, donde se hallaban los mejores cuarenta y cinco del zorzal, y, ¡de bola!, era aquel un vainero musical, y ya al final, barloventeando, siempre atracábamos en el mismo lugar, -al andar cerveceándonos digo-, el mismo botiquín de medio pelo con el morocho del Abasto trinando, y escucharle cantar “sus ojos se cerraron y el mundo sigue andando”…

De música, de libros, otros disparates y casi siempre de cantares, disfrutaría con mis amigos, cada vez que pudimos conversar; cada ocurrencia daría el tono, y serían ellos quienes casi siempre inventaban cuentos, interminables fueron, tantos que no se pueden relatar sino desgranaditos, y ya al finalizar pediremos ya casi listos, la del estribo, aunque lo siento, siempre habría una de más, la de la casa, y arrancar a cantar sin las alondras del poeta nicaragüense, entonando a Chelique, o a José Alfredo, y siempre Manzanero, pero supongo que eternamente, desde cualquier rockola será la voz de Lila la que habrá de marcar el tono para que el Gato afine su guitarra y le eche bolas, el Brujo insista en berrear un bolero, puntee el cuatro a la zurda el gran Marote y así sigamos en virtual mollejero, pasando un buen y largo rato.

NOTA: esta reláfica va, como decía uno de mis ingeniosos amigos “sin alucinaciones personales” y hoy, la fotografía, corresponde a una especie de “adendum in proof” pues pertenece a una etapa lejana, aunque relativamente reciente, y es que al fin y al cabo, todo es comprensible pues las taguaras y los amigos de las parrandas se van difuminando en un relente… Quizás por ello, queda la impronta, y me consta que surgen estas aquí llamadas “reláficas” para dejar constancia coral o gráfica de que nadie nos podrá quitar del medio “lo bailado”. ¡A Dios gracias! Y este cuento he terminado.

Maracaibo, martes 5 de septiembre del año 2023