El manantial de la doncella
y la bruja
Hace cinco años, el 21 de diciembre del 2015 me referí en este blog a
dos películas en blanco y negro que se desarrollan en los busques de Suecia…“La Sorcière” (La bruja) la vi en el
teatro Baralt, seguramente en una función de 5,30 pm, cuando estaba comenzando
a estudiar medicina, lo que me obliga a pensar que tendría unos 16 o 17 años…
Estas “cuentas” las traigo para entender porque siempre tuve presente la imagen
de la jovencita Marina Vlady en blanco y negro, corriendo por un bosque, y lo digo porque más adelante quizás en la
década de los setenta, también en el Baralt vería “El manantial de la doncella” un filme de Ingmar Bergman y las
imágenes de la rubia Birgitta Petterson, casi perdida en un bosque sueco, se me
confundieron con las de mi bruja Marina Vlady, y así mezcladas pasarían muchos
años, hasta aquel momento del 2015 cuando pude separar a las dos “catiras” y
conversar brevemente sobre estas películas del cine sueco-francés.
El genial director sueco,
Ingmar Bergman exploró los temas de la vida, la muerte, la existencia de Dios,
las relaciones humanas, la moral y los fantasmas internos con los que cada ser
humano convive en su laureado filme El manantial de la doncella
-“Jungfrukallan”(1960). La película dirigida
por Ingmar Bergman, con fotografía de Sven Nykvist y Música de Erik
Nordgren, fue protagonizada por Max von Sydow (Töre), Birgitta Valberg
(Märeta), Gunnel Lindblom (Ingeri), Birgitta Peterson en el papel de la
doncella (Karin), y los Herdsman: Axel Düberg, Allan Edwall, Tor Isedal y Ove
Porath, con Axel Slangus (Bridge), Gudrun Brost (Frida) y Oscar Ljung (Simon).
Con
la Suecia
medieval
como escenario (Siglo
XIV), Bergman relata
en el filme, la venganza de una familia tras el asesinato de su hija, Karin, la única y mimada hija de Töre y de
Mareta, un piadoso matrimonio de terratenientes. En su aldea no hay iglesia, y
tienen la tradición de que una vez al año una doncella debe llevar los cirios a
la virgen, y para hacerlo ese año, Karin acepta el encargo, y le pide a su
madre que le permita vestir sus ropas de fiesta, haciendo que en su viaje a
través del bosque la acompañe Ingeri, una joven que trabaja de criada en su
casa y que está embarazada pese a ser soltera.
Ingeri
ese día estaba enfadada y molesta con Karin ya que la vio la noche anterior
bailando en una actitud cariñosa con el hombre al que ella ama. A medio camino,
Ingeri le pide que regresen a casa, pero Karin decide continuar sola su camino.
Karin se queda en un molino, de donde Ingeri huirá poco después al comprobar
que el molinero, un tuerto que hace sacrificios a Odin, desea propasarse con
ella. Ingeri huye, y mientras tanto, Karin se encontrará a tres pastores dos
hombres y un niño. Los pastores están maravillados con la hermosura de la
muchacha y Karin habla con ellos quienes le cuentan que son hermanos huérfanos
faltándole la lengua a uno de ellos, ya que se la arrancaron unos malvados.
Apiadada de ellos, Karin decide darles su comida y ellos le dicen que solo la
aceptarán si come con ellos. Van a un claro del bosque donde comparten las
viandas, mientras ella presume ante los pastores de ser una princesa, sin darse
cuenta hasta demasiado tarde de lo que realmente quieren los pastores de ella.
Antes de
que pueda hacer nada los dos mayores se abalanzan sobre ella y la violan, tras
lo cual el mudo la golpea con una rama en la cabeza asesinándola, y robando sus
bellos ropajes antes de huir sin que Ingeri, que ha sido testigo de lo sucedido
hiciera nada por ayudarla. En su huida, los pastores llegan, sin saberlo, hasta
la casa de los padres de Karin, donde piden que les permitan pasar la noche, ya
que va a helar. Töre los acoge y los invita a cenar con ellos, aunque el más
pequeño se siente tan mal, atenazado por la culpa, que no puede tragar nada.
Por la
noche, y mientras rezan sus oraciones, Mareta se muestra inquieta y asustada
por el hecho de que su hija no ha regresado, pero su marido trata de calmarla,
ya que en alguna ocasión anterior se quedó en el pueblo sin su permiso. Tras
escuchar un chillido, Mareta acude al aposento de los invitados, encontrando al
pequeño de los hermanos con sangre, pues le cortaron la lengua para que no
hablara. Entretanto, el mayor de ellos le ofrece a Mareta, en compensación por
su hospitalidad, una bella túnica que afirma perteneció a su hermana, pero en
la que la mujer reconoce los ropajes de Karin.
Sin decir
nada, Mareta cierra la puerta para que no puedan escapar y al contarle todo a
su marido, él decide acabar con los asesinos de su hija. Antes de hacerlo, Töre
habla con Ingeri quien le cuenta lo
ocurrido, culpándose de ello, pues, afirma, que así lo deseó, cuando le pidió
por la mañana al Dios Odin, que ocurriera. Tras purificarse dándose un baño y
golpeándose con ramas de abedul, Töre se hace con el cuchillo de sacrificar
reses y va hasta la estancia donde los pastores duermen, descubriendo entre sus
pertenencias el vestido y los zapatos de Karin. Cuando se despiertan acaba con
el primero de los hermanos, el mudo con su cuchillo, tras lo que estrangula al
segundo, lanzando finalmente al niño contra la pared.
A la
mañana siguiente, guiados por Ingeri se adentran en el bosque con sus
sirvientes para buscar el cuerpo de su hija. Durante el camino Mareta se acusa
de ser la culpable por haber sentido celos de que su hija prefiriera su padre a
ella y de que Dios la castigue a ella, ante lo que Töre afirma que todos son
culpables. Cuando finalmente encuentran el cadáver Töre asegura que no
comprende a Dios, aunque a continuación le pide perdón, prometiéndole levantar
con sus propias manos, las mismas con las que asesinó a los pastores, una
iglesia para expiar su pecado, en ese mismo lugar. Cuando finalmente levantan
el cadáver, ven cómo del lugar en que tenía la cabeza surge un manantial de
agua pura, arrodillándose todos ante el milagro.
Esta obra
ganó el Oscar a mejor película en lengua extranjera y otros
premios internacionales, entre los que destaca el Globo de Oro a la mejor película de habla no inglesa, una
mención especial en el Festival de Cannes de 1960. El filme debe su belleza a la forma
puramente descriptiva de relatar los hechos, y esta belleza reside en el esplendor
de las imágenes, ayudadas por la transmisión del clima y moralidad de la remota
época a la que se refiere.
Marina
Vlady es una actriz francesa, nacida en
1938 como Marina Catalina de Poliakoff-Baydaroff. Sus padres rusos inmigrantes, eran cantante de
ópera y bailarina. De 1955 a 1959, se casó con el actor director Robert Hossein, y de 1963 a 1966, se casó con un empresario
francés, Jean-Claude Brouillet, dueño de dos líneas aéreas y miembro de la Resistencia francesa. Vlady
se casó luego con la poeta soviético /compositor Vladimir Vysotsky desde
1969 hasta su muerte en 1980, y desde 1980 vivió con el oncólogo francés Léon
Schwartzenberg quien falleció en 2003. Ella escribió Vladimir, o el vuelo abortado, una memoria de su relación con Vladimir Vysotsky .
La Sorcière (La bruja), es un 1956 película de drama dirigida
por André Michel basado en un guión de Paul Andréota y Jacques Companeez . Adaptación de la novela Olesya de Alexander Kuprin, con Marina Vlady como Ina,
Nicole Courcel como Kristina
Lundgren, y Maurice Ronet como Laureny Brulard. En “La Sorcière”, el argumento mostrará a Maurice Ronet, (Brulard) un ingeniero francés quien
trabajando en Suecia en una maderera, conoce en el bosque a Marina Vlady (Ina) y se enamora de ella, una joven local que vive en la naturaleza, con la
que tiene una aventura y a la que trata de convertir a la
"civilización" pero las supersticiones de la gente de su aldea sobre la brujería y los
celos hacia la jovencita transformarán un film de amor en una tragedia. El
filme fue premiado con El Oso de Plata en el Festival de Cine de Berlín en
1856.
El año 2015, en diciembre, me preguntaba yo por qué no supe nada más
sobre la rubia actriz francesa cuyo verdadero nombre es Marina Catherine De
Poliakoff-Baidarov, y cinéfilo al fin, sabía que había realizado muchas
películas, pero de momento no me fue fácil rastrear por internet su biografía,
y más allá de su origen ruso iba a depararme la sorpresa de sus matrimonios y
hasta conseguí una foto de mi bruja, hace ya cinco años, quien ahora tiene 81
años.
Maracaibo,
domingo 8 de marzo, 2020.
1 comentario:
Tenía la apariencia de una bomba rubia y podría haber terminado en los anales de la historia del cine como una simple Brigitte Bardot , pero el símbolo sexual Marina Vlady demostró que era capaz de mucho más. En su mejor momento fue nominada para un Globo de Oro y ganó el premio a "Mejor Actriz" en el Festival de Cine de Cannes de 1963 por su impresionante actuación en Una storia moderna - L'ape regina (1963) [La cama conyugal] con el italiano Ugo Tognazzi .
Esta provocativa gatita sexual nació Marina De Poliakoff-Baïdaroff, en Clichy, Francia, el 10 de mayo de 1938, la menor de cuatro hermanas en funciones. Su padre nacido en Rusia era un pintor bien establecido en Francia. Mientras que la joven Marina se entrenó en danza e inicialmente parecía tener pensamientos de convertirse en una bailarina prima. Pero, al igual que sus hermanas, descubrió un parentesco más cercano con la actuación. La más extrovertida de sus hermanos, Mónica llamó la atención de los agentes de talento a través de roles más desinhibidos. La hermana mayor Odile Versois , que poseía una belleza felina similar, fue la primera de su familia en entrar en imágenes. Marina (interpretando a una patinadora juvenil) y otra hermana Olga hicieron su debut cinematográfico menor en Orage d'été(1949) [Tormenta de verano], que contó con Odile. En 1955, a la temprana edad de 17 años, Marina conoció y se casó con el director / escritor / actor Robert Hossein , quien la presentó de manera prominente y seductora en varias de sus películas, incluyendo Les salauds vont en enfer (1955) [The Wicked Go to Hell ], como una mujer fatal decidida a la venganza, Pardonnez nos delitos (1956), La nuit des espions (1959) [Agentes dobles] y, en particular, Toi ... le venin (1958) [Desnudo en un coche blanco], que coprotagonizada por la hermana Odile. Ella tuvo dos hijos con Hossein, pero el matrimonio duró solo unos pocos años.
Con gran cantidad de producciones francesas e italianas a lo largo de la mayor parte de su carrera, Marina no fue tímida en interpretar personajes antipáticos e incluso cáusticos, y demostró ser experta tanto en comedia descarada como en drama vanguardista, apareciendo para directores tan notables como Jean-Luc Godard y Christian-Jaque . Jugando frente a algunos de los mejores hombres principales de Europa, fue una visión de belleza junto a Marcello Mastroianni en Penne nere (1952) [Black Feathers], un conmovedor drama de la Segunda Guerra Mundial, también coprotagonizó con el actor principal de Italia Aldo Fabrizi en L'età dell'amore (1953) [Demasiado joven para el amor]. Una de sus raras apariciones de habla Inglés vino con Orson Welles 'Campanadas a medianoche (1965) [Campanadas a medianoche]. Sus últimos años incluyeron mucha televisión. Casada cuatro veces, Vlady era la viuda del aclamado poeta / compositor / actor ruso Vladimir Vysotskiy, quien supuestamente murió de insuficiencia cardíaca en 1980 a los 42 años después de años de abuso de alcohol y drogas. Su cuarto esposo falleció en 2003.
- IMDb Mini Biografía Por: Gary Brumburgh / gr-home@pacbell.net
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