viernes, 31 de octubre de 2025

Neuropatólogo en el Vargas

 

A finales de 1974 me llegó una oferta interesante de los neurocirujanos del hospital Vargas de Caracas.  Estaban iniciando trabajos de cirugía estereotáxica, los Drs Del Corral y Galera neurocirujanos de Caracas, cuando me invitaron a conocer todo un aparataje en una gran habitación donde en el futuro se operarían los enfermos de Parkinson y se lograrían avances para operar las lesiones de Sistema Extrapiramidal. Inicialmente habían comenzado a hacer cirugía experimental en animales, y el planteamiento era que me fuese a trabajar con los neurocirujanos y los neurólogos del hospital Vargas.

 

Ya hemos comentado en otras ocasiones que al pasar el Sanatorio Antituberculoso de Maracaibo a Hospital General, los fondos que recibía el Laboratorio de Microscopía Electrónica (ME) se habían reducido considerablemente por lo que pensé que en el año 1975 gozando de mi año sabático correspondiente de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad del Zulia, pudiese ser admitido como neuropatólogo en el Instituto de Patología del hospital Vargas de Caracas con el compromiso de poner a funcionar un ME que estaba paralizado y de organizar reuniones para neurólogos y neurocirujanos.


En aquel entonces, el Director del Instituto, estaba encargado de Ministerio de Sanidad y Asistencia Social y me toco ingresar a su Instituto donde tuve la suerte de conocer personalmente al doctor Pedro Luis Ponce Ducharne, cuando él era el Jefe del Servicio de Neurología del hospital Vargas quien me impresionó por su amable personalidad.

 

Aprovecho estos recuerdos para hablar de este médico, un brillante neurólogo quien tuvo gran influencia en la medicina nacional, y contribuyó al desarrollo de la electroencefalografía, de la electromiografía y los estudios de potenciales evocados; igualmente utilizaría novedosas técnicas de angiografía, así como el Doppler carotideo y la medición ultrasónica cerebral en sus pacientes. El doctor Pedro Luis Ponce Ducharne era quien tenía que “amansar” semanalmente los ánimos usualmente caldeados en las reuniones clínico patológicas de los neurólogos y los neurocirujanos, que iniciaríamos todos los viernes en el pequeño auditórium de Anatomía Patológica del hospital Vargas de Caracas.

 

Me tocaba conversar con el doctor Ponce y con su esposa Celina ambos neurólogos, para preparar los casos que presentábamos todos los viernes en la mañana, y lo hacíamos después de haber cortado y examinado previamente los hallazgos de los cerebros de las autopsias. En aquellas reuniones alternaban los casos clínicos con casos quirúrgicos del destacado grupo de los neurocirujanos del doctor Martínez Coll (los residentes hablaban de “Don Gato y su cuadrilla”) quienes sostenían con los neurólogos médicos, pugnaces discusiones de lo más animadas que hacían de todos los viernes unas reuniones espectacularmente inolvidables.

 

Muchas veces terminaban acusando al doctor Jaime Boet, el adjunto de Neurología de averiguar los diagnósticos que yo llevaba para desvelarlos en la reunión, con inviolable secreto, y hablaban de que Jaime sabía los diagnósticos para supuestamente chalequear los planteamientos de los neurocirujanos. Siempre la mesura del doctor Ponce Ducharne aplacaba los ánimos encendidos, y así lo recuerdo con cariñosa admiración.

 

Potra parte, confiando en mi preparación, el doctor Ponce Ducharne me asignaría un residente de Neurología para que estuviese conmigo en Anatomía Patológica y fue para mí una inolvidable experiencia docente de mutuo aprendizaje con pasantes neurólogos que estaban formándose; recuerdo especialmente a Freddy González Merlo, a Douglas Barrios, y una pequeñita doctora que parecía una muñeca y cuyo apellido se me eclipsa ante el recuerdo de su belleza.

 

Tras una corta enfermedad aguda, en 2020 a los 93 años fallecería doctor Ponce Ducharne. El doctor Rafael Muci Mendoza, ha relatado como le escribió a la doctora Elvira Ponce León una de sus hijas, médica y antigua alumna, pidiéndole algunos datos acerca de la vida de su padre el doctor Pedro Luis, para lo cual, ella le enviaría un hermoso escrito cuyo texto lo publicó el doctor Muci Mendoza el 12 de enero del año 2020, tal como fue escrito por su hija.

 

Lo más extraordinario fue que su padre, aún saludable y con excepcional claridad mental, había tenido la ocasión de leerlo y manifestarle con lágrimas en los ojos, lo hondo que había llegado aquel documento de amor de una hija a su progenitor… Yo, en este Blog, lapesteloca, me atreví a trascribirlo en enero del 2020 como una muestra conmovedora de cariño y en homenaje a quien fuera un verdadero Maestro.


 

Celina León Pedro Luis Ponce Ducharne tuvieron la fortuna de conocerse cuando eran instructores de la Cátedra de Anatomía de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela, cuando Pedro Luis, le daba demostraciones a Celina en la sala de disecciones. Con el correr de los años el Dr Ponce Ducharne fue fundador y jefe del Servicio de Neurología del Hospital Vargas de Caracas y de la Cátedra de Neurología Clínica de la Escuela José María Vargas en el Hospital Vargas en las cuales profesó con pasión y muchas veces con financiamiento personal, con desprendimiento absoluto y sin aspavientos, el ejercicio de su profesión. Con un grupo de prominentes especialistas también emprendió el desarrollo de Hospitales privados tales como la Clínica Rafael Rangel y el Instituto Diagnóstico donde ejerció su práctica privada innovadora en neurología.   

 

El final de aquella, mi gestión como neuropatólogo, fue inesperado. No logré reparar el ME del hospital, pero conseguí a través del CONICIT la donación de un ME Hitachi H500 de alta resolución, que me otorgaron para proseguir investigando con la colaboración del IVIC sobre el virus de la encefalitis equina venezolana. Hace un par de días hablábamos de que asumiría el compromiso de decir verdades sin pelos en la lengua y cumpliré mi cometido.

 

Lo sucedido, fue que el Director del Instituto de Patologia del hospital Vargas, hasta pocos días antes también era el Ministro de Sanidad, y el Dr Bruni regresó de su cargo Ministerial Le pareció entonces que un ME nuevo habría de ser un compromiso muy complejo, pues su interés estaba en mejorar la inmunofluorescencia en su Institución para los estudios de nefrología, por lo ya dicho, me sugirió que me regresara a Maracaibo -donde ya me conocían bien-: “es mejor ser cabeza de ratón que cola de león” me dijo, y tras unos cuantos días muy tensos, de común acuerdo, fui admitido en el Instituto Anatomopatológico (IAP) de la UCV que de momento dirigía el Dr Pedro Grases, a donde llegaría como Profesor Asistente con el aporte del ME Hitachi H500. 

 

En el IAP de la UCV ascendería a Profesor Titular, y estaría al frente de la dirección desde 1984 a 1995. Jubilado en 1988, mi permanencia en el IAP se extendería desde 1976 hasta el año 2005. I colorín colorao, hasta aquí ya he “acabao” este cuento que es historia patria.

 

Maracaibo, viernes 31 de octubre del año 2025

jueves, 30 de octubre de 2025

Relato teatral


En mi novela La Entropía Tropical (pags 185 a 195) está publicado el guion de “HIDROFOBIA” una obra de teatro, denominada “pieza teatral en tres escenas, con un juglar y un bufón que dirigen las acciones”. En su ESCENA III Antes de subir el telón, el bufón se sienta en el borde del escenario y súbitamente chifla con los dedos en la boca llamando al público.

BUFON: Aprovechen este instante, el juglar mi compañebrio, está en el baño, vamos a sonreírnos en este previo, o a carcajearnos, solo un momento, antes de que el cantante, con cara de jumento, se limpie su cargada, mente, de tunante. ¿Os reís? Oigo unas risitas vacilantes, diviértanse señoras y señores, antes de que regrese mi estimado juglar, sin trovadores, su cante es deprimente, es¡puachff!, si acaso no se ha ido por el caño. ¡Para allá me voy yo! Se pone de pie y prosigue. ...Antes de que suban el telón, ¡voy a hacer mutis por el forro! ¡Oh! ¡Horror! ¡Ya asciende el cortinaje, telón develador!

Escapa, corre, y renqueando, sale por un lado del escenario

Al subir el telón aparece un área del laboratorio del doctor Rodrigo Gartán quien con y su asistente técnico Chuchú Terán, están sentados ante un microscopio y examinan varias láminas de vidrio con preparaciones histológicas.

RODRIGO: Bueno Chuchú. ¿Vos te acordáis de los cortes que dimos para microscopía electrónica del cerebro de la niñita? ¿Te acordáis que los dividimos con cinco números, porque teníamos cinco fragmentos de cerebro distintos? Bueno, caete de a patrás. ¿A que no sabéis que es lo que estoy viendo ahorita mismo? CHUCHU: No sé, pero, para mañana ya salen todos los bloques y los podrá ver en el electrónico. RODRIGO: No te preocupéis, vos sentate y mirá por los oculares que yo te digo lo que vais a ver. Mirá bien, porque te voy a mostrar los cinco trozos de cerebro que me dio el doctor Aranda, y ¿sabéis que?, son de tres casos diferentes, casos que no tienen nada que ver con el cerebro de la niñita con rabia. ¿¡Cómo te quedó el ojo!? CHUCHU: Mirando por el microscopio. ¿Pero usted está seguro? ¿Cómo pudo ocurrir eso? RODRIGO:  recordá que la niñita del caso tenía más de dos años, esa lámina que estáis viendo es de un recién nacido. ¿Me entendéis? Le entrega una lámina de vidrio con un corte histológico y toma la que Chuchú le alcanza. ¿Veis unas masitas doradas alrededor de los vasos? Bueno, eso es lipofuscina, pigmento de las neuronas que se han muerto, porque ese cerebro es de una persona mayor de edad, se nota también algo de arterioesclerosis en los vasos cerebrales. Le entrega una nueva lámina a Chuchú quien la coloca en la platina del microscopio y mira de nuevo. ¿Vos veis una cosa azul, con nidos y cordones de células?; eso es un adenocarcinoma metastásico, puede que sea del colon, o del pulmón. Ahora decime vos Chuchú... ¿Cómo vamos nosotros a hacer en estas muestras el diagnóstico de rabia? Decímelo. CHUCHU: Solamente será como dice José Luis, con las de Billy Queen. Lo que no comprendo es como pudo ocurrir esto.

Es ese instante, súbitamente, el juglar y el bufón sueltan una estruendosa carcajada y comienzan a cantar a duo esa ranchera que dice: “Ando volando bajo”. Rodrigo y Chuchú, parecieran oírlos, miran hacia un lado y al otro, y parecieran no comprender que es lo que sucede, hasta que la ranchera entra en la frase de: “tú y las nubes me traen muy loco, tú y las nubes me van a matar”. Ambos entonces miran hacia el cielo… RODRIGO: Son cosas locas. ¿Verdad? Esto no es ni tan siquiera una broma de mal gusto, no es un disparate, es una mala jugada que refleja el grado de estupidez de mi colega Cesar Aranda. El pensará que nos engañó y estará muerto de risa imaginándonos en la búsqueda de un virus inexistente. CHUCHU: ¿Será que él no sabe lo de la niñita y las vacunas y los familiares? ¿No habrá pensado que le pueden clavar las ampolletas en la barriga a un puño de muchachitos en el pueblo? RODRIGO: ¡De bola que es verdad Chuchú! Por eso es que la Sanidad está tan urgida de que lleguemos a un diagnóstico rápido. No sé qué hacer, esto no es un error, es un horror. ¡Creo, que no puedo, no debo silenciarlo!

En este momento ya ha cesado la ranchera y el juglar abandona la escena, por un lado, mientras el bufón se adelanta al borde del escenario y chifla gesticulando para que bajen el telón.

La Entropía Tropical (Ediluz 2003) es una publicación de cuya venta se ha beneficiado absoluta y totalmente LUZ (actualmente está a la venta hasta en un local de la Biblioteca Pública de Maracaibo). En las páginas mencionadas, se relata el “drama” titulado “Hidrofobia” sin darle los visos de tragedia que podría tener, pues la circunstancia y el personaje cuyo nombre se ha falseado (César Aranda) son reales, o sea: existieron.

Aranda aparece como un médico joven, y está recién llegado de USA especializado en Neuropatología. Aranda había venido muy ufano y se pavoneaba de flux y corbata… Estaba recién empleado como anatomopatólogo en un hospital donde una niña atacada por un perro había fallecido con diagnóstico probable de rabia. Su jefe, el patólogo, le pidió fragmentos del cerebro de la autopsia para enviarlos a su estudio con el microscopio electrónico(ME) del Sanatorio, siguiendo un procedimiento de rutina es esos casos en el Maracaibo en la década de los 70 del pasado siglo XX. Aranda decidió jugarle una broma pesada a los investigadores del ME y ese error habría de costarle su cargo en el hospital de la Sanidad.

Este asunto podría haber concluido aquí, -por la broma de mal gusto fue despedido- pero él persistió en su empeño: el colega “Aranda” decidió enviar una carta al Colegio de Médicos acusando a quien usaba el ME para diagnosticar la rabia, de no estar calificado como neuropatólogo y exigía unas aclaratorias o constancias sobre su capacitación. Lo insólito para quien escribe esta crónica, es que el presidente y el secretario del Colegio de Médicos del Estado Zulia para la época eran personajes probos, y mis amigos muy conocidos, pero le dieron curso a la denuncia exigiendo constancias y demás certificados que nunca habrían de ser presentados pues aquello no era “una comedia de equivocaciones” sino un exabrupto, que nunca fue analizado con objetividad. Me mostraron la carta con sus errores de ortografía y para mí, eso bastaba y de sobra, mas no para ellos... 

Un mes más tarde, me tocó dictar unas conferencias por invitación de la Profesora Dra Isabel Téllez Nagel en la Universidad de Nueva York (Yeshiva University) para hablar sobre la patogenia y ultraestructura del virus de la encefalitis equina venezolana.  La historia de Aranda y sus reclamos fue uno de los muchos inconvenientes del Laboratorio de Microscopía Electrónica del Sanatorio cuando ya transformado en hospital General de Sur estaba en dificultades para financiar la investigación y aceleraría mi decisión de aceptar el “Año Sabático” (1975) que me correspondía en la Facultad de Ciencias Veterinarias para ejercer como Neuropatólogo en el hospital Vargas de Caracas durante el año 1975.

En este Blog lapesteloca, en enero del año 2016, se hablaría sobre  la Baronesa Dra Gabrielle ZuRhein (https://surl.lt/sclwuf), de su presencia en Budapest y de la importancia en la investigación y en la formación de la especialidad de Neuropatología.  De manera que podemos resumir lo conversado, como una de esas actitudes curiosas entre colegas y de equivocadas respuestas, supongamos que debidas posiblemente por desinformación de los organismos gremiales. Se han visto casos y cosas y se siguen viendo ejemplos como el que hemos querido reseñar en este breve trabajo que se inició con teatro y terminó sin resolverse gremialmente.

Como decía mi primo Ernesto, quien tenga oídos, que oiga y si tiene ojos, que vea…

En Maracaibo, el jueves 30 de octubre del año 2025

miércoles, 29 de octubre de 2025

A calzón quitado

 

La expresión ‘A calzón quitado’ se utiliza para indicar que algo se hace o dice sin tapujos ni engaños y de forma valiente, sin ocultar nada (podría utilizarse como sinónimo de la locución ‘hablar sin pelos en la lengua’).

El origen y sentido de esta expresión proviene del Siglo de Oro (siglos XVI-XVII) en el que hubo una corriente literaria en la que se decían las cosas tal y como se pensaban y sin ocultarse en florituras; de ahí que se utilizase el símil de ‘calzón’ (modo en el que se llamaba antiguamente a los pantalones), para indicar que algo se hacía o decía desnudo, sin artificio alguno.


Pero esta referencia de ‘a calzón quitado’ se hacía como alusión a las antiguas peleas en las que dos contrincantes luchaban cuerpo a cuerpo, utilizando únicamente sus manos y pies y estando totalmente desprovistos de cualquier arma e incluso prenda vestir (un claro ejemplo fue la lucha greco-romana.

En cierta época, cuando eran corrientes los castigos corporales, también se solía desnudar a la víctima para que sufriera la flagelación sin contar con la protección de la ropa. Azotar a alguien “a calzón quitado” significaba desnudarlo antes, una práctica que se llevaba a cabo en los casos más graves. En la actualidad, hablar con alguien “a calzón quitado” es hacerlo con sinceridad absoluta y sin rodeos ni remilgos, sin tener cuidado por el dolor que nuestras palabras le puedan infligir al interlocutor.

El uso primitivo de la expresión, aplicado al acto de ‘propinar una zurra’, aparece todavía en una crónica peruana publicada en 1938, bajo la firma de Juan A. Corrales, disponible en el corpus diacrónico de la Academia española: le sugirió la iniciativa de disponer que se chapara a mi hombre con el objeto de propinarle una latiguera a calzón quitado con fines terapéuticos.

Hablar a calzón quitado es una propuesta que en según qué momento, puede dar mucho que hablar. Pero como lo nuestro no es la política, sino la lengua (no el órgano muscular situado en la cavidad de la boca de los vertebrados y que sirve para gustación, entre otras muchas cosas, sino el sistema de comunicación verbal y casi siempre escrito, propio de una comunidad humana, en nuestro caso, la hispanohablante), trataremos, en vez de juzgar la propuesta, hablar de la expresión :hablar a calzón quitado.

Existen sitios web y enlaces sociales, como contacto@acalzonquitado.com Correos electrónicos  como; http://www.acalzonquitado.com/  También: Vero  A Calzón Quitado: Tu lugar seguro 233 publicaciones 34,6 mil seguidores. 717 seguidos. Creadores de contenido para derribar tabúes. www.flowcode.com/page/acalzonquitado. Creadora de las más y 3 más, y etc, etc.

Me dirán mis asiduos lectores… ¿A qué viene esta pesteloca tan fuera de tono? Debo aclarar que siento que estoy llegando después de 7años de escribir todos los días un artículo (pocas veces más largo de 3 cuartillas) a pesar de que este Blog funciona desde 2013 y 2014, recordemos que fue desde 2019 cuando decidí escribir un artículo TODOS LOS DÍAS y exceptuando algunos breves periodos de menos de una semana por razón de viajes, etc (restémosle 30 días), hago para ustedes el cálculo sobre 365 día del cada año.   En mi matemática “cachicamera” :

365 x 7 = 2.554 (-30 dias) 2.525 artículos

Bien, pues sucede que voy a relatar “a calzón quitao” algunos detalles personales que me han tocado vivir, antes de llegar en el próximo mes de noviembre si Dios así lo permite a los 86 años de edad, todo esto si me da salud para hacerlo. Estos artículos irán sin ningún carácter retaliativo, pero si con la curiosidad de mostrar las peculiares actitudes de diversos personajes que han tenido acciones, donde inesperadamente he sido sorprendido… De manera que usaré mi palabra escrita, sin cortapisas para relatar algunos eventos vividos personalmente, que me han parecido interesantes.

Como decía mi profesor de Historia de Venezuela en el 4to año de bachillerato “Vamos a empezar por el principio”: Algunos, conciudadanos o no, deben saber que soy un médico anatomopatólogo y que me dedique a la investigación, pero creo que pocos saben que no fui aceptado como profesor en la Facultad de Medicina de mi Alma Mater, la Universidad del Zulia.

Aquí van los detalles: después de 5 años (1964-1968) de entrenamiento en la especialidad de Anatomía Patológica en EEUU, y preparado específicamente en neuropatología, y microscopía electrónica, regresaba a Maracaibo (diciembre 1968) donde el Dr. José Ramón Guzmán ya había iniciado sus labores como neurocirujano y supuestamente yo era esperado en mi Facultad de Medicina, pero el Decano de la Facultad en persona, me informó que no tenían cargo disponible. ¡Sorpresa! Debo acotar que en paralelo y gracias a la idea del Dr. Pedro Iturbe de crear un Laboratorio de investigación con Microscopia Electrónica(ME) en el Sanatorio Antituberculoso de Maracaibo, al ofrecerme la oportunidad de dirigir esta labor bajo el auspicio del Dr. Fernández Morán quien ya vivía en el exilio, tuve la suerte de lograr realizar mis sueños y dedicarme a la investigación.

Esto (de no ser profe de Medicina en LUZ) que parece una sencilla anécdota, fue discutido en varias ocasiones en el Consejo de la Facultad de Medicina de LUZ donde privó el criterio de que era lo mejor para mi futuro, ya que tenía el ME del sanatorio y en Medicina iba tan solo a dar clases… Tenían mucha razón. Pero al coincidir en varias reuniones, recuerdo que a menudo me veía obligado a corregir al presentador para recordarle que era profesor de la Facultad de Ciencias Veterinarias de LUZ, y no de Medicina.

Sobre esta curiosa situación debo mencionar a mi amigo ya desaparecido Enrique Murcia Díaz, fotógrafo del Sanatorio y de la Facultad de Veterinaria quien me llevó a conocer al Dr. Parra Atencio. Muchos años más tarde, ya en este siglo XXI en el año 2006 agradezco igualmente al Dr Sergio Osorio Morales quien siendo Decano de la Facultad de Medicina me confirió el título de Doctor Honoris Causa de LUZ, de modo que actualmente ya jubilado soy profesor de la UCV, Honoris Causa de LUZ y Emérito de la Academia de Medicina del Zulia.

Quizás un accidente reciente me ha conducido a escribir con este desparpajo que nunca me ha caracterizado, pero, presiento que lo hecho es “recordando aquel proverbio que dice más vale tarde que nunca compadre”.

En Maracaibo, el miércoles 29 de octubre del año 2025

martes, 28 de octubre de 2025

La Villa y Juan de Chourio


La historia nos dice que la región del occidente de Venezuela denominada Perijá nace por instrucciones del Rey Felipe V, quien envió a don Juan Chourio e Iturbide con una cédula real para que iniciara el desarrollo y la población de la región. Juan de Chourio había nacido en La Villa de Ascaín, pueblo del Reino de Navarra en 1677 una ciudad que ahora pertenece al País Vasco Francés.

Chourio llega por primera vez a tierras perijaneras en 1716 y compraría las tierras de once haciendas productoras de cacao que habían sido abandonadas por sus dueños en vista del asedio de los indios motilones (Baris); las recibió con más de 100 esclavos y con el objeto de explotar sus ricas tierras, y minimizar la acción bélica de los indígenas de la Sierra de Perijá. Un dato importante es que don Juan de Chourio fue uno de los primeros exportadores de cacao en Venezuela, el cual denominó Cacao Maracaibo, producto que encontró en grandes siembras naturales en la sierra perijanera, y que aún permanecen, pero por no existir vías de penetración, no pudieron ser extraídos al comercio local e internacional. Luego de esto, decide viajar a España para solicitar ante el Consejo de Indias el título de Pacificador de los Indios de Perijá, Cédula Real que le fue concedida el 9 de mayo de 1722 por el Rey Felipe V, otorgándole el grado de Cabo Principal de esas tierras.

Juan de Chourio tuvo muchos adversarios durante la misión principal que le había encomendado el Rey, se sabe que era reconocido tanto en Europa como en América, como "Tratante de Negros aunque su misión era la fundación de un pueblo en las faldas de la Sierra de Perijá; por tal motivo, los Gobernadores de Maracaibo para la época, a quienes les preocupaba el poder y el dinero de Chourio, lo denunciarían ante la Corona por múltiples delitos, lo que produjo el embargo de sus bienes por presunto comercio ilícito.

Chourio también tuvo haciendas en el Sur del Lago de Maracaibo, donde dejó su legado y su apellido a través de generaciones de esclavos y sus descendientes, a quien siempre vieron como un buen amo. Sus últimos días los vivió en Maracaibo, 1757, muere en Maracaibo, a los 80 años de edad, Juan de Chourio e Iturbide, fundador de la capital del actual Municipio Rosario de Perijá del estado Zulia. Se le recuerda como un hombre con pundonor, con ideales cristianos, espíritu de trabajo y constancia en sus quehaceres.

En 1706 el gobierno español aceptaría que la Real Compañía de Guinea (radicada en Martinica) adquiriera negros esclavos para la corona española para las ciudades de Maracaibo, La Guaira y Cumaná. En 1707 Juan de Chourio tenía 29 años y residía en Martinica e instalo una finca con una oficina de 32 empleados en Willenstend con la idea de monopolizar el comercio de esclavos de las colonias holandesas. En 1709 Juan de Chourio será detenido, tiene ya 31 años y deciden deportarlo de Curazao, pero tenía tantas deudas con mucha gente que no querían que lo deportasen, sin embargo y a pesar de la oposición de la WIC(West Indishe Company de Amsterdam) Chourio ya había comprado en 1714,unos 1.200 esclavos y en 1715 compro 556 esclavos que llegaron sobrevivientes a Curazao. Tuvo que irse de la isla para no regresar jamás.

En 1709 Chourio fue acusado por el Gobernador de Maracaibo Pedro Esmaile de Lobato y Bobadilla por inundar su provincia con su mercancía humana traída desde Curazao sin ser empleado de la WIC. En 1718 el Gobernador era el coronel Francisco de la Rua Ferrer, de origen canario, era hijo de un Oidor de la Audiencia de Santo Domingo,  y  años más tarde llegaría a ser Gobernador y presidente de la Real Audiencia. No sería hasta estas fechas que la ayuda para luchar contra los motilones sería enviada a Perijá que facilitaría la entrada y penetración de don Juan de Chourio en Perijá. En 1723 Don Juan de Chourio marchó en los territorios del rio Palmar y fue en 1724 cuando se cree que se fundó la Villa del Rosario.

En 1724 el Rey embarga los bienes de don Juan de Chourio por fomentar el trafico de esclavos negros, pero en 1732 esta demanda fue revocada y fallece don Juan de Chourio en Maracaibo sin conseguir la pacificación completa de los indios. Será a él a quien se le atribuya la fundación de La Villa, aunque se cree que la Villa del Rosario fue realmente fundada por su sucesor, don Manuel García de la Peña, el capitán de la fragata “Bretaña” quien vendrá a ser el primer Marqués de Perijá.

El domingo 26 de octubre de 1732, fondeó en Maracaibo la fragata “Nuestra Señora de la Asumpción y San Juan Bautista”, que también era denominado “La Bretaña”procedente de Santa Cruz de Tenerife, y capitaneada por don Manuel García de la Peña. La fragata llegaba transportando a 20 familias, venidas principalmente de Lanzarote, vecinos de los pueblos de Mancha Blanca y del a Rodeo en las parroquias de Teguise, Yaiza y Haría quienes debieron abandonar sus hogares por la erupción de cuatro cráteres que vomitaban fuego y lava en la región de Tamanfaya. Las familias se refugiaron en la Parroquia de la Oliva, en la vecina isla canaria de Fuerteventura, como consta en el acta de bautismo de muchos niños hijos de padres lanzaroteños, emigrado a la isla por la calamidad padecida. En la fragata llegaban mercaderías con 70 toneladas de géneros de lencerías, lanas, sedas y otras 30 toneladas de aceite, pólvora, hierro labrado y por labrar, armas de fuego, vino, aceite y aguardiente. El navío “La Bretaña” capitaneado por don Manuel García de la Peña, con once familias lanzaroteñas, así como tres familias también de la Laguna y una de Santa Cruz de Tenerife. Los apellidos de algunas de estas familias, esposos con varios hijos eran: Vargas, Cabrera, Delgado, Pares, Camejo, García, González, Barroso, Miranda, Ramires, de La Cruz, Ramos, Mendes, Martín, Hernández, Marrero, Villavicencio, de Los Reyes, Landín, y Enrriques. Todos pasarían a ser los pobladores de La Villa del Rosario.

El marquesado de Perijá es un título nobiliario español concedido por el rey Carlos III por real decreto del 8 de agosto de 1776 y real despacho de 28 de octubre de 1776 con el vizcondado previo del Palmar a favor de José García de la Peña, sargento mayor del regimiento de caballería en la Villa de Perijá de Maracaibo. 2-El 12 de septiembre de 1844 por una Real orden de la Reina de España Doña Isabel Segunda, le fue concedido el título de Marquesa de Perijá a Doña María Luisa Sánchez Pleites., 3- María Luisa Sánchez-Pleités García de la Peña 1844-1850, 4- Fernando María Nieulant Sánchez-Pleités 1856-1869, 5- María Isabel de Nieulant y Villanueva 1870-1906. 6-VII José Federico López Nieulant 1906-1960, 7-José Miguel López Díaz de Tuesta 1961-2010, 8- IX Fernando Miguel González de Castejón y Jordán de Urríes 2012-2022.

En una villa aragonesa de la Provincia de Zaragoza nacieron 3 hermanos Martin, Juan y Pedro García de la Peña. Luego, Pedro, Lorenzo y Diego fueron sus descendientes quienes se trasladaron a la Rioja, Castilla y los territorios vascongados. Manuel García de la Peña, nació en Castro de Urdiales, provincia de Santander. Tras fundar la Villa del Rosario impulso la agricultura, instaló tanques para macerar el añil y sembraría extensiones de caña de azúcar; sus descendientes Joseph García de La Peña y García; José Trinidad, padre de los García Ávila:

José Antonio García Ávila tuvo 3 líneas de sucesores, los García-Duarte, Los García Vargas y los García Martínez cuya descendencia es señalada a continuación:

José María, tendrá 4 hijos; Nemesio, Carlos María, Luis Ángel y Manuel: sus descendientes son señalados para finalizar este breve trabajo:

Nemesio: Los García Méndez, los García Romero y los Nones García.

Carlos María: Los García Nebot: García MacGregor  - García Tamayo y  -García Araujo.

Luis Ángel: Los García Carías: García Belloso y - García Amado.

Manuel: Los García Arocha: Coll García- García Heny –Pardo Garcia- García Marquez- García Larralde.

 

Fuentes consultadas: 1) Fundadores de Perija “mestizos, migrantes y guerreros.(2009) Dr Nerio Enrique Romero González- 2) Los García de Perijá (2006) Dr Ernesto Garcia MacGregor.

Para el Blog lapesteloca en Maracaibo, el día martes 28 de octubre del año 2025

lunes, 27 de octubre de 2025

Clemente IV


De nombre secular Guido Foulques (1202-1268), conocido también como Guido el Gordo y literariamente como Clemens el Papa Gallus, fue el 183.er papa de la Iglesia Católica, entre 1265 y 1268.Guido Foulques era un eminente jurista y consejero del rey Luis IX de Francia, quien fue ordenado sacerdote hacia 1256. A la muerte de su esposa, ingresó en un monasterio franciscano de donde, fue reclamado para ocupar el obispado de Le Puy, cargo que ocupó de 1256 hasta que en 1259 fue nombrado arzobispo de Narbona para, finalmente, convertirse, en 1261, en el primer cardenal nombrado por el papa Urbano IV.

A la muerte de Urbano IV, en 1265, resultó elegido papa in absentia, pues se encontraba en una misión diplomática en Inglaterra; el cónclave cardenalicio reunido en Perugia, reclamaría la presencia del futuro Clemente IV, que se encontraba en tierras francesas tras su regreso de una misión desarrollada en Inglaterra como legado papal. Al llegar al cónclave se le informa que ha sido elegido, por unanimidad, papa; siendo consagrado el 15 de febrero de 1265.  Sería, a mi modo de ver, un Papa guerrero.

El hecho más significativo durante su pontificado fue el enfrentamiento que desencadenó la desaparición de la dinastía de los Hohenstaufen, casa de donde habían salido los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico desde 1138. Siguiendo la poltica de sus predecesores al objeto de frenar a Manfredo, hijo del fallecido emperador Federico II, mantuvo el ofrecimiento de la corona de Sicilia a Carlos de Anjou, hermano del rey francés Luis IX. Clemente IV comenzó entonces la predicación de una Cruzada siciliana que culminó con la organización de un ejército que derrotó y dio muerte a Manfredo en la Batalla de Benevento (1266).

En 1266, después de la Batalla de Benevento, el papa Clemente IV concedió en agradecimiento su escudo de armas al Partido Güelfo de Florencia como aprobación oficial de su supremacía y, por lo tanto, pudieron tomar el poder en muchas de las otras ciudades del norte de Italia. Solo quedaba un miembro de la dinastía, Conradino de Suabia, sobrino de Manfredo e hijo de Conrado IV quien intentando recuperar la corona de Sicilia y se enfrentó en 1268 a Carlos de Anjou en la Batalla de Tagliacozzo siendo hecho prisionero y ejecutado en Nápoles.

En 1264, Clemente IV renovó la prohibición del Talmud promulgada por Gregorio IX, quien lo había ordenado quemar públicamente en Francia e Italia. Si bien Clemente no condenó a muerte en la hoguera a quienes guardaban copias del mismo, en respuesta a una denuncia del Talmud por parte de Pablo Christiani, ordenó que los judíos de Aragón presentaran sus libros a los censores dominicanos para que fueran expurgados.

En febrero de 1265, Clemente convocó a Tomás de Aquino a Roma para servir como teólogo papal. Fue durante este período que Aquino también sirvió como maestro regente de los dominicos en Roma. Con la llegada de Aquino, el studium conventuale existente en Santa Sabina, que había sido fundado en 1222, se convirtió en el primer studium provinciale de la Orden, incluyendo el estudio de filosofía (studia philosophiae) como la prescribían Aquino y otros en el capítulo de Valenciennes en 1259, una escuela intermedia entre el studium conventuale y el studium generale. Este studium fue el precursor del Colegio de Santo Tomás en Santa María sobre Minerva y de la Universidad Pontificia de Santo Tomás de Aquino (Angelicum).

En los años 1267-68, Clemente mantuvo correspondencia con el Abaqa Kan del ilkanato mongol. Este último propuso una alianza franco-mongola entre sus fuerzas, las de Occidente, y el emperador bizantino Miguel VIII Paleólogo (suegro de Abaqa). El papa Clemente acogió la propuesta de Abaqa sin comprometerse, pero le informó de una próxima Cruzada.

En 1267, el papa Clemente IV y el rey Jaime I de Aragón enviaron un embajador al gobernante mongol Abaqa en la persona de Jayme Alaric de Perpignan. En su carta de 1267 escrita desde Viterbo, el papa escribió: Los reyes de Francia y Navarra, tomando en serio la situación en Tierra Santa y decorados con la Santa Cruz, se preparan para atacar a los enemigos de la Cruz. Nos escribisteis que deseábais uniros a vuestro suegro (el emperador griego Miguel VIII Paleólogo) en ayudar a los latinos. Os alabamos abundantemente por esto, pero no podemos aún deciros, sin haber preguntado antes a los gobernantes, qué camino planean seguir. Les transmitiremos vuestro consejo, para iluminar sus deliberaciones, e informaremos a vuestra Magnificencia, mediante un mensaje seguro, de lo que se habrá decidido.

Aunque los sucesores de Clemente continuaron manteniendo contactos diplomáticos con los mongoles durante el resto del siglo, nunca pudieron coordinar una alianza real. Pocos meses después, Clemente IV murió y fue enterrado en el convento dominico de Santa María en Gradi, a las afueras de Viterbo, donde residió durante todo su pontificado. En 1885, sus restos fueron trasladados a la Basílica de San Francisco, en Viterbo. ​

El carácter privado de Clemente IV fue elogiado por sus contemporáneos por su ascetismo, y es particularmente elogiado por su desinterés en promover y enriquecer a sus propios familiares. También ordenó al estudioso franciscano Roger Bacon que redactara el Opus Maius, que está dirigido a él. A su muerte, debido a las divisiones irreconciliables entre cardenales, estos graves enfrentamientos en el seno del Colegio Cardenalicio, dejaron sumida a la Iglesia en un periodo de interregno de 4 años. Finalmente, fue elegido sucesor suyo Gregorio X.

Las Profecías de san Malaquías se refieren a este papa Clemente IV como Draco depresus (‘El dragón perdido’ o ‘El dragón vencido’), nombre que hace referencia al hecho de que en su escudo de armas aparece un águila aprisionando entre sus garras a un dragón.

Maracaibo, lunes 27 de octubre del año 2025

domingo, 26 de octubre de 2025

Ernest Hemingway

Ernest Miller Hemingway (1899 -1961) Narrador estadounidense cuya obra, considerada clásica en la literatura del siglo XX, que ha ejercido una notable influencia por la sobriedad de su estilo con sus los elementos trágicos y el retrato de la época que representa. Recibió el premio Nobel en 1954.

 

Ya se había iniciado en el periodismo comenzando su carrera escribiendo para el Kansas City Star, pero sus ansias de aventura y acción le llevaron a alistarse como conductor de ambulancias en la Primera Guerra Mundial. Durante la contienda fue herido de importancia y pasó tiempo recuperándose antes de retomar su carrera periodística.


De vuelta a Estados Unidos escribiría hasta que se trasladó a París, como corresponsal extranjero donde alternó con las vanguardias y conoció a Ezra PoundPablo PicassoJames Joyce y Gertrude Stein, entre otros. Participó en la Guerra Civil Española y en la Segunda Guerra Mundial como corresponsal, experiencias que luego incorporaría a sus relatos y novelas.

 

Ernest Hemingway es contemporáneo de Faulkner y su actitud es la de un ser desilusionado, próximo al nihilismo con la aceptación de unos cuantos valores que para aquel tiempo bien podrían ser el credo de un mundo nuevo usando una técnica de la narración y de la expresión que sería considerada como característica de la literatura nacida en el periodo entre las dos guerras mundiales. Hemingway es parte de lo que Gertrude Stein denominó “la generación perdida”, aquella escuela de escritores norteamericanos que habían participado en la primera guerra mundial y se habían quedado en Europa desilusionados del mundo y de ellos mismos.

 

Uno de los personajes de Hemingway expresa: "El hombre puede ser destruido, pero no derrotado". Y uno de sus críticos corrobora: "Es un código que relaciona al hombre con la muerte, que le enseña cómo morir, ya que la vida es una tragedia. Pero sus héroes no aman mórbidamente la muerte, sino que constituyen una exaltación solitaria de la vida, y a veces sus muertes constituyen la salvaguarda de otras vidas". A este tipo de héroe suele contraponer Hemingway una especie de antihéroe, como su conocido personaje Nick Adams, basado en su propia juventud, y que hilvana buena parte de los relatos como una línea casi novelesca.

 

La aparente frivolidad y falta de mensaje en la narrativa de Hemingway corresponden a una clara respuesta frente a un mundo de fingimientos e insinceridades, con reacción en contra de una sociedad que funciona arrastrada por los convencionalismos basados en la hipocresía, falsedad y la diatriba. En su primer cuento, Allá en Michigan, escrito a la edad de 23 en Paris en 1931, habla de una muchacha enamorada de un herrero que la ignora, pero se va de caza con unos amigos y se emborracha y la seduce y no se habla del amor sino de la caza, la borrachera y la violencia.


Entre sus primeros libros se encuentran Tres relatos y diez poemas (1923), En nuestro tiempo (1924) y Hombres sin mujeres (1927), que incluye el antológico cuento "Los asesinos". Ya en este cuento es evidente su particular estilo de narrar que lo haría famoso. Sus relatos se sustentan en diálogos cortos que van creando un suspenso invisible, como si lo que sucede estuviese oculto o velado por la realidad. Otros cuentos también son antológicos, como "Un lugar limpio y bien iluminado", "La breve vida feliz de Francis Macomber", "Colinas como elefantes blancos", "Un gato bajo la lluvia" y muchos más.


Entre sus obras más conocidas están Paris es una fiesta (1924), Fiesta (1926), Muerte en la tarde (1932), Las verdes colinas de Africa (1925), Por quién doblan las campanas (1940), El viejo y el mar (1952), Las nieves del Kilimanjaro (1953). En todas ellas, Hemingway expresa una visión del mundo donde el hombre es víctima de sí mismo en medio de una sociedad llena de convencionalismos. En algunas de sus mejores historias hay un elemento simbólico sobre el que gira el relato, como si fuera una metáfora que se desarrolla en el plano de la realidad. El autor explicó su técnica con el modelo del témpano de hielo, que oculta la mayor parte de su materia bajo el agua, dejando visible sólo una pequeña parte a la luz del día.

 

Sus novelas tal vez sean más populares, aunque menos perfectas estilísticamente que los cuentos. Sin embargo, Fiesta (1926) puede ser considerada una excepción; en ella se cuenta la historia de un grupo de norteamericanos y británicos, integrantes de la llamada "generación perdida", que vagan sin rumbo fijo por España y Francia. En 1929 publicó Adiós a las armas, historia sentimental y bélica que se desarrolla en Italia durante la guerra. En Tener y no tener (1937), condena las injusticias económicas y sociales. En 1940 publicó Por quién doblan las campanas, basada en la Guerra Civil española. Esta obra fue un éxito de ventas y se llevó a la pantalla.


Su novela Adiós a las armas(1929), es impresionante en el marco de las novelas bélicas donde los horrores de la guerra, se mezclan con el apasionado amor que siente el protagonista por una enfermera que morirá en el momento de dar a luz mezclando la violencia y el sufrimiento con sus propias experiencias como conductor de ambulancias. La mayor parte de su obra plantea a un héroe enfrentado a la muerte que cumple una suerte de código de honor; de ahí que sus protagonistas sean matones, toreros, boxeadores, soldados, cazadores y otros seres sometidos a presión.

 

Su obra pareciera una especie de romanticismo moderno, que aúna el sentido del honor, la acción, el amor, el escepticismo y la nostalgia como sus vectores principales. Sus relatos inaugurarían un nuevo tipo de "realismo" que, aunque tiene sus raíces en el cuento norteamericano del siglo XIX, lo conduce hacia una cotidianidad dura y a la vez poética, que influiría en grandes narradores posteriores como Raymond Carver.

 

En 1952 publicaría un cuento escrito ya en su finca cubana de Finca Vigía, El viejo y el mar, con el que ganaría el Premio Pulitzer. En este cuento, el protagonista es un modesto pescador de La Habana, donde Hemingway vivió y escribió durante muchos años enfrentado a la naturaleza. Algunos críticos han visto en este texto la culminación de su obra, porque en él confluyen el humanismo y la economía artística; otros, sin embargo, opinan que éste no es lo mejor Hemingway, por una cierta pretensión didáctica. En 1953 recibió el Premio Nobel de Literatura.

 

En sus últimos años siguió escribiendo, ya hacia el final de una vida aventurera, cansado y enfermo su última y esperada novela nunca vio la luz, dejando solo algunos nuevos cuentos y relatos. Ernest Hemingway uno de los escasos autores míticos de la literatura contemporánea murió en 1961 de un disparo de escopeta en la cabeza, barajándose tanto la posibilidad de un accidente como la del suicidio.

 

Maracaibo, domingo 26 de octubre del año 2025