“Ríndase ante este pueblo”

“Ríndase ante este pueblo”

"Ríndase ante este pueblo". Así increpó al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, el estudiante Lesther Alemán, encarnando la rebeldía de los jóvenes que encabezan desde hace más de un mes las protestas contra el gobierno. "Esta no es una mesa de diálogo. Es una mesa para negociar su salida y lo sabe muy bien porque el pueblo es lo que ha solicitado", dijo Alemán, con voz firme, tras tomar la palabra durante la sesión de instalación del diálogo nacional que, bajo el auspicio de la Conferencia Episcopal, buscaba una salida a la crisis política que sacude al país centroamericano. Alemán contó que al tener enfrente a Ortega le "dio mucha impotencia" su actitud y "arrogancia en medio del dolor" de quienes han perdido a hijos, padres, hermanos. Cuando el exguerrillero de 72 años asumió la presidencia en 2007, Lester tenía nueve años. Ahora reta al presidente Ortega. "¿Por qué estoy hablando y por qué me salto la palabra suya? Porque nosotros hemos puesto los muertos, nosotros hemos puesto los desaparecidos, los que están secuestrados", señaló el joven para justificar su atrevimiento. Alto, de voz estentórea, anteojos grandes de marco negro y con un pañuelo azul y blanco -colores de la bandera de Nicaragua- atado al cuello. "Usted es el jefe supremo de la Policía Nacional y del Ejército de Nicaragua, por ello le pedimos que ahorita mismo ordene el cese de estos ataques, de la represión y de los asesinatos por parte de las fuerzas paramilitares, de sus tropas, de las turbas adeptas al gobierno", agregó el joven. Alemán es considerado un héroe. Estudiante de cuarto año de Comunicación Social en la Universidad Centroamericana (UCA), Alemán es un becario, se beneficia de una ley de la década de 1990 que aporta 6% del presupuesto oficial a las universidades, una conquista de otras violentas manifestaciones."Es un excelente alumno, muy participativo en clases, muy solidario, le gusta servir y ayudar", manifestó a la AFP su profesor de periodismo, Juan Ramón Huerta. Le gusta el periodismo, pero "siempre estuvo interesado en la política". Aunque antes quería ser militar y prefiere que le llamen por su apellido, como es norma en el ejército, dijo Huerta.

"Es un sueño creer que Ortega se irá pronto”, opinó Lester después de la reunión, aunque no descartó que con presión en las calles y el diálogo mediado por la iglesia católica, el gobernante decida abandonar el país, como hiciera el dictador Anastasio Somoza en 1979. Puede parecer una paradoja, pero el sandinismo que accedió por métodos revolucionarios al poder derrotando la dictadura de Somoza, asumió su derrota frente a Violeta Chamorro en 1990 y a pesar del gran disgusto de Fidel Castro, le entregó el poder. Según Sergio Ramírez, “en el sandinismo existía la tentación de no reconocer los resultados”, pero Ramírez, entre otros, convenció a Ortega para que regresara la institucionalidad a Nicaragua. Venezuela es el ejemplo contrario, “cómo se llega por métodos democráticos al poder y se desguaza un Estado hasta convertirlo en una dictadura ruinosa y represora”…

Las protestas contra Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, comenzaron el 18 de abril pasado, por unas fallidas reformas de la seguridad social y se convirtieron en una exigencia de renuncia del mandatario, después de once años en el poder, con acusaciones de abuso y corrupción.  Desde el jueves 19 de abril, los universitarios se enfrentaron a la represión policial y de las turbas de la Juventud Sandinista (JS) en los recintos de las universidades públicas. Al menos treinta personas han muerto en estos días de crisis. El domingo, frente a la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), se dieron los últimos enfrentamientos, en el mismo sitio donde el lunes 23 una marcha pacífica. El domingo 22 de abril, cuando amanecieron los saqueos en Managua, Maurice Ortega Murillo, uno de los hijos de la pareja presidencial, escribió en su cuenta de Twitter que los ciudadanos y estudiantes que protestaban contra la reforma al Seguro Social eran delincuentes. Maurice, junto a sus hermanos Daniel Edmundo y Carlos Enrique controlan tres canales privados de televisión (4 y13), además del Canal 6, que es del Estado. El otro hijo de la pareja presidencial, el director de Canal 8, Juan Carlos Ortega, se declaró en defensa permanente “por la paz” en su cuenta de Twitter, en una publicación del viernes 20 de abril.

 La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) han responsabilizado a Ortega de graves violaciones de los derechos humanos, "asesinatos, ejecuciones extrajudiciales, malos tratos, posibles actos de tortura y detenciones arbitrarias". La dura represión a las manifestaciones y el descontento que arrastraba la población después de once años del Gobierno de Ortega derivó en la oleada de protestas pidiendo su dimisión. La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANDPH) recoge ya un balance de 351 muertos. La iglesia Católica ha tratado de mediar en un diálogo para una salida pacífica, la comunidad internacional ha presionado exigiendo el cese de la represión, pero la herida sigue abierta. 

Maracaibo 23 de julio de 2018