lunes, 9 de marzo de 2020

Los pangolines


Los pangolines
Pangola es un tipo de grama o hierba (Digitaria eriantha), caracterizada por su resistencia a la sequía, rápido crecimiento y su adaptabilidad a todo tipo de suelo;  pero ser “Pangola” en Venezuela se refiere a algo que es fácil de hacer, que no tiene ningún problema para ser resuelto: “ese asunto es pangola” es decir, que es fácil de arregalar.  Por otra parte, un “pangola” es alguien tonto, pánfilo, que es fácil de engañar; pero un pangolín, es otra cosa... El Pangolín es el mamífero más traficado del mundo… El Pangolín es un animal en serio peligro de extinción debido al el valor de sus escamas, y por ello vamos a hablar hoy de ese curioso animalito… 

Los folidotos (Pholidota, "cubierto de escamas" en griego antiguo) forman un orden de mamíferos placentarios, conocidos popularmente como pangolines. El orden contiene ocho especies vivas, ​ todas pertenecientes al género Manis, uno de los cuatro que forman la familia de los mánidos.
Los pangolines de África habitan en el sur y centro del continente africano, desde Sudán y Senegal al norte hasta Sudáfrica al sur. Los pangolines de Asia se extienden por el sudoeste del continente, desde Pakistán al oeste hasta Borneo al este. Mide entre 45 y 75 centímetros, con una cola de entre 33 y 45 centímetros. Como en las otras especies, los machos son frecuentemente más grandes que las hembras. Las escamas son de un color amarillo amarronado o grisáceo, y representan entre un cuarto y un tercio de la masa corporal del animal. Posee cinco garras en cada pata, de las cuales tres están adaptadas para excavar.

Los pangolines son animales tímidos y solitarios, habitualmente nocturnos, que pasan el día dentro de su madriguera. Cuando están dentro de la madriguera, la tapan con tierra y no la abren hasta que tienen que volver a salir. ​ Lo más habitual es que las hembras vivan solas con sus crías, si es que tienen, pero en algunas ocasiones comparten madriguera con un macho. A diferencia de otros animales que permanecen siempre en la misma zona, los pangolines tienden a vagar más por regiones amplias, marcando territorio.
Los pangolines son animales principalmente bípedos. También son buenos nadadores, que se pueden desplazar con cierta facilidad dentro del agua, y gracias a su cola prensil, son buenos escaladores. Al mismo tiempo, no son capaces de desplazarse con rapidez en ninguno de estos medios, por lo que su defensa principal consiste en enrollarse sobre sí mismo para proteger las partes blandas de su cuerpo con las escamas. Esta coraza puede resistir el ataque de hienas y la mayoría de félidos

Los pangolines tienen un sentido del olfato bien desarrollado, que utilizan para encontrar los nidos de termitas y hormigas. A diferencia de otros mamíferos, y en común con el oso hormiguero  y con el murciélago Anoura fistulata, los pangolines no tienen la lengua unida al hioides, de manera que cuando no la están utilizando, la lengua reposa en una cavidad en el tórax entre el esternón y la tráquea. La lengua está cubierta por una secreción mucosa por las glándulas salivares que contribuye a atrapar insectos con más facilidad. Un pangolín puede comer hasta 200.000 hormigas diarias. Una vez que han encontrado los nidos de insectos, excavan con las patas para sacarlos al exterior, donde los atrapan con su larga lengua (que en los pangolines más grandes puede llegar a medir 40 centímetros, pero con diámetro de sólo medio centímetro). 

Ya que no poseen dientes, los pangolines no mastican sus presas antes de tragárselas. Por este motivo se suelen tragar pequeñas piedras y granos de arena, que sirven para moler las presas dentro del estómago. El estómago está blindado con un epitelio puntiagudo y duro que protege a los pangolines de las picaduras y el veneno de las hormigas y las termitas. En las especies asiáticas, la salida del estómago presenta dos pequeños "puntas pilóricas" que son capaces de deshacer hasta el exoesqueleto más duro. 

Existe el pangolín arborícola que no se limita a buscar nidos de insectos, sino que en ocasiones utiliza la cola para colgarse de la rama de un árbol y arranca la corteza para encontrar las termitas que se esconden debajo. Como en algunos casos los insectos de los que se alimentan los pangolines pueden ofrecer una resistencia agresiva, estos mamíferos han desarrollado una protección especial. Son capaces de cerrar los orificios de la nariz y las orejas,​ y sus ojos están protegidos por unos párpados blindados. 

Los pangolines llegan a su madurez sexual a la edad de 2 años. Los pangolines se pueden reproducir en cualquier época del año, aunque los nacimientos son más frecuentes entre noviembre y marzo. Habitualmente son animales solitarios, los machos y las hembras se tienen que encontrar siguiendo el rastro del olor. Las crías de pangolín nacen con una longitud aproximada de 15 centímetros y un peso aproximado de 330 gramos, pero estas medidas difieren entre las diferentes especies. Al nacer, las crías ya tienen los ojos abiertos, pero sus escamas todavía son blandas. Igualmente, el proceso de endurecimiento comienza normalmente a los dos días de nacer. Las madres protegen sus crías manteniéndolas pegadas a su cuerpo enroscado y, como todos los mamíferos, se encarga de alimentarlos con leche que producen en su único par de mamas

El pangolín es el mamífero más afectado por el tráfico de especies, especialmente en Asia. En países como China o Vietnam, su carne es considerada un manjar y sus escamas son utilizadas como ingrediente de medicina tradicional para el tratamiento de remedios como el asma, el reumatismo o la artritis. 2,7 millones es el total de pangolines cazados en un año en Camerún, la República Centroafricana, Guinea Ecuatorial, Gabón, la República Democrática del Congo y la República del Congo.
Maracaibo, lunes 9 de marzo, 2020

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