Patogenia del SARS-CoV-2
Hoy día se sabe que el coronavirus SARS-CoV-2 se une a la enzima convertidora de angiotensina 2 (ECA2) en la superficie celular.
El sistema renina-angiotensina-aldosterona (SRAA) es un importante regulador de la función cardiovascular y renal. Su bloqueo mediante los inhibidores de la enzima conversiva de la angiotensina (ECA) y/o los antagonistas del receptor de la angiotensina II se acompaña de una reducción de los valores de presión arterial, reducción del riesgo cardiovascular y enlentecimiento de la progresión de la insuficiencia renal. El descubrimiento de la ECA2, una enzima homóloga de la ECA encargada de la
degradación de la angiotensina II a angiotensina 1, ofrece una nueva línea de estudio en el SRAA.
Se ha comprobado que el virus SARS-CoV-2, como otros coronavirus, se introduce en las células pulmonares acoplándose a la enzima convertidora de angiotensina II (ECA2), enzima esta que es expresada en diversos tejidos humanos y parece tener como función principal - mediante la degradación y disminución de la producción de angiotensina II y la formación de angiotensina 1-7- mantener el equilibrio entre los efectos vasoconstrictores, proinflamatorios, proliferativos, profibróticos y oxidantes de este sistema y sus antagónicos. La principal regulación de la ECA2 parece ser sobre la angiotensina II y sería la degradación directa, puesto que se ha estimado que este efecto es 400 veces mayor que el que tiene sobre la angiotensina.
Se podría interpretar, que la peor evolución ante la infección por el virus SARS-CoV-2 de los pacientes con más riesgo cardiovascular (hipertensos, diabéticos, ancianos y aquellos con mayor morbilidad cardíaca) podría deberse a que tendrían unos niveles más elevados de angiotensina II y que la ECA2 estaría elevada secundariamente a ello para degradarla y reducir así sus efectos nocivos pulmonares.
Este complejo (ACE2) se internaliza y actúa como inhibidor endógeno de señales inflamatorias asociadas con cuatro sistemas: el sistema renina-angiotensina-aldosterona (SRAA), el sistema del complemento, la cascada de coagulación y el sistema calicreína-cinina (SCC).
Los fenómenos vasoconstrictores, protrombóticos y proinflamatorios inducidos por el SARS-CoV-2 se deben a la activación de estas redes fisiológicas.
Es importante señalar que los pacientes con inmunodeficiencias, hipertensión, diabetes, enfermedad coronaria y enfermedad renal a menudo tienen una activación alterada de estas vías, naturalmente o por los medicamentos utilizados, y por lo tanto, elos pueden ser más susceptibles a la infección por SARS-CoV-2.
Manifestaciones cutáneas, sensoriales y del sistema nervioso central también pueden estar relacionadas con la activación viral de las vías SRAA, complemento, coagulación y SCC.
Se requiere un detellado estudio de estas vías para identificar tratamientos complementarios y eficaces para el Covid-19.
NOTA REF: Revisar (https://doi.org/10.3389/fphar.2020.01278).
Maracaibo, viernes 18 de septiembre, 2020
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