Las teorías conspirativas presuponen
que ambos lados de una disputa científica o social deben tener la misma
veracidad. Tras haber leído la columna de opinión "Illuminati y Reptilianos", del escritor nicaragüense Sergio
Ramírez Mercado (Premio Cervantes 2017) sobre fantasías conspirativas y
fakenews que están marcando la agenda política y social en el mundo, he
regresado a preguntarme... ¿Por qué “reptilianos”’?
Estamos llegando al primer cuarto del
siglo XXI, y a nivel
internacional corre el rumor de que existe
una raza alienígena, con la
capacidad de adquirir una apariencia humana, que gobierna el mundo desde las
sombras. Mientras tanto, se especula que existe una base extraterrestre apostada en el Golfo de México que
evita el arribo de huracanes... Lo que ha llevado a pensar ¿Será posible que
los “reptilianos” existan en los predios de Tampico?
A finales de los años 90, David Icke,(1952) quien antes era tan solo un comentarista deportivo de Reino Unido, comenzó a dar entrevistas asegurando que desde hacía ya milenios que la raza de los reptilianos dominaba el mundo, manipulando a la humanidad a través de “una prisión mental, emocional y espiritual”. Revisando lo antes dicho, surge la pregunta de si acaso… ¿Esto podría estar sucediendo en el sur de Tamaulipas?
De acuerdo con el libro “Hijos de la Matriz” de
David Icke, desde la antigüedad los reptilianos dominan el mundo, controlando la mente humana desde las
esferas más altas de poder. Aunque hay lectores que confían -o mejor dicho,
creen- en dichas aseveraciones, en la mayoría de los casos estas son
catalogadas como teorías conspirativas sin fundamento.
David Icke ha escrito desde mediados de 1990, más
de 20 libros, autopublicados, y personalmente dicen que ha hablado en más de 25
países, principalmente sobre sus teorías sobre supuestos seres
"reptilianos" que dominarían el mundo, en un tono cercano al New Age.
Quien es conocido por inventar conspiraciones también plantearía la posibilidad
de que el electromagnetismo de las antenas de
las redes 5G fuesen
capaces de diseminar o esparcir el virus que provocó la pandemia de Covid-19 (2020).
El artículo “La era de los
reptilianos”, firmado por Lucía Lijtmaer para “El País”(España), explica que las teorías de conspiración suelen
cobrar fama porque ofrecen una narrativa simple para hechos complejos,
relacionando varios fenómenos sociales, políticos o económicos entre sí. El peligro de esta clase de relatos reside
en su capacidad de alterar la percepción de la realidad, dando paso a la
desinformación. Sabemos que en la zona de Tampico existen
muchas clases de reptiles, hay cocodrilos,
iguanas, lagartos, culebras, serpientes y gecos. No obstante, no
existe ningún reporte oficial que indique la presencia de seres extraterrestres reptilianos entre la población
mexicana.
Nadie duda de que existe un exceso
de información y día a día nos enteramos de los acontecimientos relevantes ya
casi no por la prensa escrita sino a través de youtubers o de memes, de manera
que nos vemos obligados a navegar entre “fake-news” luchando por descubrir por
internet fuentes de información que sean realmente confiables. Los reptilianos fueron -según algunos-,
los causantes o supuestamente los responsables de la pandemia de COVID19 para
llevar a cabo el nuevo orden mundial.
Basados en teorías, suponen que los
reptilianos 1):Asi como ya crearon una
pandemia, la repetirán nuevamente- 2) Encerrarán a todos en cuarentena- 3) Prohibirán
las concentraciones masivas- 4) Instalarán más 5G (son las siglas utilizadas para referirse a la quinta generación de
tecnologías-telefonía móvil- sucesora de
la 4G que provee la
conectividad a la mayoría de teléfonos móviles actuales).
y 5) Crearán un chip nanométrico de control social que lo inyectarán (o ya lo
han ideado y fue inyectado) en las vacunas para administrarlas a la población
mundial. Muchos suponen que esta conspiración ya está en marcha desde 2021.
Mentalmente hacen de esta leyenda sobre
la próxima dominación reptiliana, una historia que ya estamos padeciendo con una
raza de reptiles humanoides que ya se han hecho del control del planeta al
inmiscuirse en las máximas cúpulas del control religioso, económico y político,
con la absoluta convicción de quienes aseguran han venido para esclavizar a los
seres humanos y poder alimentarse de ellos.
La existencia de los reptilianos
constituye una de las hipótesis de conspiración (término que parece correcto en
lugar de “teoría”) más fuertes, donde posiblemente el investigador más destacado
es el inglés David Icke, con sus más de veinte libros publicados y
especialmente en su libro electrónico “Hijos
de Matrix” donde una raza interdimensional controla al mundo desde hace
miles de años”, que consta de 20 capítulos y más de 600 páginas, presentado
como una revisión rigurosa con numerosas fuentes bibliográficas.
Todo esto no es una tontería; el
asunto es más complejo aun, ya que las estrellas de Sirio son el probable
origen de los reptilianos, quienes desde allá, llegaron al planeta Tierra para
dominar a los seres humanos, haciéndose pasar por Dioses que venían a enseñar
los secretos de la vida; de ahí se deriva el interés y el gran conocimiento
astronómico propio que ostentaron diversas civilizaciones antiguas. David Icke dice
haber realizado una minuciosa revisión de los mitos y símbolos de diversas
civilizaciones (en distantes localizaciones alrededor del planeta) donde todas tienen
en común la figura de la serpiente como deidad fundamental.
Los orígenes de la humanidad
controlada por los reptilianos, se remonta a los extintos continentes de
Lemuria y la Atlántida, los cuales se hundieron debido al cataclismo ocasionado
por la irrupción de Júpiter en nuestro sistema solar, pues impactó a Venus,
Marte y a la Tierra hasta quedar “atrapado” en su órbita actual. Lo anterior,
hizo que la Tierra sufriera una grave alteración en su eje de rotación,
provocando terremotos, erupciones e inundaciones que dieron lugar a una nueva
configuración geológica.
Según esta hipótesis, ¡Que molleja
de teoría! Así diría un maracucho –(o maracaibero para lo más “fisnos”)-
cualquiera… Pues resulta que el gran Diluvio (popularmente conocido como “el
Diluvio Universal”) aquel de la historia de Noé y su arca, pues, fue real. A
Gilgamesh lo podremos enviar a (https://tinyurl.com/3xefnpwa
) freír monos… Con base en lo anterior, la primera gran civilización que señala
la “historia oficial”, que es la de los Sumerios, fue en realidad una
reconfiguración de las sociedades existentes en Lemuria y la Atlántida luego
del cataclismo…
Este “cataclismo” no se refiere a la canción del compositor puertoriqueño Esteban Taronji González fallecido en 1986, autor de “Amor robado”, ”Perderte y morir”, “De mujer a mujer” estrenado por Toña la Negra en 1960 y de “Cataclismo” interpretada por el charro mexicano Javier Solis, aunque este detalle no retrotraiga hasta Tamaulipas, que limita al sur con Veracruz y al norte está separado de Estados Unidos por el Rio Bravo, con sus lagartos que pueden salir a bañarse en las aguas del Golfo de México...
A poco, ya como que me desvié del
curso de la conspiracion reptiliana…
El cerebro triúnico es un modelo para el cerebro y el comportamiento humano de los
vertebrados, propuesto por Paul MacLean en
la década de los 60 para explicar la existencia de los rastros de evolución existentes especialmente en la
estructura del cerebro humano. Esta
hipótesis ha dejado de ser abogada por la mayoría de los investigadores en
neuroanatomía evolutiva comparativa de la era post-2000.
Sabemos
que el cerebro de un reptil es dominado por el tronco encefálico y el
cerebelo, que controla el comportamiento y
el pensamiento instintivo para sobrevivir. En los humanos existe el “cerebro reptiliano”, que incluye
el tronco del encéfalo y el cerebelo.
Este cerebro controla los músculos, el equilibrio y las funciones autónomas (p.
ej., respiración y latido del corazón). Por consiguiente, es principalmente
reactivo a estímulos directos.
MacLean,
por primera vez, en 1952 introdujo el término “sistema límbico”. Esta porción del cerebro
deriva del “cerebro viejo del mamífero” y es el sitio encargado de regular las
emociones, la memoria y las relaciones sociales. El sistema límbico incluye
la amígdala, el hipotálamo y
el hipocampo. El sistema límbico tiene que
interactuar con el neocórtex porque no puede funcionar completamente solo.
Necesita interaccionar con el neocórtex para procesar las emociones… Estas son
las cosas que realmente nos asocian con los reptiles, todo lo otro, son
“idealizaciones conspiranoicas”.
Maracaibo, miércoles 7 de agosto del año 2024
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