En la actualidad hay varios candidatos para buscar vida fuera de la Tierra. Estos son Marte, Europa (una luna de Júpiter) y Titán (otra de las lunas de Saturno). Pero solo Encélado tiene, además de agua líquida y moléculas orgánicas, un ciclo biogeoquímico capaz de proporcionarle a los seres vivos una fuente de energía.
Encélado es una luna de Saturno que apenas mide 500 kilómetros de diámetro y que tiene el aspecto de una enorme bola de nieve. La ya perdida sonda Cassini , han revelado que Encélado es uno de los lugares del Sistema Solar más prometedores para encontrar vida extraterrestre . En Encélado solo falta detectar azufre y fósforo para que existan todos los ingredientes necesarios para la aparición de la vida tal y como la conocemos, compuesta de proteínas, lípidos o nucleótidos
Un estudio publicado en Nature ha detectado una nueva huella de que Encélado es un lugar aparentemente idóneo para el desarrollo de vida extraterrestre. La presencia de grandes moléculas orgánicas, compuestas por largos “esqueletos” de carbono, como los que forman parte de las biomoléculas han sido detectadas en esta luna que tiene los tres ingredientes básicos necesarios para albergar vida: el agua líquida, una fuente energía y moléculas orgánicas.
Christopher Glein, coautor del estudio e investigador en el SwRI. “Además de la Tierra, no había otro lugar en el Sistema Solar donde se hubieran descubierto estas tres pruebas y que pudiera albergar vida en el presente. Dichas moléculas, según ha explicado a ABC Nozair Khawaja, primer autor del estudio junto a Frank Postberg, ambos de la Universidad de Heidelberg, «muestran una estructura típica de moléculas orgánicas muy complejas». “Son moléculas enormes y contienen una compleja red de cientos de átomos de carbono, hidrógeno, oxígeno y probablemente nitrógeno y forman estructuras con forma de anillos y cadenas». Es la primera vez que se detectan moléculas tan grandes y complejas en un mundo acuático extaterreste.
La sonda Cassini, de la NASA, cumplió una de sus últimas misiones antes de ser desintegrada en la atmósfera de Saturno en septiembre de 2017 y fue pasar por las proximidades del polo sur de Encélado para volver a analizar la composición de los grandes penachos de hielo y vapor de origen crio-volcánico que brotan del interior de ese mundo a través de unas fracturas en el hielo. Estas “plumas” expulsan vapor y partículas a alta velocidad y forman uno de los anillos de Saturno. Un espectrómetro de masas de la Cassini detectó la presencia de moléculas orgánicas de más de 200 unidades de masa, datos que sugieren, según los investigadores, la presencia de una fina capa de moléculas orgánicas sobre la superficie del océano y bajo el hielo. La vida, es una explicación muy factible.
En 2015, la NASA también confirmó en Encélado la presencia de hidrógeno molecular. En la Tierra, el hidrógeno es una fuente de energía química para los microorganismos que viven en las chimeneas hidrotermales. Esto es como identificar la potencial fuente de comida para los microbios. Así que, la próxima pregunta es: ¿Cuál es la naturaleza de las moléculas orgánicas en ese océano? Por eso, creo que este artículo es el primer paso en la tarea de comprender esto” ha dicho Hunter Waite, coautor del estudio y principal investigador de uno de los instrumentos de la Cassini.
Los científicos que quieren entender cómo es el interior de Encélado aspiran hacerlo sin aterrizar allí con una nave, puesto que quieren sacar a la luz lo que se esconde bajo el hielo de la luna. «Nuestro equipo ha detectado la presencia de grandes macromoléculas ricas en carbono», ha proseguido explicando Glein. «Aún no comprendemos cómo se formaron, pero en el artículo repasamos un rango de posibilidades, desde una síntesis abiótica a partir de precursores inorgánicos, la ruptura de moléculas preexistentes a la la síntesis biológica impulsada por la riqueza de hidrógeno en el océano».
Tal como ha dicho Glein, ahora tratarán de refinar los modelos para averiguar cuál puede ser el origen de estas moléculas orgánicas. En un futuro lejano, una nave robótica podría aterrizar en esta luna. «Estamos trabajando en conceptos para enviar naves a Encélado, de forma que podamos obtener información más detallada sobre la composición de las moléculas orgánicas. Hemos detectado las cosas importantes; ¡ahora solo nos queda entenderlas!». Por encima de todo, lo que más les intriga es si lo que han detectado puede ser una señal de actividad biológica. «Encélado es una mina de oro para la astrobiología», ha dicho Christopher Glein.
En enero, el año 2017 hablamos de “Encélado” (https://bit.ly/3EZg1kB) en este blog y un año antes en diciembre (https://bit.ly/3Vm8CB8) nos referimos a las tormentas que originan los anillos de Saturno estudiadas por la sonda Cassini; ahora los científicos parecen estar más esperanzados en hallar vida en esta pequeña luna de Saturno…
Maracaibo, domingo 27 de noviembre del año 2022
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