viernes, 9 de diciembre de 2022

Serendipia


Existe un cuento tradicional persa llamado “Los tres príncipes de Serendip”, sobre unos príncipes de la isla Serendip (antiguo nombre persa de la isla de Ceilán, la actual Sri Lanka) quienes solucionaban sus problemas a través de increíbles casualidades. Las versiones inglesas del relato provienen del libro Peregrinaggio di tre giovani figluoli del re di Serendippo publicado en Venecia en 1557 por Michele Tramezzino, según traducción de Christoforo Armeno. El cuento se recoge en el libro de poemas de 1302 Hasht Bihist (Ocho paraísos) de Jursan Amir, conocido como Amīr Khusrow. Serendipia deriva del inglés serendipity, neologismo acuñado por Horace Walpole en 1754.

El término “de chiripa”, es mucho más utilizado en el lenguaje coloquial, y podría considerarse también como un sinónimo de serendipia, si bien es usado para denominar a las cucarachas pequeñas y se tiene como un modismo de uso en el mundo hispanohablante; coloquialmente hablando se usa también “por carambola”, para destacar a una casualidad favorable.

No sabemos si es cierto que Luigi Galvani (1737-1798) estaba preparando un caldo de ancas de rana para su adorada esposa Lucía, la hija de uno de sus maestros, el profesor Galeazzi cuando se produjo su epifanía de las ranas. El mencionado Luigi Galvani (1737-1798) era un médico, fisiólogo y físico italiano, a quien sus estudios le permitieron descubrir el impulso nervioso fundando la biofísica y descifrar la naturaleza eléctrica de la galvanización. Galvani, quien además era miembro de la Tercera Orden de San Francisco o Venerable Orden Tercera -antiguo nombre de lo que hoy es la Orden Franciscana Seglar, fundada por san Francisco de Asís- conformada por laicos consagrados con una Regla, sería el fundador de la ingeniería electroquímica que estudia las baterías eléctricas

Lo cierto es que mientras disecaba una pata de rana, su bisturí tocó accidentalmente un gancho de bronce del que colgaba la pata –o sea “de chiripa- y se produjo una pequeña descarga, y la pata se contrajo espontáneamente. Mediante repetidos y consecuentes experimentos, Galvani se convenció de que lo que se veía eran los resultados de lo que llamó "electricidad animal". Galvani identificó a la electricidad animal con la fuerza vital que animaba los músculos de la rana, e invitó a sus colegas a que reprodujeran y confirmaran lo que hizo.

A partir aproximadamente de 1780, Galvani comenzó a incluir en sus conferencias pequeños experimentos prácticos que demostraban a los estudiantes la naturaleza y propiedades de la electricidad. En una de estas experiencias, el científico demostró que, aplicando una pequeña corriente eléctrica a la médula espinal de una rana muerta, se producían grandes contracciones musculares en los miembros de la misma. Estas descargas podían lograr que las patas (incluso separadas del cuerpo) saltaran igual que cuando el animal estaba vivo.

Luigi vivía en la casa de su profesor Galvani y se enamoraría de Luisa quien era hermosa y tenía 19 años y con quien finalmente se casaría en 1762. Para el año 1780, Lucía tenía 37 años y hay quien afirma que estaba presente en el asunto de las ranas, así como también en otros muchos de los experimentos que realizaba Luigi en su casa. Se dice que fue Luisa quien detectó la chispa surgida del escalpelo cuando los nervios de las ancas de ranas muertas comenzaron a hacer indetenibles contracturas musculares. Existiendo en el sitio una máquina electrostática formada por dos metales diferentes, el experimento fue provocado por una casualidad –o sea por serendipia- y la conexión entre el escalpelo, y el nervio de una rana, con o sin la chispa, lo publicaría Galvani once años más tarde.



Esta situación tan especial, induciría a Alessandro Volta, quien era su compatriota y contemporáneo, a realizar experimentos sobre la producción de corrientes eléctricas por el contacto de dos metales diferentes, los cuales darían por resultado la invención de la pila eléctrica. Así lo hizo en la Universidad de Pavía el colega de Galvani, Alessandro Volta, quien afirmó que los resultados eran correctos aunque no estaba muy no convencido con la explicación de Galvani. La principal traba a su explicación era el desconocimiento de los motivos por los que el músculo se contraía al recibir electricidad.

La teoría obvia era que la naturaleza del impulso nervioso era eléctrica, pero quedaba pendiente, poder demostrarla. El fisiólogo llamó a esta forma de producir energía "bioelectrogénesis". A través de numerosos y espectaculares experimentos -como electrocutar cadáveres humanos para hacerlos bailar la "danza de las convulsiones tónicas"- Galvani llegó a la conclusión de que la electricidad necesaria no provenía del exterior, sino que era generada en el interior del propio organismo vivo, que, una vez muerto, seguía conservando la capacidad de conducir el impulso y reaccionar a él consecuentemente. Luisa fallecería a la edad de 47 años en 1790 y Luigi habría de morir 8 años después jubilado y pobre mientras a Alexandro Volta, Napoleón Bonaparte le otorgaría dado el título de conde.


Sobre la serendipia se han escrito libros (Pérez Tamayo, Ruy. “Serendipia: ensayos sobre ciencia, medicina y otros sueños”. México: Siglo XXI Editores) y hasta se han filmado películas (Serendipity dirigida por Peter Chelsom, en el 2001, con John Cusack, Kate Beckinsale y Jeremy Piven). La palabra ha sido rescatada recientemente gracias al renovado interés en este tipo de asuntos y a otros motivos culturales t mientras las ranas pasarían al olvido, de Galvani nos quedaría el recuerdo de las ancas con sacudidas post mortem con el primer “galvanómetro”.

Podríamos concluir diciendo que todas estas cosas de amores y poetas, de escritoras y chispas eléctricas, fueron en buena medida producto de la serendipia, quizás como Arquímedes en el agua sin que nadie dijese “eureka” antes que él, o cuando la manzana le cayó en la cabeza a Issac Newton o lo sucedido con un hongo, el de la penicilina cuando contaminó el cultivo de bacterias del doctor Fleming… Tan solo serendipia.

Maracaibo, viernes 9 de diciembre del año 2022

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