Deborah Kerr

 Deborah Kerr

El 30 de septiembre de 2021 se cumplieron 100 años del nacimiento de Deborah Kerr. En 1990 Luis Garci el director español de cine entrevistaría a la estrella de Hollywood Deborah Kerr en Marbella, como relata en su libro Deborah Kerr (Helensburgh, 1921-Suffolk, Reino Unido, 2007), editado por Notorius.

Deborah Jane Kerr-Trimmer nació en Helensburgh, una pequeña población escocesa, el 30 de septiembre de 1921. Su padre era un militar que sufría las consecuencias de las heridas ocasionadas durante la Primera Guerra Mundial.³​ Siendo una joven tímida, descubrió la interpretación como un medio para expresarse. Su tía, que era profesora de actuación, le consiguió algunos papeles en obras teatrales mientras era aún adolescente.

 

Kerr se inició en el cine británico, con Mayor Barbara ​ junto a Rex Harrison, sobre la obra teatral de George Bernard Shaw. Tuvo gran éxito y se convirtió rápidamente en una incipiente estrella del cine británico con la compañía cinematográfica Rank, interviniendo en filmes del calibre de Hatter's castle (1942,”El castillo del odio”), adaptación de la novela de A. J. Cronin, ​ en compañía de James Mason. El Coronel Blimp (1943, con Michael Powell) considerada por la crítica como una de las diez mejores películas de la historia del cine británico; Separación peligrosa (1945,¹​Alexander Korda), I see a dark stranger (1946, Frank Launder) con notable actor Trevor Howard; o Narciso negro (1947, Michael Powell) con Jean Simmons, Flora Robson y Sabu.

La Metro-Goldwyn-Mayer la contrataría y en Hollywood donde comienza una exitosa etapa If winter comes (1947, Victor Saville); The hucksters (1947, Jack Conway) con Clark Gable, Adolphe Menjou y Ava Gardner; Edward, mi hijo (1949, ​ George Cukor) con Spencer Tracy; Las minas del rey Salomón (1950, Andrew Marton y Compton Bennett) con Stewart Granger; la célebre superproducción Quo Vadis? (1951, Mervyn LeRoy) junto a Robert Taylor, El prisionero de Zenda de Richard Thorpe rodada en 1952 de nuevo con Stewart Granger, James Mason y Jane Greer.

Kerr aceptó en 1953 trabajar para la Columbia en De aquí a la eternidad, encarnando a un personaje más libre e independiente y con una escena pasional que para la época, era bastante erótica con Burt Lancaster. Así rozó el escándalo y con la que rompió su imagen de heroína virginal e ingenua. La película tuvo gran éxito por su guion (basado en la novela de James Jones), ​ calidad artística y reparto (Frank Sinatra, Montgomery Clift, Donna Reed, Ernest Borgnine,...) y Kerr fue candidata al Oscar como mejor actriz principal.

‘De aquí a la eternidad’ la película de Fred Zinnemann, (1953) estuvo dominada por Deborah Kerr en el papel principal. Ya en su primera aparición, en una foto enmarcada sobre la mesa del despacho del capitán de la base militar en Hawái donde se ambienta en filme. Zinnemann está diciendo sutilmente que la esposa, va a ser el centro de la acción aún por venir: una historia de deseos ocultos, infidelidades, desasosiego moral y claustrofobia física en el asfixiante microcosmos de machismo y testosterona. Ella es una mujer libre. Mientras, su infiel marido permanece impoluto. Película de tipos duros, de celos y delirios de posesión, de prostitución y desesperanza, con el ataque a Pearl Harbor y la guerra casi encima, De aquí a la eternidad muestra uno de los besos más famosos de la historia del cine; la secuencia filmada en la playa…

A partir de entonces, la actriz alternó toda clase de papeles en películas tan destacadas como Julio César (1953, Joseph L. Mankiewicz) con Marlon Brando, Vivir un gran amor (1954, Edward Dmytryk) con Van Johnson, El rey y yo (1956, Walter Lang) con Yul Brynner y Rita Moreno, Té y simpatía (1957, Vincente Minnelli) junto a Leif Ericson y John Kerr Sólo Dios lo sabe (1957, ​ John Huston), al lado de Robert Mitchum; la inolvidable Tú y yo (Algo para recordar) (1957, Leo McCarey) en compañía de Cary Grant; Mesas separadas (1958, Delbert Mann) con Burt Lancaster, David Niven y Rita Hayworth; Buenos días, tristeza (1958, Otto Preminger), sobre la novela de Françoise Sagan; y Días sin vida (1959, Henry King), su última gran interpretación de los años 50 como esposa del escritor Francis Scott Fitzgerald (Gregory Peck).

En los años 60 Tres vidas errantes (1960, Fred Zinnemann), con Robert Mitchum; Página en blanco (1960, Stanley Donen) con Cary Grant, Jean Simmons y Robert Mitchum; ¡Suspense! (1961, Jack Clayton) de la novela de Henry James Otra vuelta de tuerca, junto a Michael Redgrave y Pamela Franklin; Sombras de sospecha (1961, Michael Anderson), con Gary Cooper en su última aparición en la pantalla;  La noche de la iguana (1964, John Huston), con Richard Burton, Ava Gardner y Sue Lyon. Mujer sin pasado (1964, Ronald Neame); El ojo del diablo (1966, J. Lee Thompson), Casino Royale (1967, John Huston), Temerarios del aire (1969, John Frankenheimer), junto a Burt Lancaster y Gene Hackman; y El compromiso (1969, Elia Kazan) con Kirk Douglas, Faye Dunaway y Hume Cronyn, siendo este el año en que se retiró.

A mediados de los años 80, reapareció en la TV británica, con dos papeles en el telefilme Reunión en Fairborough (su último trabajo junto a Robert Mitchum) y en la recordada miniserie "A Woman of Substance" ("Toda una mujer"), basada en el best seller de 1979 escrito por Barbara Taylor Bradford. Kerr estuvo casada por primera vez entre 1945 y 1959, y tuvo dos hijas de este matrimonio. Se volvió a casar en 1960 con el escritor y guionista de Hollywood Peter Viertel, autor del guion de La reina de África de John Huston; así como de la novela Cazador blanco, corazón negro, interpretada en el cine por Clint Eastwood.

El matrimonio vivió durante su última etapa en Suiza, aunque desde los años 70 solían pasar largas estancias en Marbella.  Deborah Kerr murió a los 86 años el martes 16 de octubre de 2007 en una villa rural de Suffolk, Inglaterra por complicaciones de la enfermedad de Parkinson. Diecinueve días después, el 4 de noviembre su esposo Peter Viertel murió de cáncer, en Marbella, España.

Maracaibo, jueves 11 de noviembre del año 2021