Año de la peste…
El jueves, 28 de julio de 2016, escribí en este blog algo sobre la primera novela de Ednodio Quintero, la cual he estado releyendo en estos días y quisiera destacar una breve frase que el autor repite a lo largo de su novela -“este fue el año de la peste”-. Como seguimos en años de peste padeciendo por la pandemia, y mi blog desde 2013 luce el nombre de mi novela cuasi primigenia “La peste loca”, hoy, cinco años después, quisiera, volver a hablar sobre “La danza del jaguar”.
Cuando Ednodio Quintero era un joven y escribió su primera novela “La danza del jaguar” no se imaginó que años después ésta se convertiría en un referente de la literatura venezolana e hispanoamericana. Para muchos La danza del jaguar (1991), es una novela de culto. Se ha visto como una historia de aliento sofocante donde siempre la historia es la misma, pero se percibe analizada desde diversos ángulos. Escrita en cinco libros, existen símbolos y un yo, que es uno y es múltiple, y todos conforman cinco espacios narrativos que se desarrollan desde lo que Julio Mirada llamó acertadamente “el territorio imaginario”.
Sobre su novela ha dicho el mismo autor cuando la imaginó, que: “No tenía sentido escribir una novela lineal, tradicional”. Son cinco instantes en la vida del personaje, y cada libro tiene un espacio en el tiempo del protagonista. Relatos míticos, delirios, horas de vida, recurrencia a la infancia. En el cuarto libro trabajaría con tres planos: recuerdo, delirio y realidad. Sobre “La danza del jaguar”el mismo Ednodio Quintero añadiría: … “fue muy importante para mí pues al fin, después de varios intentos fallidos, logré culminar una novela. Atesoro recuerdos muy gratos de la época cuando la escribí, que darían incluso para un libro. Recuerdo que me sentaba a escribir, fumando como un chino y bebiendo dosis mortales de café, escuchando a un volumen bastante alto música de Pink Floyd, desde las seis de la tarde hasta las ocho de la mañana del día siguiente”. “Además, pensé por primera vez que en el futuro podría llegar a ser un escritor. Aunque hace años, muchos, que no la releo, siempre la he considerado como mi mejor novela”.
En general, las muertes en las novelas de Ednodio Quintero, y los suicidios son desconcertantes, paradójicos ¿quizás irónicos? Los temas de nuestro escritor son universales; siempre girarán en torno a la inmortalidad y la muerte, el amor y el paso del tiempo, del olvido y de la memoria. El año pasado, en noviembre hablé en el blog sobre la diosa maya Ixtb, la diosa de los suicidas (https://bit.ly/2GrzYVK) y la relacioné con la narrativa de Ednodio Quintero. La afición de Quintero por presentar en sus novelas hechos de sangre, particularmente por el suicidio, y por el asesinato (https://bit.ly/342T7Uo) no es nueva. Tanto en “El cielo de Ixtab” al igual que en “La bailarina de Kachgar” que son historias de amor, hay un suicidio por ahorcamiento de un jovencito llamado José Gregorio Hernández, apodado Judas, y hay otro suicidio en vuelo de Ícaro de un fotógrafo conocido como Andrés. El suicidio también se menciona, casi reiteradamente y desde el comienzo de la novela hasta el final en “La danza del Jaguar” (1991).
Ednodio Quintero nació en El Resbalón en Las Mesitas, parroquia General José Félix Ribas, en el Municipio Boconó del Estado Trujillo. Desde niño empieza a recorrer otros poblados de la región: Niquitao, Boconó, La Quebrada, Burbusay, entre otros, en compañía de su padre Felipe Quintero. Luego viviría en Mérida sus primeros años de estudiante universitario. Estudió en Bélgica becado por el Estado venezolano y obtuvo el título de ingeniero forestal. Se desempeña como profesor de la Universidad de Los Andes.
Ha publicado: La Muerte Viaja a Caballo (1974), Volveré con mis Perros (1975), El Agresor Cotidiano (1978) y La Línea de la Vida (1988), extraordinarios volúmenes de cuentos que luego reescribirá y reeditará en Cabeza de Cabra y Otros Relatos (1993). Su primera novela fue, La Danza del Jaguar (1991), uno de sus mejores textos narrativos. En 1991 publicó una pequeña novela: La Bailarina de Kachgar. Publicó en 1995 la novela breve El Cielo de Ixtab y un nuevo libro de cuentos: El Combate por UNAM, de México. En 1997 publica el Diario de Donceles. En el año 2000 su valioso libro de cuentos El Corazón Ajeno y la novela Lección de Física. La reescritura es una constante raigal en este autor. La Universidad del Zulia publicaría dos libros sobre su ars poética, sus lecturas y reflexiones De Narrativa y Narradores (1996) y Visiones de un Narrador (1997). En internet puede hallarse el ensayo “Escribir a Voluntad: La Libertad como Consigna”(2000). Otras novelas “Lección de física”(2000), “Mariana y los comanches”(2004), “Confesiones de un perro muerto”(2006), “El arquero dormido”(2010),”El hijo de Gengis Khan” (2013)
Ednodio ha sido traducido a varios idiomas: inglés, francés, italiano y portugués. Entre sus premios figuran el de Cuentos de El Nacional, Caracas (1975), y el de Revista El Cuento, México (1974). En 1994 el Premio "Miguel Otero Silva" de la Editorial Planeta por su novela El Rey de las Ratas. En 1992 obtuvo el Premio de Narrativa Breve del ICI (Instituto de Cooperación Iberoamericana) por su libro Soledades y del Premio de Narrativa del CONAC (Consejo Nacional de la Cultura) por La Danza del Jaguar. Ha incursionado en el cine como guionista de los films Rosa de los Vientos (1975) y Cubagua (1987). Ha sido el organizador de la Bienal de Literatura “Mariano Picón Salas” de Mérida junto con un grupo de entusiastas del arte literario y de los libros. Ha publicado para niños el hermoso cuento El Sur (2000). Actualmente vive con un pie en Mérida y otro en México.
Maracaibo, miércoles 20 de octubre del año 2021
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