Inglaterra ha tenido en Robert Louis Stevenson (https://bit.ly/3OgL260) al mayor escritor de aventuras conocido. Siempre que Stevenson evocó el mar en sus escritos, lo habría de lograr con un convincente vigor expresivo. El género de novela que Conrad cultivó es la novela de aventuras y está generalmente basada en algún melodrama sobre un fondo de exotismo y de lejanía. Conrad es un Stevenson más literario, de cualidades más misteriosas, que lo hacen más profundo. Conrad ha sabido, extraer toda la sensación de un paisaje, toda su sugestión y su misterio y es capaz de transmitir la angustia que producen determinados parajes de la Tierra, de donde él logra extraer esa aura de misterio de los trópicos, de la lejanía y de la tenacidad colonial, callada o muda, pero contada por Conrad con un léxico de poeta creando una mezcla angélica y a la vez, diabólica.
Conrad es un Stevenson más literario, de cualidades más misteriosas, que lo hacen más profundo. Él ha sabido, extraer toda la sensación de un paisaje, toda su sugestión y su misterio; él es capaz de transmitir la angustia que producen determinados parajes de la Tierra, incluso de ciertos ambientes conocidos él logra extraer esa aura de misterio de los trópicos, de la lejanía y de la tenacidad colonial, callada o muda, pero esa que ha sido contada por Conrad con un léxico de poeta creando una mezcla angélica y a la vez, diabólica.
Los ensayos marítimos de Joseph Conrad expresan una calidez y proximidad sorprendentes y sus vivencias marítimas, primero como marinero en Francia y luego en la marina mercante británica, produjo textos, que crean un vivísimo retrato de la relación entre el hombre y el mar en una época cuando la llegada del vapor supuso el fin de la hegemonía de los barcos de vela.
Józef Teodor Konrad Korzeniowski, más conocido como Joseph Conrad. Era un polaco quien había nacido en un pueblo de la actual Ucrania, en diciembre del año 1867 bajo el Imperio ruso. Siendo un ciudadano polaco, Conrad adoptó el inglés como lengua literaria y pasaría a ser considerado como uno de los más grandes novelistas de la literatura inglesa. Conrad escribió sobre el inmenso mar que amaba, y describiría la lucha de los hombres contra su desaforada y terrible dureza. Conrad en realidad amó a los hombres del mar, a esos hombres brumosos ángeles, o cínicos criminales, o vagabundos y ambiciosos, a todos quienes se forjaron luchando en el mar y manipularía la verdadera vida de los marineros envolviéndola en un aura de misterio como aquella que Mallarmé volcaría en sus textos de poesía pura. Así Conrad, utilizando una técnica mezcla de instinto y de sus personales formas, crearía una especie de fusión extraña de Dostoievski y de Flaubert pero él, escribiría en inglés.
Entre 1888 y 1889 Conrad escribiría “El corazón de las tinieblas” en una época cuando se debatia con “The Rescue” y había también comenzado a escribir “Youth” que publicaría en 1902 junto con “The end of the thether” y “El corazón de las tinieblas”. Sera en “Youth” donde veremos aparecer a Marlow, capitán de un barco inglés, un personaje muy especial, un marino que no se relacionara con los marineros de “The Nigger of the Narcisus” ni los del Typhoon, que son aquella gente del mar que Conrad bien conocía; los valientes e intrépidos marineros de la marina mercante. Pero Marlowe será especial porque es un marino que pareciera encarnar a mismísimo Conrad al revivir acontecimientos de su propia vida. Moralmente, Marlow muestra sus ambigüedades, sus dudas y cuestionamientos y Conrad se sentirá tan a gusto con él que formará parte de tres novelas y que vivirá situaciones tan importantes como el desenlace de “Lord Jim” que reflejará su propia vida.
En toda la obra de Conrad, sus novelas son semiautobiográficas y los temas que relata son la soledad y el enfrentamiento con las fuerzas de la naturaleza y denunciará y criticará los excesos de la colonización occidental en territorio africano, sin sucumbir ante las fuerzas de la oscuridad. La novela “El corazón de las tinieblas”, fue publicada por primera vez en 1899, y es considerada una de las obras más importantes de la literatura universal. Conrad se inspiró en sus experiencias en un viaje por el río en medio del Congo, ya colonizado y devastado por el rey Leopoldo II de Bélgica (https://bit.ly/3HbS8qz). La historia hecha novela, es narrada por su protagonista Charlie Marlow, quien cuenta la travesía remontando un río tropical para localizar a un tal Kurtz, escurridizo y legendario explorador atrincherado en lo más profundo de la selva. Sobre esta novela y la película de Francis Ford Coppola “Apocalipsis now” hemos ya hablado en este blog el año 2019 (https://bit.ly/2DQUyJX).
En la novela, desde sus primeras páginas, Conrad nos introduce a través de Marlow en el mundo de las tinieblas, en un relato que pareciera haberse originado en la lúgubre penumbra de la desembocadura del Támesis y es un juego de claro-oscuro que nos llevará hasta el final con la imagen de Kurtz en medio de la selva que habrá de regresar en la mente de Marlow ya a su vuelta a la civilización en el neblinoso Támesis londinense. Esta “El corazón de las tinieblas” no habrá de ser la novela que hará de Conrad un escritor famoso, pero las expresivas vivencias de Marlow nos demuestran la influencia de la literatura francesa en la tradición realista de Flaubert y de Maupassant y aunque se exprese en inglés, puede percibirse en sus palabras la fuerza del expresionismo centroeuropeo.
El ritmo y la sonoridad de su prosa es un tema que ante sus traductores significara un reto y no es fácil hallar una traducción al castellano que respete el ritmo original sin que diluya o se pierda el sentido preciso de cada frase. Destaco estos comentarios que fueron hechos en 2002 por Araceli Garcia Rios, traductora de la novela para la Editorial Alianza SA, en Madrid.
Maracaibo, martes 25 de abril del año 2023
No hay comentarios:
Publicar un comentario