La ivermectina
y el Premio Nobel
William Cecil Campbell nació en 1930, en Ramelton, condado de Donegal, Irlanda. Asistió al colegio, se graduó en el Trinity College de Dublín en 1952, y consiguió su PhD de Universidad de Wisconsin en 1957. De 1957 a 1990 trabajó en el Merck Institute for Therapeutic Research. En la década de 1970, Campbell trabajaba como parasitólogo en MSD Research Laboratories para descubrir nuevos tratamientos para enfermedades causadas por parásitos en animales. Su equipo finalmente encontró lo que estaba buscando en una muestra de suelo del equipo del profesor Omura del Instituto Kitasato de Japón. El descubrimiento de la avermectina constituyó un hito importante en el tratamiento de las enfermedades parasitarias.
El descubrimiento de lo que sería la ivermectina se considera tan importante como el de la penicilina. A principios de los ochenta, el bioquímico japonés Satoshi Ōmura recogió una muestra de suelo cerca de un campo de golf al sur de Tokio. Encontró y aisló una bacteria desconocida que llamó Streptomyces avermectinius. Envió la muestra a William Campbell, experto en biología de parásitos quien trabajaba en el laboratorio MSD (Merck) en Estados Unidos. Campbell comprobó que el componente activo de la bacteria era muy eficaz para matar lombrices en animales. Purificó el compuesto y lo llamó Avermectina. En MSD se transformó químicamente en una fórmula más efectiva llamada Ivermectina, que se produjo industrialmente en 1981 y fue el medicamento veterinario más vendido durante veinte años. La bacteria S. avermectinius es la única fuente conocida de ivermectina.
Al comprobar que la ivermectina eliminaba las larvas de los parásitos que producen la oncocercosis, una enfermedad tropical que deja ciego al paciente, comenzó a recetarse a partir de 1987. Desde entonces, MSD ha donado el medicamento a los países donde la oncocercosis es endémica, como el África Subsahariana. En Venezuela todavía existe un foco entre la población yanomami que vive al sur de los estados Amazonas y Bolívar. En 2015, Ōmura y Campbell recibieron el Premio Nobel de Fisiología y Medicina por el descubrimiento de la ivermectina.
Las investigaciones llevadas a cabo por Campbell y sus colaboradores en MSD dieron lugar al desarrollo de la ivermectina y al descubrimiento en la segunda mitad de la década de 1970 de que Mectizan era eficaz frente a la oncocercosis en los seres humanos. La oncocercosis (https://bit.ly/35gBzGW) es una enfermedad debilitante endémica en varias zonas de África y Latinoamérica que se transmite por la picadura de las moscas negras y que puede causar picor intenso, dermatitis desfigurante, lesiones oculares y finalmente ceguera. Tras los grandes logros conseguidos por Campbell, otro científico de MSD, el ya fallecido Mohammed Aziz, encabezó el desarrollo clínico de Mectizan. Ensayos clínicos realizados en África promovidos por MSD y la OMS y dirigidos por Aziz confirmaron que Mectizan era eficaz como tratamiento de la ceguera de los ríos. MSD reconoció que para cumplir su objetivo de erradicar la ceguera de los ríos era necesario que muchas organizaciones especializadas trabajaran juntas en equipo.
Como consecuencia se creó el Programa de Donación de Mectizan. El programa lo dirige el Grupo de Trabajo para la Salud Mundial ubicado en Atlanta (Estados Unidos), que coordina las actividades de MSD, la OMS, el Banco Mundial y una serie de instituciones públicas y privadas. Hoy en día, el Programa de Donación de Mectizan es el programa de donación de fármacos específicos para una enfermedad de más larga duración y la asociación pública-privada más longeva de este tipo. El programa ofrece, anualmente, servicios a más de 250 millones de personas en las zonas afectadas y ha donado más de 2.000 millones de tratamientos desde 1987.
Desde los años ochenta, la ivermectina está disponible para el tratamiento de la oncocercosis y la filariasis linfática en áreas endémicas a través de donaciones de la industria farmacéutica Merck, sin embargo hoy en día la ivermectina, por desgracia, no es accesible para todas las personas que lo necesitan. pues no está comercializada o es muy cara en la mayoría de países para el tratamiento de las otras enfermedades parasitarias. De manera particular, no se encuentra disponible para tratar la estrongiloidiasis humana, a pesar de ser el tratamiento considerado de primera opción y también el más eficaz contra esta enfermedad parasitaria que afecta a decenas de millones de personas en el mundo y que resulta especialmente peligrosa en personas que tienen una inmunidad comprometida.
De 1984 a 1990 Campbell fue científico sénior y director de Investigación y Desarrollo. En 2002, fue elegido miembro de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. Fue uno de tres científicos a quienes se les otorgó el premio Nobel en Fisiología o Medicina en 2015 otorgado conjuntamente a Satoshi Ōmura y Youyou Tu por su investigación en terapias contra infecciones causadas por parásitos nematodos.
Finalmente, luego de numerosas especulaciones, aparecería un artículo en diciembre 18, 2020, en FLCCA (Front Line COVID-19 Critical Care Alliance) con el título de Profilaxis and treatment protocols for Covid 19. El autor es Pierre Kory MD MPA donde en 33 páginas 9 médicos de diversas instituciones de EUA, UK y de Noruega se atreven a señalar la posible acción de la ivermectina para proteger a los humanos contra el virus del Covid 19. Me disculpará mi estimado amigo virólogo maracucho, y entiendo las razones de José Esparza, pero cuando el río suena, usualmente algo trae; en este caso no parecen ser simplemente piedras…
Maracaibo, jueves 7 de enero, 2021
3 comentarios:
En pocas palabras sirve o no sirve la ivermectina.seria bueno que dieran su opinión como médicos
Este articulo constituido por 3 paginas, 881 Palabras, 5575 Caracteres, y 4704 Caracteres sin espacios, mas, pocos errores ortográficos, irrelevantes. No habla nada mas que de un -digamos- vermífugo esplendido que elimina parásitos nematodos, en ninguna parte tuve la oportunidad de asociarlo con problemas virales, no me explico la Emisión del FLCCA si la MDS no lo menciona para tal propósito y tampoco la OMS. Por supuesto tratándose de especulación científica es valido. Pero, recuerden la especulación mercantilista no es tan benigna. Es mas bien peligrosa y puede ocasionar, mas daño la posible cura que la enfermedad.
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