Para un escritor, el mar es algo inasible¸ conocemos el mar de Chateaubriand y el mar de Víctor Hugo, el mar en tono mayor, el mar profundo y azul, el mar de Las Antillas y el mar elocuente que parece haber sido creado expresamente para almas gigantescas, y también está el mar de los malos poetas, cuyo número es incontable, casi infinito.
Pero siempre existirá el mar auténtico, ese mar sin lirismos de academia y sin balbuceos, el mar de los misterios desorbitados y eternos que hay que vencer por la fuerza. Ese es el mar de Conrad. Los ensayos marítimos de Joseph Conrad (1857-1924) expresan siempre una calidez y proximidad sorprendentes al repasar sus vivencias marítimas, primero como marinero en Francia y más adelante en la marina mercante británica.
Inglaterra ha tenido en Robert Louis Stevenson (https://bit.ly/3OgL260) al mayor escritor de aventuras evocando el mar, pero también lo habría de lograr y con un convincente vigor expresivo, Joseph Conrad quien adoptó el inglés como lengua literaria y cultivó un tipo de novela de aventuras generalmente basada en algún tema real o en algún melodrama sobre un curioso fondo de lejanía. Podría verse a Joseph Conrad como un Stevenson más literario, o de cualidades algo misteriosas, pues siendo oficial de la marina mercante británica el novelista nacido en Polonia en el mar pareciera ir a las profundidades marinas y las de la mente de sus personajes.
Los textos suyos, los de Conrad, crean un vivísimo retrato de la relación entre el hombre y el mar, en una época cuando la llegada del vapor supuso el fin de la hegemonía de los barcos de vela. El espejo del mar es la insuperable reminiscencia de una forma de vida y una obra imprescindible para comprender la relación de su autor con el mar. Conrad a la vuelta de su último viaje a Australia, y tras escribir su primera novela, La locura de Almayer, en 1894, conoció a su futura mujer, Jessie George, con la que se casó dos años después.
En los años siguientes vivirían en el sur de Inglaterra, él dedicado exclusivamente a su labor literaria, y entonces Conrad publicaría Un paria de las islas (1896), y al año siguiente, Salvamento, El negro del Narcissus y Una avanzada del progreso. Durante esos años conocería a Rudyard Kipling, a Henry James y a H. G. Wells. En 1898 tras haber padecido de graves dificultades económicas debido a su afición al juego, trató infructuosamente de regresar a la marina.
En 1900 escribiría Tifón y Lord Jim, una novela ésta, en la que evoca el traumático accidente que le tocaría sufrir a bordo del vapor "Palestine", y el cual estuvo a punto de costarle la vida. Luego. en los años siguientes, publicaría Nostromo, y El espejo del mar. Tras depresiones y varios problemas de salud, además de sus dificultades económicas, con una fuerte carga de pesimismo con respecto a la condición humana, se evidenciarían en su último relato (https://bit.ly/3OiBtn5) El corazón de las tinieblas, una obra que sería publicada inicialmente a través de tres entregas de Blackwood's Magazine, entre febrero y abril de 1899, para celebrar la milésima edición de esa revista.
En 1902 aparecería como parte de su libro "Youth: a Narrative, and Two Other Stories" y posteriormente, sería editada de manera separada y traducida a numerosos idiomas donde narraría indirectamente las atrocidades que se estaban cometiendo contra la población del el Estado Libre del Congo. En El corazón de las tinieblas, Conrad cuenta lo sucedido a través de la narración de Marlow en un viaje fluvial que hace el relator de las historias de Conrad; en este caso en busca de un personaje misterioso, quien será Marlon Brando el actor en Apocalipsis now la película dirigida y producida por Francis Ford Coppola en 1979, un filme basado en la novela de Conrad, aunque en la película, trasladaría la acción a la guerra de Vietnam, con Martin Sheen, y Robert Duval, donde Marlon Brando asume el rol de Kurtz el personaje misterioso que llevaría al film a ganar 2 premios Óscar y Palma de Oro del Festival de Cannes de ese año.
El antropólogo inglés J.G. Frazer cuenta en su libro La Rama Dorada que a los reyes del fuego y del agua en Camboya “no se les permite morir de muerte natural y por esto cuando algunos de estos reyes míticos está seriamente enfermo y los jefes de la familia piensan que no se va a recuperar la salud: lo apuñalan”. No es casualidad que en la mesilla que había junto a la cama de Kurtz se pueda ver claramente un ejemplar de este libro junto a otro de los Four Quarters de T. S Eliot, dejando bastante claro que Coppola cambió el final conscientemente con respecto a la novela de Conrad para dejar esa sensación de que todo en este mundo es capaz de regenerarse, aunque su germen esté en el mal más profundo.
En Lord Jim, Conrad, evoca el traumático accidente de su vida y habría de ser Peter O'Toole (1932-2013) un actor irlandés célebre por haber sido el protagonista de la película Lawrence de Arabia (1952), quien interpretaría en Lord Jim (1965) el filme dirigido por Richard Brooks, para cubrir un papel que tal vez le correspondería precisamente al escritor. Es Marlow quien, de nuevo, relata la historia de Jim, el primer oficial de la nave Patna transportando peregrinos que van a La Meca, la cual sufrirá desperfectos que le obligarán a abandonar la nave por temor a su posible naufragio.
Lo cierto de la historia que describe Conrad en la escritura de Marlow, se basaría en un incidente real en un barco inglés, el SS Jadash que en 1880 cargado de peregrinos casi se hunde y el capitán Joseph Clark decidió abandonar la nave con su mujer y algunos marineros por temor al naufragio pero los peregrinos se salvarían gracias a un barco que los auxiliaría con un gran escándalo cuando se supo lo sucedido.
Conrad también conocería sobre un aventurero inglés, de nombre James Brooke quien nacido en la India llegaría a convertirse en raja y, le conocerían como “el primer raja blanco” de la India y estableció un “estado independiente” en la isla de Borneo. Conrad reunió estos dos relatos reales para crear su novela sobre Lord Jim y el director de cine Richrad Brooks quien habría hecho otras adaptaciones de obras literarias como Los hermanos Karamazov y Elmer Gentry, conservando los detalles básicos crearía el filme Lord Jim.
En Miami, Florida, EUA, el día miércoles 10 de enero del 2024.
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