COVID-19 en Venezuela (¿Actualización?)

COVID-19 en Venezuela (¿Actualización?)

El 29 de mayo del año 2020, el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, expresó que el coronavirus detectado en el Zulia tenía “características especiales”, como “mayor velocidad de transmisibilidad” y mayor “capacidad de hacer daño y de presentar síntomas en los pacientes”. “Es muy contagiante y muy agresivo el coronavirus que hemos detectado en Maracaibo”: así lo dictaminó Maduro (el de las gotitas milagrosas), el 30 de mayo del 2020.

El miembro correspondiente extranjero de la Academia Nacional de Medicina señaló en aquella oportunidad que los datos que tenían no demostraban “ningún comportamiento anormal” y una de las explicaciones de la rápida expansión del coronavirus en el mercado Las Pulgas, y el aumento de personas con COVID-19 en el Hospital Universitario de Maracaibo, podrían ser el hacinamiento y la falta de distanciamiento. 

Para esa época, José Esparza, médico y virólogo profesor titular adjunto del Instituto de Virología Humana de la Escuela de Medicina de la Universidad de Maryland, Estados Unidos, expresaría desde allá que “no existen sugerencias de que haya una cepa más virulenta de coronavirus en Maracaibo”. El infectólogo e internista Julio Castro, profesor del Instituto de Medicina Tropical de la Universidad Central de Venezuela, afirmó por su parte que “no hay virus más agresivos o menos agresivos”. José Esparza, recalcaría que hay: “Cientos, sino miles, de cepas del virus se han secuenciado y no existe ninguna evidencia sólida de que las mutaciones que se detectan tienen alguna consecuencia con referencia a transmisibilidad, patogenicidad o efecto de una posible vacuna”.

Flor Helene Pujol, es Licenciada en Biología, summa cumlaude, Universidad Simón Bolívar, (1982); M.Sc. (1985) y Ph.Sc. (1989) en Biología del IVIC, e Investigador Titular e Investigador Emérito desde 2004 y 2018, respectivamente del IVIC. Actualmente Pujol es individuo de Número en el área de Virología de la Academia Nacional de Medicina; jefe del Laboratorio de Virología Molecular del Centro de Microbiología y Biología Celular del IVIC  desde el año 2001, ha publicado diversos importantes trabajos sobre sus investigaciones sobre el COVID-19 en Venezuela.  

 

Flor Pujol ha informado que la vigilancia genómica se realiza principalmente en el Laboratorio de Virología Molecular del IVIC, que ella dirige. Ya a finales de febrero y principios de marzo encontraron las primeras muestras con las dos mutaciones de interés y otras mutaciones que indicaban que se trataba de la variante P.1. Pujol destacaría que: “Una vez que encontramos estas primeras variantes putativas P.1 procedimos a secuenciar la espiga completa, que son 4.500 nucleótidos de los 30 mil. Encontramos que la primera muestra es idéntica o similar a otras muestras P.1 (de otros países) que están en las bases de datos y todas estas mutaciones que están en la espiga las encontramos y también la deleción de la NSP7, que es característica de esta variante”.

En el caso de las vacunas autorizadas hasta ahora en Venezuela, Sputnik V y Sinopharm, todavía no hay información ni datos públicos sobre su eficacia contra las variantes, dijo Pujol, señalando que solamente se sabe que el Instituto Gamaleya, desarrollador de la Sputnik V, ha declarado que su vacuna “funciona bien” contra las variantes.  También recordó Pujol una lección del virólogo José Esparza: “La biología teórica siempre requiere confirmación y la vacunología en particular es una ciencia empírica. Así que mientras no tengamos la evidencia, todo esto resulta ser por ahora muchas inferencias y muchas especulaciones”.

El 4 de abril, este año y en este mismo blog (https://bit.ly/345V9Vk) les decía que: “Aquí como muestra está la lista de los médicos zulianos caídos en la batalla por ayudar a los pacientes enfermos de COVID-19”, pero hoy día ya son más de 80 los médicos fallecidos. “Los centros asistenciales privados, esperan a los pocos “afortunados” enfermos con pagos de admisión entre 3.000 y 10.000 dólares. Los gastos diarios de una clínica pueden fácilmente rebasar los 2.000 dólares, de manera que el costo de la terapia intensiva por COVID-19 en Venezuela resulta ser superior al de Estados Unidos y Europa y la tragedia de perder a un familiar puede significar la ruina para una familia de las pocas que todavía tienen dinero para acceder al ejercicio privado de la Medicina”. En esta situación, en Latinoamérica, el 1 de Mayo de 2021 la OPS notificaría que existían 208.516 casos y 5.069 muertes adicionales “en las últimas 24 horas”, lo que representaba un aumento relativo del 0,32% en los casos y un aumento relativo del 0,32% en las muertes, en comparación con el día anterior.

Se supone que el programa Covax recibirá 200 millones de vacunas J&J a través de un acuerdo de compra avanzado. Parece mentira pero para esa fecha lo que se ha dicho es que: todavía no está claro qué tan rápido se entregarán las dosis… A  medida pasa el tiempo la brecha crece y se ensancha en lo relativo a la cobertura de la vacunación entre los ricos más ricos del mundo y los pobres más pobres del mundo. El portavoz de Johnson &Johnson anunció que la compañía está "tratando de suministrar dosis de vacunas lo más rápido posible"… ¿Amanecerá y veremos?

Maracaibo, sábado 22 de mayo del año 2021 en plena pandemia y sin vacunas…