miércoles, 2 de enero de 2019

MK-ULTRA


MK-ULTRA

El sábado 2 de septiembre del año 2017 escribí en este mismo blog algo, que quiero repetir ahora, nuevamente, y me excuso por esta reescritura apoyándome en la manida frase de que “la literatura se hizo para re leerla”... Así pues nuevamente, reitero que…  

   “Hoy me gustaría  recordar nuevamente historias sobre hombres a caballo; las de aquellos que con El Libertador ascendieron por las montañas de Los Andes para después liberar los pueblos de América, las del catire Páez, las de quienes como Sucre en la selva de Berruecos caerían del caballo, o como Zapata al trote en la emboscada fatal mientras los campesinos esperaban y siguen aún esperando por él, o la del valiente gocho Miguelón Contreras- en la poesía de mi tío Fernando Tamayo- de cara al sol en la sabana de Tocuyito derribado de su cabalgadura y muerto tras marchar con los sesenta de Cipriano y su compadre, Miguelón, soñando siempre con un país mejor, con una nación diferente, sin entender que los esperaba en la capital la historia verdadera para afianzar la realidad de nuestra nación, siempre condenada a padecer los males del centralismo y el innombrable caudillismo... Los presidentes se tornan siempre en reyezuelos. Precisamos nuevamente de hombres a caballo, como Aguirre, aunque fuese con Elvira en la grupa marchando ya rumbo a Barquisimeto para darle un finiquito a su historia de incomprendidas esperanzas, y es que así pareciera haberse detenido sobre nosotros mismos,  una triste e interminable noche, que ensombrece la historia del pueblo venezolano”...

Ante la grave y compleja situación, y me refiero a la de “el pueblo venezolano”, en este año 2019 que recién se inicia, cuando muchos conciudadanos llenos de expectativas confían será el que nos ofrecerá la posibilidad de recuperar la libertad de expresión y  de regresar a un sistema democrático, hoy voy a referirme… ¡A la CIA!  Sí, tal cual.  Como lo hiciera en abril y luego en el mes de julio del año pasado regreso a tocar estos temas escabrosos que terminan mimetizándose con nuestra actualidad. En esta ocasión, cuando las circunstancias que nos mantienen en vilo son definitivamente “kafkianas”, les hablaré de una interesante operación de apariencia “médico-psiquiátrica”; el proyecto MKUltra.

El 18 de julio del año pasado 2018, al hablar sobre el color azul mencioné como poéticamente existía el pájaro azul de Rubén Darío, y el pájaro azul de Bukoswki, y hasta el “bluebird” de la Canción de sur, película de Walt Disney, para al finalizar aquella trama poética, al recordar que ese,  “bluebird”,  fue el nombre usado por la CIA para su programa de control mental. Aproveché aquella oportunidad para recordar a dos tristemente célebres médicos, Donald Ewen Cameron norteamericano-canadiense y el inglés William Sargant, quienes en su teoría sobre la corrección de la locura, trabajarían para borrar memorias existentes e intentar la reconstrucción de la psique por completo en cientos de pacientes, utilizando LSD, PCP, y diversas drogas paralizantes, así como la terapia electroconvulsiva a 30 a 40 veces la potencia normal, llevando a pacientes inocentes a un estado de coma inducido por medicamentos durante meses, sometidos la reproducción de loops de ruido o simples declaraciones repetitivas. Como pueden ver, no siempre el juramento hipocrático prevalece en la mente y en el corazón de quienes han sido formalmente preparados para hacer el bien y ejercer con el lema de “primum non nocere”.

El proyecto MKUltra (también conocido como programa de control mental de la CIA) fue el nombre en clave dado a un programa ilegal diseñado y ejecutado en secreto por la CIA para la experimentación en seres humanos. El programa se inició en la década de 1950, y en 1964 empezó a reducir sus actividades, aún más en 1967 y siendo descontinuado oficialmente en 1973. MKUltra realizó investigaciones en 80 instituciones, incluyendo 44 colleges y universidades, en hospitales, cárceles y compañías farmacéuticas.​ Richard Helms fue durante casi siete años Director de la CIA, el segundo mandato más largo de cualquier director, bajo dos presidentes, Lyndon Johnson y Richard Nixon y destruyó gran parte de los archivos que tenían la información sobre MKUltra. Durante sus últimos años en la CIA, Helms presenció como la Agencia y toda la empresa de inteligencia se desprestigió cuando el Congreso y el público, sometieron la política exterior de los Estados Unidos a críticas sin precedentes. Una Comisión investigadora, dijo que era claramente ilegal probar drogas potencialmente peligrosas en ciudadanos estadounidenses confiados. Helms señaló que Allen Dulles, era el Director que autorizó que esto se llevara a cabo, y al final de su cargo de director de la CIA, Helms se convirtió en una víctima, cuando se produjo ese cambio rápido y radical en el sentido de la necesidad del pueblo estadounidense de estar informado sobre lo que su gobierno debe y no debe hacer. 

En 1977, una solicitud a la Ley por la Libertad de la Información permitió descubrir un fondo con 20.000 documentos relacionados con MKUltra, que condujo a nuevas audiencias en el Senado ese mismo año.​ En julio de 2001, algunos trazos residuales de información sobre MKUltra que aún eran secretos fueron desclasificados.      Es de esperar que más temprano que tarde, la información verdadera sobre la conspiración que ha conducido a la traición a nuestra patria y su entrega en manos de extranjeros, habrá de desvelarse y como con el MKUltra, esperaremos ver como se esclarecerán los hechos para poder reconstruir el país.  

Mississauga, Ontario, 2 de enero de 2019

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