jueves, 3 de octubre de 2024

"P.M.", el documental


En este blog lapesteloca, hemos hablado reiterativamente sobre el cine, y en Amazon existe un relato sobre el cine que es hijo de este blog (ver). Hace ya varios años conversamos sobre un escritor cubano famoso que escribió sobre cine con un seudónimo sin llegar a convertirse nunca en lo que se llama un verdadero crítico de cine, él fue Guillermo Cabrera Infante (https://tinyurl.com/5v737v6p). El escritor, usando el seudónimo de G. Caín compartió el placer de ver y analizar las películas con los lectores del semanario Carteles y del suplemento cultural Lunes de Revolución, que él mismo dirigía, antes de tener que marcharse de La Habana, Cuba.


Cabrera Infante (Gibara, Cuba,1929-Londres 2005) se desengañaría de la revolución cubana, precisamente a través del cine. Sería tempranamente y precisamente sucedió a raíz del escándalo suscitado entre las autoridades por el documental 'P.M' (1961), producido por el propio Cabrera Infante y dirigido por su hermano Sabá Cabrera y Orlando Jiménez-Leal. “P.M” (el documental que hoy día, pude verse por internet). sencillamente retrataba en blanco y negro la vida nocturna de La Habana, en toda su alegría y esplendor, durante el primer año de la revolución. Vendría a tener el honor de ser la primera manifestación artística que se prohibió bajo la dictadura de los Castro. "No tenía ninguna connotación política, pero se la acusaba de mostrar a la gente divirtiéndose cuando se suponía que debían estar con el fusil al hombro defendiendo las costas de Cuba". Así lo explicaría años después el mismo Cabrera Infante.

 

Orlando Jiménez-Leal, también unos años después, sería el codirector de 'Conducta impropia' junto a Néstor Almendros, fue un documental del año 1983 dirigido por  Almendros, el cual trataba sobre la persecución de homosexuales e intelectuales en Cuba en los inicios de la Revolución Cubana hasta los primeros años de 1980. En el documental, entrevistarían a varios hombres relevantes de la cultura cubana (el bailarín Lorenzo Monreal, el escritor Reinaldo ArenasJorge Ronet y Mireya Robles, el actor de teatro Rafael de PaletJorge Lago, y  Heberto Padilla, el poeta José Mario Rodríguez y Guillermo Cabrera Infante). El documental demostraba la existencia de campos de concentración para homosexuales en la Cuba de Fidel Castro.

 

“En la tarde del miércoles 10 de mayo de 1961, llegué a la redacción del periódico Revolución con la intención de escribir mi crítica de cine; camino de mi escritorio Guillermo Cabrera Infante me salió al paso y me dijo: -“Ven, vamos a ver PM”. -¿Y qué cosa es PM? -Es la película de Orlando y Sabá. -Es que todavía no he escrito mi crítica, le dije. -Ya la escribirás más tarde, me respondió. Es sólo un corto. Guillermo agarró su chaqueta y salimos del salón en el que se encontraba la redacción de Lunes de Revolución y de la página de “Espectáculos” del periódico, con su colección de fotos cubriendo toda una pared... Este texto es parte del libro. Sin Pedir Permiso: Cuba, el cine y una época, en tiempos difíciles (2014)  del cineasta Fausto Canel.

 

Fausto Canel (La Habana, 1939) fue director y crítico de cine, y escritor, quien formó parte del grupo de cineastas que fundó el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC). Antes de salir de Cuba sus filmes más destacados son El final (1965), Desarraigo (1965) y Papeles son papeles (1966). Desde 1968 Fausto Canel decidió romper con la ideología castrista y se instalaría en París, donde dirigió documentales para la televisión francesa como Patchwork (1969), Journal de Madrid (1973) y Transcontinental a la dérive (1975). En 1977 se instaló en España, donde vivió diez años y dirigió el cortometraje Espera, protagonizado por Héctor Alterio y Cipe Lincovski, y el largometraje hispanobritánico Power Game (1982). ​Desde 1987 se estableció en los Estados Unidos, donde dirigió el documental Campo minado sobre el retorno de la democracia en los países del cono Sur de Latinoamérica. En 1991 publicó la novela autobiográfica Ni tiempo para pedir auxilio. Canel reside en Miami, y hasta 2015 trabajó para la emisora TV Martí. ​


Es interesante también, saber más, sobre quiénes eran Carlos Franqui y Guillermo Cabrera Infante. Franqui había sido hasta ese momento el hombre clave de la propaganda del castrismo. Antiguo comunista, abandonó el partido cuando las denuncias por Jrushchov sobre Iósif Stalin. Franqui se hizo castrista y fue luchador en la clandestinidad, dónde fundó el periódico Revolución, y luego, fue activo combatiente en la Sierra Maestra, donde continuó publicando el periódico y creó Radio Rebelde. Cabrera Infante, era un escritor y crítico de cine muy conocido internacionalmente, era el director del semanario Lunes, publicado cada semana por el periódico Revolución. Como amigo y confidente de Franqui, ambos representaban el ala liberal, de tendencia social demócrata, dentro del Movimiento 26 de Julio.


 

En 1954, Guillermo Cabrera Infante era el crítico cinematográfico de la revista Carteles con la que colaboraría hasta 1960. En la década del cincuenta, Cabrera Infante escribió la mayor parte de sus historias, compiladas más tarde en, Así en la paz, como en la guerra, Tres tristes tigres (1968), Vista del amanecer en el trópico(1974), La Habana para un infante difunto(1979). Tras divorciarse de su primera mujer, casó con Miriam Gómez quien sería su compañera durante toda su vida. Con la llegada al poder de Fidel Castro (1959), Cabrera Infante, que había apoyado la revolución, fue nombrado director del Consejo Nacional de Cultura, ejecutivo del Instituto del Cine y subdirector del diario Revolución (actualmente el Granma). Era el director del semanario Lunes de Revolución, publicado cada semana por el periódico  como su suplemento literario.  Sus relaciones con el régimen pronto se deterioraron, debido al cortometraje que Orlando Jiménez Leal y su hermano, Sabá Cabrera, que rodaron a finales de 1960.


Alfredo Guevara (1925-2013) fue un cineasta cubano, compañero de universidad de Fidel Castro quien desarrolló su labor en el cine de Cuba a partir de 1959. Guevara se exilió en México durante los últimos años de la dictadura de Fulgencio Batista. Volvió a Cuba después del triunfo de la Revolución donde formó parte del núcleo gobernante que fraguó las leyes revolucionarias más radicales, Con el triunfo de la Revolución cubana: fue fundador del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos  (ICAIC), que dirigió, en dos etapas, y del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano durante treinta años. Con Lionel Soto, había sido el hombre que llevó a Raúl Castro a la Unión Soviética, por petición del hermano mayor. Fue testigo del primer contacto de la KGB con Raúl y en viaje en barco regresaron a la isla.

 

Alfredo Guevara era parte de un selecto grupo que, durante meses, se reuniría en la casa del Che, en Tarará, dedicado a escribir las leyes socialistas mientras que el gabinete del primer ministro, Miró Cardona, no sabía que estaban preparando un gobierno paralelo y secreto al que ni los viejos comunistas, ni tampoco Carlos Franqui, fueron invitados.

 

Castro necesitaba del cine para llevar al mundo la mística de sus barbudos y Guevara había sido el coordinador de aquellas reuniones, pero el equilibrio entre Guevara y Franqui que había sido siempre la regla, se quebraba. A mediados de 1961, había llegado el momento para atacar a Carlos Franqui, debilitado en esa nueva etapa que había comenzado con Playa Girón y la proclamación de Fidel Castro, apenas un mes antes. Ya estaba claro el carácter socialista de la Revolución, lo cual coincidirá con Orlando y Sabá quienes habían presentado el documental PM al ICAIC para su aprobación en los cines, y Guevara aprovecharía para prohibirla.

 

Con estos detalles finalizo la historia de un fantástico documental que valió para modificar la historia de numerosos personajes de gran interés en el cine la literatura y la política.


En Maracaibo, el jueves 3 de octubre del año 2024


No hay comentarios:

Publicar un comentario