El país en pandemia
En febrero 2021, Florantonia Singer periodista de El País (España), señalaba que existían: “100.000 vacunas sin plan de inmunización: el incierto camino de Venezuela para gestionar las dosis”… Luego en marzo declararía…“El Gobierno venezolano ha promovido en un año de pandemia medicamentos sin evidencia científica, brebajes y teorías de la conspiración”, y diría también que: “La pandemia ha profundizado la precariedad de la educación en Venezuela, que ya atravesaba una crisis humanitaria cuando el virus sacó a los alumnos de sus clases”. ¿Por qué noticias tan desalentadoras?...
Venezuela poseía uno de los sistemas de atención pública más sólidos de Sudamérica antes de iniciarse el actual régimen que dice ser socialista y que fue auspiciado por el gobierno de Cuba a través de Hugo Chávez desde el año 1999, y ante la credulidad de la mayoría de venezolanos que confiaban en sus militares, o en quienes creían necesario un Mesías redentor, condujo al país actual, de manera que Venezuela ya estaba inmersa en una crisis de salud pública antes de que se desatara la pandemia del coronavirus.
Ahora, la terrible falta de acceso a bienes básicos como el agua o la energía necesarias para garantizar una higiene mínima, se suma a la malnutrición y, en general, al grave empobrecimiento de un país que viene padeciendo de un deterioro progresivo desde hace ya más de 20 años, con más de cinco millones de emigrados. Cuando se inició la pandemia del coronavirus, la situación presagiaba que lo que iba a suceder vendría y habría de ser como un tsunami.
Es por demás evidente que el régimen de Maduro ha venido utilizando la pandemia de una manera cruel y despiadada y esta actitud ha sido realmente repugnante, no solo por la humillación y el maltrato hacia los venezolanos, sino porque jactanciosamente se burla de ellos como no pareciera importarle el repudio que asquea a cerca del 90% de la población, y de las críticas que más de 60 de los países democráticos de Occidente y los informes de la ONU quienes lo han permanentemente descalificado… Pero nada sucede, dirán, sí: nada sucede…
Es doloroso admitirlo, pero es más que evidente que poderosas fuerzas del mal operan abiertamente en el ejercicio de gobierno del régimen venezolano, que ahora cuenta con otro perverso aliado, el corona virus. Las galimatías del régimen impregnadas de crueldad giran alrededor de sus estrategias con el coronavirus contra su propio pueblo, y van desde engañar con la venta o distribución de “gotas milagrosas”, hasta falsear datos informando sobre compras irreales de vacunas de dudosa procedencia (cubanas, o rusas), o haber paralizado el ingreso de la vacuna AstraZeneca, con el argumento de casos de trombosis en los vacunados, una situación que fue desestimada, posiblemente dependería de que la vacuna AstraZeneca de Covax-OPS, había sido negociada previamente con el gobierno interino de Guaidó…
La sumisión del chavismo ante Cuba, ha llegado a informarle al pueblo, que han llegado a prometerle a los jerarcas de la isla que los venezolanos servirán como conejillos de India en las vacunas cubanas, conocidas como “La Soberana” y “Abdala” sin haber pasado por las mínimas pruebas exigidas por organismo internacionales y ni se diga del menosprecio hacia las instrucciones de la Academia Nacional de Medicina o de médicos venezolanos competentes en epidemiología.
Desde el comienzo de la pandemia Delcy Rodríguez, su hermano y el propio Maduro pontificaron falseando durante muchos meses los datos sobre la extensión de la enfermedad en Venezuela, contradiciendo a personas capacitadas como el doctor Julio Castro, o a dos estudios ordenados por la Academia Venezolana de Ciencias Físicas Matemáticas y Naturales, quienes alertaban que Venezuela se encaminaba a una grave situación por la expansión del COVID-19. Con la característica habilidad para demostrar su incompetencia y exagerada corrupción, los usurpadores de la soberanía popular presentaron un esquema alternado que denominaron, de cuarentena radical y flexible calificándolo jactanciosamente como un modelo de lo que debería ser la actuación de los gobiernos en todo el mundo.
La deplorable situación de la economía, resultado de la destrucción del aparato productivo y de PDVESA, el colapso evidente del sistema de atención sanitaria-pública y privada- encuentra al país con una carencia absoluta de equipos de protección a tal extremo que ha llevado a registrar cifras brutales de mortalidad entre la población médico-sanitaria del país y mantiene a los venezolanos sumidos en una aterradora realidad. El número de trabajadores de la salud que han sido afectados por la enfermedad, universalmente con la mayor proporción de fallecidos en ese sector revela la magnitud de la tragedia. Aquí como muestra está la lista de los médicos zulianos caídos en la batalla por ayudar a los pacientes enfermos de COVID-19.
1-Samuel Viiloria - Salud Publica - 16/06; 2) Solanger Escandela - Pediatra - 20/06; 3) Marisela Ramirez - Salud Publica - 24/06; 4) Manuel Romero - Gineco-obstetra - 24/06; 5) Carlos Castillo - Médico Residente - 26/06: 6) Jorge Leal - Gineco-Obstetra - 28/06; 7) Nelly Hernandez de Villasmil - Anestesiologa - 09/07; 8) Jesús Romero - Gineco-Obstetra - 10/07 ; 9) Marisol Tigrera - Médica Internista - 11/07; 10) Ramón Galue Arevalo - Neurologo - 15/07; 11) Danis Montero - Médico Residente - 17/07; 12) Franklin Jimenez - Médico Internista - 18/07; 13) Anali Fernandez - Oftalmólogo - 21/07; 14) Edgar Rabinovich - Cirujano - 22/07; 15) Jairo Valbuena - Pediatra - 23/07; 16) Rannefer Valbuena - Médico general - 23/07; 17) Amable Amado - Traumatólogo - 24/07; 18) Edgar Manzanero - Cirujano oncólogo - 29/07; 19) Cipriano Brito - Neurocirujano - 01/08; 20) Alonso Adrianza - Gastropediatra - 01/08; 21) Hector Millan - Médico Familiar y Bomberil - 02/08; 22) Luis Salazar - Médico Traumatólogo - 03/08; 23) Alexander Gotera - Médico General - 03/08, 24) Jesús Peña Peña - Ginecoobstetra - 04/08; 25) Luis Sulbaran - Nefrólogo - 05/08; 26) Jesús Clavero - Médico Intensivista - 21/08; 27) Franklin Urdaneta - Ginecoobstetra - 23/08; 28) Juan Leal - Médico general - 23/08; 29) Dilmero Paz - Neumonologo - 25/08; 30) Maudlin Olivares - Médico Residente - 30/08; 31) Jesús (Chuchin) Vargas - Anestesiólogo - 05/09; 32) Mireya de Leal - Pediatra - 08/09 ; 33) Omar Sanchez - Cirujano - 12/09; 34) Marielisa Sanchez - Pediatra - 15/09; 35) Douglas Barroso - Médico Internista - 16/09; 36) Víctor Nuñez - Toxicologo - 21/09; 37) Fernando Rosales - Traumatólogo - 22/09; 38) Ingrid Rosendo - Salud Pública - 23/09; 39) Freddy Miquelena - Pediatra - 4/10; 39) José Becerra Abreu - Gineco-obstetra - 20/10; 41) Mayela Franco Villarreal - Salud Publica - 21/10; 42) Ricaurte Salom Gil - Pediatra, Salud Publica _ 23/10; 43) Héctor Almarza - Cardiólogo - 29/10; 44) Giovaldo González - Médico Emergenciologo - 4/11; 45) Luis Fuenmayor - Medico residente - 23/11; 46) Susley Marcano - Pediatra - 2/12; 47) Giovani Urdaneta - Médico ocupacional - 4/12; 48) Guillermo Andrade - Gineco-obstetra - 4/12; 49) Lino Pascal Cavallaro - Pediatra - 5/12; 50) Hilda Reyes Morillo - Salud pública - 8/12; 51) Osneira Méndez - Gineco-obstetra - 8/12; 52) Rosalba Molero Pulgar - Medico General - 08/12; 53) Yoel Toyo Lolo - Epidemiólogo - 11/12 ; 54) Javier Sánchez - Cirujano - 31/12; 55) Eddy Ramirez - Pediatra Intensivista - 31/12; 56) Nancy Ramos de Conde - Medico General - 05/01; 57) Wilmer Sánchez - 09/01; 58) Haydeé Parra - Pediatra - 11/01; 59) Maglys Mendez - Radióloga - 16/01; 60) Dario Montiel - Cirujano pediatra - 19/01; 61) Antonio Hidalgo - Psiquiatra - 19/01, 62) Luis Nuñez - Gineco-obstetra - 20/01 ; 63) Nestor Urdaneta - Cirujano general - 21/01; 64) Miguel Hernandez - Cirujano Urologo - 23/01; 65) Zenaida Vera - Gineco - obstetra - 24/01; 66) Alfonso Araujo - Cirujano Urólogo - 11/02; 67) Henry Ramírez - Neurocirujano - 16/02; 68) Ronald Torres - Médico Integral Comunitario - 23/02: HONOR A estos Médicos Zulianos que han perdido la batalla luchando contra la COVID-19 Colegas que han entregado su vida por cumplir con su Juramento.
En esta historia de horror que vive Venezuela se ha señalado como un ejemplo el trato a los venezolanos que venían regresando de países vecinos huyendo de la pandemia y fueron recibidos como criminales, aislándolos en centros de detención transformados en caldos de cultivo de COVID-19. El regreso de los migrantes fue cínicamente utilizado como propaganda del régimen para destacar sus benévolas intenciones de salubridad y cooperativismo, mientras de paso les servía para despotricar del gobierno colombiano acusándolo de querer infectarnos propagando la enfermedad en nuestro territorio.
Los centros asistenciales privados, esperan a los pocos “afortunados” enfermos con pagos de admisión entre 3.000 y 10.000 dólares. Los gastos diarios de una clínica pueden fácilmente rebasar los 2.000 dólares, de manera que el costo de la terapia intensiva por COVID-19 en Venezuela resulta ser superior al de Estados Unidos y Europa y la tragedia de perder a un familiar puede significar la ruina para una familia de las pocas que todavía tienen dinero para acceder al ejercicio privado de la Medicina. Hoy en Venezuela todas las familias padecen aterrorizadas por temor a infectarse con COVID-19 y a la desesperación por la ausencia de camas en clínicas y hospitales, se les une el terror de caer en estos centros que son vistos como antesala de crematorios. A las dificultades -léase imposibilidad- para obtener medicinas y acceso a equipos de oxigenación, se le une la absoluta ausencia de vacunas efectivas para los venezolanos de a pie, muchos de ellos alimentados con carroña en los basureros y en su inmensa mayoría en niveles de desnutrición absoluta por extrema pobreza crítica.
Maracaibo, domingo 4 de abril, 2021.
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