martes, 8 de abril de 2025

Ratones peludos y Mamuts

 

El mundo cambia, pero la verdad permanece, esto posiblemente habrán dicho quienes esperaban  crear 'ratones lanudos', como un paso más hacia la 'desextinción' (engendrar un ejemplar de un especie extinta ya desaparecida ) del mamut, donde los roedores modificados genéticamente por Colossal Biosciences para que su pelaje fuese similar al de los paquidermos extintos: grueso, rizado y rojizo…

 

Un equipo dirigido por la científica Beth Shapiro, ha trabajado con ratones en la tarea de identificar los genes responsables de características distintivas de los mamuts, como su pelaje espeso, su capacidad de soportar temperaturas extremas y sus reservas de grasa adicionales, comparado los genomas de docenas de extraídos de restos fósiles con los de elefantes y otras especies cercanas, o no tanto, como los ratones…

 

Han editado ratones para portar hasta ocho modificaciones genéticas, incluyendo tres mutaciones similares a las de los mamuts y otras que afectan al pelaje en los roedores que no están presentes en el ADN de los proboscídeos extintos. El resultado fue un ratón con un pelaje más largo y de un tono marrón dorado, en lugar del característico gris oscuro de los ratones de laboratorio. De esta manera Colossal Biosciences presenta un roedor con genes “inspirados en el mamut”, aunque los expertos dudan de su relevancia en la desextinción de esta criatura. La compañía, ha recaudado cientos de millones de dólares con el ambicioso objetivo de devolver a la vida un mamut lanudo (Mammuthus primigenius), y asegura que este experimento representa un hito en su camino hacia la desextinción.

 

El genoma del ratón lanudo ha sido modificado con una combinación de mutaciones inspiradas en los mamuts y otras ya conocidas por influir en el crecimiento del pelo de los ratones. Según un comunicado de prensa emitido por Colossal en marzo, es un “momento crucial” en su misión, aunque la comunidad científica observa sus evidencias con cautela, preguntándose si realmente este roedor supone un paso significativo en la recreación de especies extintas y sostienen que este ratón es una prueba tangible de que la ingeniería genética puede recuperar características clave de los mamuts en otros organismos y confía en que finalmente modificarán genéticamente elefantes asiáticos (Elephas maximus), los parientes vivos más cercanos del mamut, para dotarlos de rasgos que les permitan habitar ecosistemas similares a los de sus ancestros prehistóricos. 

 

Stephan Riesenberg, experto en edición genética del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva, minimiza la importancia del experimento: “Estamos muy lejos de crear un mamut o siquiera un ratón mamut”, afirma. En su opinión, este desarrollo es más una curiosidad biológica que un verdadero avance hacia la desextinción. Existen líneas de ratones con pelaje similar y están a la venta desde hace más de dos décadas, aunque la empresa dice no tener intención de comercializar estos ratones, vg: La cepa wooly del laboratorio Jackson, que porta una mutación en el gen Fam83g, uno de los mismos genes alterados en el experimento de Colossal.


 

Vincent Lynch, genetista evolutivo de la Universidad de Buffalo, señala que es difícil separar los efectos de las mutaciones específicas de los ratones de las inspiradas en los mamuts. De los cambios introducidos, solo tres provienen del estudio de la genética del mamut: uno relacionado con el metabolismo de las grasas (Fabp2) y dos que afectan la estructura del cabello (Krt27 y Tgfa). En su opinión, el experimento no demuestra de manera concluyente que las mutaciones propias de los mamuts tengan un impacto biológico significativo.

 

La gran incógnita sigue siendo cuántas modificaciones genéticas serían necesarias para dotar a un elefante asiático de rasgos funcionales de un mamut, aunque Colossal diga que no desea buscar una réplica exacta de los mamuts, sino un organismo capaz de desempeñar el mismo papel ecológico que estos gigantes prehistóricos alguna vez ocuparon.

 

Técnicamente, realizar ocho modificaciones en un genoma no es algo extraordinario en la actualidad. Riesenberg y su equipo trabajan en métodos para introducir cientos de cambios genéticos en células madre humanas, con el fin de estudiar qué hace único al ser humano en comparación con los neandertales. Pero alterar el genoma a esa escala ni siquiera nos acercaría a crear un mamut. Aunque este experimento podría servir como una prueba de concepto, sigue siendo una modificación en un organismo pequeño y genéticamente distante del objetivo final: un elefante con características del mamut. Hasta ahora, solo son “ratones lindos y peludos”

 

Colossal ha recaudado US$ 435 millones desde que fue fundada en 2021 por el empresario Ben Lamm y el genetista de la Universidad de Harvard George Church. La compañía planea recrear el mamut, el dodo y el tigre de Tasmania, editando el genoma del pariente vivo más cercano de cada especie para crear un animal híbrido que sería visualmente indistinguible de su predecesor extinto.

 

En última instancia, la compañía quiere restaurar la fauna a su hábitat natural. En el caso de los mamuts, Colossal ha dicho anteriormente que está en camino de introducir los primeros terneros de mamut lanudo en 2028.

 

Maracaibo, martes 8 de abril del año 2025

lunes, 7 de abril de 2025

El mole negro de Oaxaca

 

En México son tradicionales los moles, que son unas salsas típicas preparadas con chile y especias; los más populares son el mole rojo y el verde, pero hay más, y entre ellos destaca el mole negro, que es uno de “los siete moles”, elaborados en el Estado de Oaxaca. Fuera de Oaxaca es conocido como “mole oaxaqueño”. Tiene un sabor ligeramente picante tirando a dulzón. Es un plato común en diferentes fiestas y celebraciones. Se suele servir acompañando a la carne de guajalote (pavo) o pollo, con tortillas o con tlayudas (que son las tortillas de maíz típicas de Oaxaca).

 

La historia del mole, pareciera ser leyenda, ya que hay diversas versiones sobre su origen. En los tiempos remotos de la América prehispánica, los aztecas preparaban mezclas con chiles, jitomate, cacao y especias, que daban como resultado unas salsas a las que llamaban “mulli”, término del cual derivaría la palabra “mole”. Cuentan que estos mullis servían de ofrenda a los dioses. Con el tiempo, la preparación de estas salsas fue evolucionando y cruzándose con las aportaciones en ingredientes y especias de los conquistadores españoles.

 

La evolución del mole, está ligada a la de los conventos que se construyeron en México, tras la conquista del nuevo mundo. Según una de estas versiones, una monja del Convento de Santa Rosa, en Puebla, dio con el sabor del mole poblano al moler en un metate diferentes chiles y otros ingredientes. La versión tiene una variante ampliada, con nombre y apellidos pues se trata de Andrea de la Asunción quien habría sido la monja dominica que, por inspiración divina, creó el mole para agasajar al virrey Tomás Antonio de Serna, que según cuentan quedó muy complacido con esta deliciosa preparación.

 

Existe otra versión según la cual el origen del mole fue producto del despiste e un fraile, Fray Pascual Bailón, quien no era  Pascual Baylón Yubero (nacido en Torrehermosa, España, en mayo de 1540-y fallecido en 1592) Baylón Yubero es venerado como santo por la Iglesia católica con el nombre de san Pascual Bailón o Baylón y la tradición popular afirma que orando experimentaba tanta alegría que muchas veces se ponía a bailar, pos este, el del cuento del mole, es otro fraile bailón.

 

Cada región de México tiene su mole (casi como las de Polar en Venezuela) y en las regiones se le ha ido dando a sus moles, su propio carácter y según cuentan fue de esta forma, como surgió el mole negro en Oaxaca. Un fraile mexicano, era cocinero de un convento poblano, y estaba nervioso por la visita de Juan Palafox y Mendoza, virrey de la Nueva España y del arzobispo de Puebla. Entonces el fraile nervioso, se tropezó con la cazuela donde se cocinaban unos guajalotes y de forma fortuita cayeron al guiso chiles, chocolate, almendras y otras especias. Sin embargo, el virrey al probarlo, quedó gratamente sorprendido por el sabor del nuevo plato.


 

El 21 de agosto de 1929 en la ciudad de México, se casaron Frida Khalo y Diego Rivera. Se habían conocido cuando ella tenía 15 años y él 35. Ella era una estudiante avezada y él ya era célebre. Ella era menudita, y tenía apenas veintidós años de edad cuando decidió unir su vida a este hombre enorme y gordo, de cuarenta y tres años, divorciado, y para colmo, comunista. En aquella “fiesta” habría amantes y la primera de muchas humillaciones en público para Frida.

 

Años antes, en 1922 mientras Diego Rivera, entonces de 36 años, y ya un pintor famoso, pintaba un enorme mural en el anfiteatro del centro donde estudiaba Frida Kahlo quien era apenas una adolescente, una de las 35 mujeres entre los 2.000 estudiantes que se preparaban allí para entrar en la universidad. Diego se paseaba en los andamios, afanándose en su trabajo, mientras desde el suelo le acompañaba su futura esposa, Lupe Marín, retratada en el mural como “la justicia” y “la mujer”, dos veces con su melena negra… Frida se colaba para observar al pintor, gastándole bromas infantiles como robarle comida de la cesta o enjabonar las escaleras para que resbalase.  

 

Frida hablaba con otras alumnas y declaró asombrándolas a todas: “Mi ambición es tener un hijo de Diego Rivera, y se lo voy a decir un día”. “Ya verás, panzón, ahora no me haces caso, pero algún día tendré tu hijo”, aseveró… La madre de Frida, era Matilde Calderón resentida porque sus padres no le habían dejado casarse con su primer amor y éste se había suicidado se casaría por despecho con Guillermo Kahlo, un judío alemán emigrado, viudo con dos hijas, a quien nunca llegó a amarle de verdad. Cuando se casó con Matilde las niñas fueron enviadas a un convento y una acabó metiéndose a monja.


La fiesta se llevó a cabo en una casa en Coyoacán. La mamá de la novia estaba desconsolada ella tan católica y el novio tan ateo y tan comunista, había hecho lo posible para evitar la boda… ¡El demonio había entrado a su casa! El papá de la novia consolaba a su esposa haciéndole ver que no era tan malo. Juntos se retiraron temprano de la fiesta. Para sorpresa de todos, el platillo fuerte del banquete: el mole negro de Oaxaca fue preparado por Lupe Marín quien era la ex esposa de Diego, la misma que había protagonizado varios escándalos debido a sus celos.

 

Su padre ya había hablado directamente con Diego Rivera para hacerle una advertencia: “No olvide que mi hija es una persona enferma y lo será toda su vida. Es inteligente pero no es bonita. Piénselo, y si a pesar de todo desea casarse con ella, le doy mi consentimiento”. La misma Frida Kahlo cuenta que se vistió para su boda gracias a su sirvienta, quien le prestó una blusa, rebozo y una falda con la que se tapó bien su pierna, que no estaba del todo sana por la polio que la afectó y el aparatoso accidente sufrido unos años antes de casarse.

 

Además del mole negro de Oaxaca hubo otra serie de platillos mexicanos, chiles rellenos, pozole, arroz, capirotada y pastel de bodas, para beber: pulque y tequila, o en su defecto agua de frutas. Ya entrada la noche, Lupe Marín se acercó a la novia, le levantó la falda y señaló sus piernas mientras gritaba llamando a los invitados: ¿Ven estos palos? ¡Esto es lo que tiene Diego ahora en lugar de mis piernas! La pobre novia corrió a esconderse de las risitas burlonas y las exclamaciones incómodas de los invitados que habían visto su pierna derecha adelgazada por la poliomielitis.

 

La ex esposa de Diego, Lupe Morín -con quien años después Frida consolidó una buena amistad- fue quien preparó el delicioso mole negro de la boda, y diría que se desquitó con su nueva esposa, molesta porque Diego no le pagaba la manutención de las hijas que había tenido con ella. Así, con mole negro, fue la celebración matrimonial de Magdalena Carmen Frida Kahlo y de Calderón y Diego María de la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de la Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez, hace ya 96 años.

 

En Maracaibo, resumido para lapesteloca el lunes 7 de abril del año 2025

 

 

domingo, 6 de abril de 2025

Avispa parásita en ambar

 

 Se trata de una avispa que atrapaba a sus huéspedes con el abdomen… Ella estuvo preservada en ámbar casi 100 millones de años. Se cree que este raro ejemplar extinto puede representar una nueva familia de insectos…

Un equipo internacional de investigadores ha identificado un linaje extinto de avispas conservadas en ámbar desde hace más de 98 millones de años que utilizaban su abdomen, de manera muy similar al de una planta carnívora Venus atrapamoscas, para capturar e inmovilizar a sus presas.

Los especímenes de Sirenobethylus charybdis -llamados así por el monstruo marino de la mitología griega que tragaba y vomitaba agua tres veces al día- datan de hace casi 99 millones de años y podrían representar una nueva familia de insectos. Explican en 'BMC Biology', que estas avispas eran parasitoides…

Los insectos parasitoides pueden ser muy específicos y desarrollarse sobre sólo una especie como hospedante, o tener la aptitud de parasitar diferentes especies; se denominan "endoparásitos" cuando se alimentan de la víctima desde su interior y "ectoparásitos" cuando lo hacen desde el exterior. Sobre un mismo huésped se pueden desarrollar uno o varios parasitoides, dependiendo del comportamiento biológico de cada especie concreta. En la mayoría de los casos la hembra del adulto, que es casi siempre alada, deposita sus huevos en el interior o alrededores del huésped y de éstos, al eclosionar, surgen las larvas que se van alimentando a expensas del huésped, devorando en primer lugar las partes no vitales para, posteriormente, cuando el parásito va a cumplir su ciclo biológico, causarle la muerte.

La mayoría de los parasitoides pertenecen al orden de los Himenópteros; también se encuentran algunos entre los Dípteros. En el orden de los Himenópteros destacaremos a las familias de los Ichneumónidos, Bracónicos y Calcídidos. En nuestro entorno podemos encontrar Aphelinus mali, que es un parásito específico del pulgón lanígero y Polinema maydli, que parasita los huevos del torito. Dentro del orden de los dípteros está el grupo de los Tachínidos, que son parásitos devoradores de larvas. Su aspecto es similar a la mosca común, con unas dimensiones de entre 1 y 3 cm y color variable.

Estas avispas parasitoides, es decir, los especímenes de Sirenobethylus charybdis, insectos cuyas larvas viven como parásitos y finalmente matan a sus huéspedes y que fueron halladas como reliquias de seres que vivieron hace casi 99 millones de años existen como los actuales parasitoides de la superfamilia Chrysidoidea que incluyen las avispas cuco y los betílidos. Sin embargo, los especímenes de S. charybdis poseen un patrón único de venas en el ala posterior que sugiere que la especie pertenece a su propia familia, los Sirenobethylidae.

Los investigadores de la Universidad Normal Capital de China y del Museo de Historia Natural de Dinamarca utilizaron la tomografía computarizada (MCT) para analizar 16 especímenes hembra de S. charybdis conservados en ámbar recolectados en la región Kachin, al norte de Myanmar, y hallaron que la especie probablemente era un koinobionte, un parasitoide que permite a su huésped continuar creciendo mientras se alimenta de él.

Los especímenes de avispa presentan un aparato abdominal compuesto por tres aletas, la inferior de las cuales forma una estructura en forma de paleta con una docena de cerdas similares a pelos, que recuerda visualmente a una planta atrapamoscas. Los autores creen que el complejo aparato de prensión le permitió a S. charybdis capturar presas muy móviles, como pequeños insectos alados o saltadores. Los especímenes preservados sugieren que Chrysidoidea mostró una gama más amplia de estrategias parasitoides en el Cretácico medio que sus contrapartes actuales.

Los autores señalan que el aparato abdominal de S. charybdis es diferente al de cualquier insecto conocido y podría haber servido como mecanismo para contener temporalmente al huésped durante la puesta de huevos. Dado que la avispa probablemente no podía perseguir a sus presas a largas distancias, especulan con que habría esperado con el aparato abierto a que un posible huésped activara su respuesta de captura.

Maracaibo domingo 6 de abril del año 2025

sábado, 5 de abril de 2025

Nicolás Achúcarro y Lund

 

Nicolás Achúcarro nació en junio de 1880 en el Casco Viejo de Bilbao, en el seno de una familia burguesa y culta de la época. A los 10 años ingresó en el Instituto de Bilbao, donde Miguel de Unamuno enseñaba latín. A los 15 años (1895), terminó lo que suponía el equivalente al bachillerato con excelentes notas, tanto en las asignaturas de ciencias, como en letras.

En octubre de 1895 dejaría Bilbao para instalarse por un tiempo en Alemania, y poder así prepararse en el Gymnasium de Wiesbaden, durante 16 meses para su acceso a la Facultad de Medicina de la Universidad de Madrid (la actual Universidad Complutense). Dejando Alemania en marzo de 1897 y tras examinarse de la prueba selectiva de aquel año en la Universidad de Zaragoza, inicia en el curso 1897-1898 (con 17 años) la carrera de Medicina en Madrid.

En su primer año universitario le es concedido el Premio «Martínez Molina» por sus conocimientos en anatomía, y el curso siguiente le es otorgado el Premio Fourquet, en una votación realizada entre sus compañeros. Durante ese segundo curso, asiste a las clases prácticas de fisiología del Prof. Gómez Ocaña y se aproxima a la figura de Santiago Ramón y Cajal y a su histología y anatomía patológica.

En 1899 se traslada a Marburgo, Alemania, con su hermano Juan Luis, para asistir a varios cursos de patología, química y fisiología. Al año siguiente se ve forzado a volver a Bilbao porque su hermano contrae tuberculosis. De vuelta en Madrid, prepara los tres últimos años para su graduación en Medicina. Comienza su experiencia investigadora en el laboratorio del Profesor Luis Simarro dónde trabaja en histopatología, lo que le lleva a montar un pequeño laboratorio en su propia casa familiar de Neguri.

Concluirá sus estudios de Medicina con 24 años, y guiado por su interés y afán de conocimiento, visita los principales laboratorios de su época. Entre 1904 y 1905 viaja a París para visitar la clínica de Pierre Marie en la Salpêtrière, y asiste a cursos de Babinski. Posteriormente se traslada a Alemania para trabajar con Lewandowsky y el italiano Catola, donde recibe una fuerte influencia para el desarrollo posterior de su carrera. Durante este tiempo empieza a preparar su colección de anatomía-patología de las enfermedades mentales.

En el verano de 1905, tras retornar a Bilbao, viaja a Florencia , en este caso a la Clínica de San Salvi, donde los neuropsiquiatras florentinos Tanzi y Lugaro le introducen en el estudio de las enfermedades mentales. Después viaja de nuevo a Alemania, a Munich, donde dedica tres años a colaborar en la clínica del Profesor Kraepelin, y en el laboratorio de neuropatología del Profesor Alzheimer, donde desarrolla su tesis doctoral «Contribución al estudio de la anatomía patológica de la rabia» que defiende en Madrid en diciembre de 1906, con la calificación de sobresaliente. Con el Dr. Alois Alzheimer y su grupo de colaboradores 1909-1910. Achúcarro es el segundo empezando por la derecha en la fila de arriba. A su lado derecho está el Dr. Alzheimer. 

En 1908, y con 28 años, Alzheimer le recomienda para que dirija Laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Psiquiátrico Federal en Washington (EEUU). Para preparar este viaje, se traslada a París, donde visita varios hospitales psiquiátricos y escribe un artículo sobre las Stäbchenzellen (células en bastoncito), células neuróglicas y células granuloadiposas en el asta de Ammón del conejo. Después continua su viaje en Londres y Liverpool, donde conoce al padre de la fisiología moderna, Sir Charles Scott Sherrington, y a continuación, embarca a América.

Durante su estancia en EEUU, entre 1908 y 1910, desarrolla una intensísima actividad científica y publica sus resultados en inglés y alemán en revistas especializadas de la época. En 1910 vuelve a Madrid, donde ha obtenido el puesto de médico del Hospital Provincial, y donde puede centrarse en la labor investigadora. En este tiempo colabora con el Boletín de la Sociedad Española de Biología y en el laboratorio de investigación biológica, en temas relacionados con la histología y fisiología de la glía, además de participar en la creación de la Residencia de Estudiantes promovida por Francisco Giner de los Rios.

En 1911 concluye su investigación sobre un nuevo método de tinción “Técnica de Achucarro” con tanino y oxido amoniacal. En 1912 es invitado por Carl Gustav Jung a dar una serie de cursos sobre enfermedades mentales en la Universidad de Fordham (Nueva York) y es nombrado Doctor Honoris Causa por esa Universidad el 11 de septiembre de ese año. A su regreso, y con la ayuda de Ramón y Cajal y de la Junta de Ampliación de Estudios, es designado responsable del laboratorio dónde trabaja y colabora con otras relevantes personalidades (Rodríguez LaforaDel Rio Hortega, Sacristan,  GayarreFortún y otros) de aquel tiempo.

Los primeros síntomas de su fatal enfermedad aparecen en 1915. El año siguiente se ve obligado a abandonar sus trabajos en el laboratorio y a retirarse a El Pardo (Madrid). En Julio de 1917, con la enfermedad golpeándole ya ferozmente, vuelve a Neguri a la casa familiar. Aunque al principio se pensó que se trataba de tuberculosis, con el tiempo los síntomas fueron diferentes. Se fue quedando parapléjico progresivamente, sufría intensos picores y úlceras por decúbito. Él mismo se diagnostica la enfermedad de Hodgkin, tras leer un texto sobre patología médica, y reconociéndose los síntomas descritos. Finalmente, muere el 23 de abril de 1918, a la edad de 37 años.

Nicolás Achúcarro y Lund fue uno de los primeros investigadores en visualizar las células cerebrales con capacidad fagocítica que hoy conocemos como la microglía. Posteriormente, su discípulo Pío del Río-Hortega desarrolló modificaciones de los métodos de Achúcarro y pudo observar específicamente las sutiles complejidades morfológicas de la microglía. Estos hallazgos contradecían la propia visión de Cajal sobre las células que, según él, pertenecían a la misma clase que la oligodendroglía (el llamado "tercer elemento" del sistema nervioso), lo que dio lugar a una larga discusión. No fue hasta 1924 que las observaciones de Río-Hortega se generalizaron a nivel mundial, reconociendo así la microglía como un tipo celular único.

Maracaibo, sábado 5 de abril del año 2025

viernes, 4 de abril de 2025

Mutaciones genéticas

 

Un mes después del inicio de la quimioterapia, algunos de los pacientes con leucemia mieloide aguda (LMA) tenían células de médula ósea que continuaban mostrando mutaciones genéticas asociadas a la LMA por lo que tuvieron un riesgo sustancialmente mayor de recaída y una supervivencia reducida.

Un nuevo estudio sobre esta enfermedad, publicado el 25 de agosto 2025 en la revista Journal of the American Medical Association ( JAMA ), demostró que el conjunto de mutaciones en las células de la LMA en el momento del diagnóstico, no predecía la persistencia de las mutaciones después de la quimioterapia, y estas se asociaron con un mayor riesgo de recaída y una menor supervivencia.

El tratamiento de la leucemia mieloide aguda ha mejorado en los últimos años, pero el 20 % de los pacientes no logra una remisión tras la quimioterapia inicial o de inducción , y casi la mitad de quienes sí la logran experimentan una recaída y no se ha encontrado todavía una forma eficaz de identificar cuáles serán los pacientes que tendrán mayor probabilidad de recaer.

Existen nuevos hallazgos, que hacen necesario definir “un método genómico" para identificar a los pacientes con mayor riesgo de que su enfermedad regrese después de una quimioterapia que parece haber inducido una remisión a largo plazo. Aunque el trasplante de médula ósea puede curar a muchos pacientes con LMA, siempre se conlleva el riesgo de complicaciones por lo que es importante que los médicos identifiquen cuáles serán los pacientes con mayor probabilidad de beneficiarse de un trasplante según su riesgo de recurrencia.

Existen factores clínicos que pueden identificar a estos pacientes, aunque la mayoría se clasifican como de riesgo intermedio evaluando las características genéticas de sus células cancerosas, pero los investigadores han tenido dificultades para descubrir otras medidas que puedan identificar con precisión a este grupo de riesgo intermedio y con riesgo de recaída. El Dr. Timothy Ley, de la Universidad de Washington en San Luis, y su equipo de investigación han utilizado métodos de secuenciación genómica para identificar posibles mutaciones asociadas con la LMA para orientar el pronóstico y sorprendentemente, han descubierto que son pocas las mutaciones detectadas que se asociaban con el riesgo de recurrencia. "Fue bastante decepcionante" dijo el Dr. Ley.

Los tumores se componen de grupos de células, y cada uno porta un conjunto diferente de mutaciones. Estos subclones, de células, “son importantes porque pueden contribuir a la recaída”“Cada subclón responde de forma diferente a la quimioterapia pero desconocemos las reglas genéticas que definen esas respuestas”.  Los investigadores "siguieron la pista de los citogenetistas" que habían descubierto que si las células de la médula ósea con cambios citogenéticos clonales asociados al cáncer persistían después de la quimioterapia inicial, los pacientes tenían mayor probabilidad de recaer, pero el Dr. Ley y su equipo se preguntaron si acaso la persistencia de mutaciones genómicas después de la quimioterapia proporcionaría una forma más precisa de clasificar a los pacientes según su riesgo de recaída.

Un gen es la unidad de material genético que aporta la información necesaria para la síntesis de una proteína. Un gen está formado por una larga cadena de nucleótidos, en la que se distinguen exones e intrones. El estudio del exoma es una de las formas más completas de analizar el ADN.  Los exones son las regiones codificantes que van a proporcionar la información para la síntesis de una proteína, mientras que los intrones son regiones no codificantes, que se hallan intercaladas en el gen y tienen otras funciones. El exoma humano consiste en, aproximadamente, 180.000 exones que constituyen cerca del 1% del total del genoma (unas 30 megabases de DNA). 

El análisis de los exomas ha sido clave para identificar variantes de novo, es decir, mutaciones genéticas que no se heredan de los padres, sino que ocurren espontáneamente en el individuo afectado. Estas variantes son responsables de muchas enfermedades genéticas graves, especialmente en niños. Por ejemplo, en el autismo y otros trastornos del neurodesarrollo, se ha demostrado que una parte considerable de los casos está relacionada con variantes de novo identificadas mediante el análisis de exomas. Esto ha sido crucial para comprender mejor la genética de estos trastornos y para desarrollar enfoques terapéuticos personalizados.

En el estudio de JAMA, el equipo del Dr. Ley realizó la secuenciación del exoma de muestras de médula ósea obtenidas de 50 pacientes adultos con LMA que habían alcanzado una remisión morfológica completa (normalización de los recuentos de células sanguíneas y la ausencia de células de aspecto anormal) tras la quimioterapia de inducción. Querían determinar si las mutaciones asociadas a la leucemia, identificadas mediante secuenciación antes de la quimioterapia, persistían después del tratamiento.

Analizaron muestras obtenidas tanto al momento del diagnóstico inicial como aproximadamente 30 días después de la quimioterapia de inducción, momento en que la médula ósea se recupera del tratamiento. Treinta y dos de los 50 pacientes fueron clasificados como de riesgo intermedio según las medidas citogenéticas tradicionales. Los pacientes que aún presentaban una sola mutación asociada a la leucemia 30 días después de la quimioterapia de inducción tuvieron una mediana de supervivencia libre de eventos de 6,0 meses y una mediana de supervivencia global de 10,5 meses. Por el contrario, entre los pacientes cuyo tratamiento eliminó todas las células detectables que albergaban estas mutaciones de la médula ósea, la mediana de supervivencia libre de eventos fue de 17,9 meses y la mediana de supervivencia global fue de 42,2 meses. Se observaron resultados similares en los 32 pacientes clasificados como de riesgo intermedio.

Los hallazgos "proporcionan información crucial sobre el papel de la monitorización molecular en la LMA y la dinámica de las mutaciones genéticas durante el tratamiento de la LMA", escribieron la Dra. Friederike Pastore y el Dr. Ross Levine, del Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering de Nueva York, en un editorial acompañante . Se necesitan estudios adicionales, continuaron, para validar los hallazgos, evaluar cómo se compara un enfoque genómico para la monitorización de pacientes con LMA con los enfoques de citometría de flujo y determinar si estos enfoques podrían utilizarse en combinación.

El trabajo es prometedor, pero el Dr. Ley advirtió que "aún es pronto para utilizar datos genómicos para tratar a personas con cáncer". La forma más sencilla de pensar en el uso de datos de secuencias para informar el tratamiento es identificar una mutación y luego usar un medicamento que se dirija a esa mutación, pero la heterogeneidad de los tumores hace que el tratamiento del cáncer sea un problema mucho más complejo, explicó.

¿Cómo utilizar los datos genómicos para orientar el tratamiento de los pacientes en la clínica? E problema aún no está resuelto", afirmó el Dr. Ley. "Se necesita mucho más trabajo para definir enfoques más informativos y mejores maneras de aplicar este conocimiento a la atención de los pacientes. A pesar de todas estas advertencias, debo decir que estamos logrando un progreso constante y alentador".

Maracaibo, viernes 4 de abril del año 2025

jueves, 3 de abril de 2025

Capadocia histórica

 

Çatalhöyük es una ciudad que data del período neolítico. En ella se encontró lo que se considera el comienzo de la historia de Anatolia. Se trata de un fresco mural del año 6200 a. C. que presenta en primer plano las casas de la localidad y al fondo un volcán humeante en erupción; se cree que el volcán es el Hasandağ.

El fresco está expuesto en el Museo de las Civilizaciones de Anatolia en Ankara y es probablemente la pintura paisajística más antigua del mundo. Entre 5000 a. C. y 4000 a. C., Capadocia tenía varios principados independientes y la ciudad más importante durante ese período era Puruskhanda. Diecisiete de estos principados se unieron en 2300 a. C. para luchar contra el rey acadio Naram Sin, y esa constituiría la primera de muchas alianzas en la historia de Anatolia.

Al inicio del II milenio a. C., Anatolia vivió una etapa brillante en la cual atrajo numerosos habitantes. Los asirios, célebres por su habilidad en el comercio, se instalaron en la región atraídos por esta riqueza y organizaron bazares llamados kârum. El kârum más importante fue el de la ciudadela de Kaneš (hoy Kültepe). Los asirios llevaban estaño, textiles y perfumes, y compraban  oroplata y cobre en Anatolia. Este tipo de comercio duró ciento cincuenta años, hasta que desapareció con las guerras entre reinos de la región.

En Kültepe las Tablas de Capadocia, que describen esta colonia mercantil en tiempos asirios y que marcan el registro escrito más antiguo conocido sobre la historia de Capadocia. Vendria luego el Período hitita. No está claro el origen de la civilización hitita, lo cierto es que esta civilización floreció en Anatolia central en el   II milenio a. C.  Hattusa (hoy Boğazköy) era su centro de poder en la región, que llamaban Tabal. Los hititas fundaron varios poblados en conjunción con los habitantes de la región y formaron un imperio que se extendía hasta Babilonia. El imperio duró entre seis y siete siglos y puso fin al dominio de la dinastía semita de Hamurabi.

Especial lugar en la historia hitita tienen los siglos XVI y XV a. C., que marcan el período de mayor desarrollo de la civilización. A finales del milenio, las guerras con Egipto (tratado de paz de Kadesh de 1286 a. C.) desgastaron al imperio, que finalmente cayó ante los invasores de la Europa oriental. Después de la caída del imperio hitita, Capadocia atravesó el período más oscuro de su existencia, entre los siglos X y VII a. C.

Período persa ; Capadocia cayó en manos persas en el siglo VI a. C., estado que mantendría hasta la conquista por Alejandro Magno dos siglos después. Los persas dividieron Anatolia en provincias y asignaron un gobernador (sátrapa) a cada una. Las provincias estaban ligadas al puerto de Éfeso (cerca de la ciudad turca de Kuşadası) por la Vía Real, que comenzaba en dicha ciudad y pasaba por las ciudades de Sardes y Mazaca (hoy Kayseri) y llegaba a Mesopotamia y a Susa, capital de Persia. Los sátrapas enviaban a Persia los impuestos que recaudaban en forma de oro, carneros, burros y los famosos caballos de Capadocia.

Período helenístico: En el siglo IV a. C., el conquistador macedonio Alejandro Magno emprendió la conquista de Asia Menor, después del famoso episodio del nudo gordiano y arrebató Capadocia a los persas. Dejó a su lugarteniente Cabictas para controlar la región, la cual estuvo bajo el dominio macedonio hasta la muerte de Alejandro en 323 a. C. Un año después, Capadocia recuperó su independencia y soberanía bajo el liderazgo de Ariarates I.

Período romano: Capadocia comenzó su larga historia de relaciones con Roma bajo el reinado de Ariarates IV, primero como enemigos y después como aliados contra Perseo de Macedonia. A partir de entonces, Capadocia se alió siempre con la República. En 130 a. C., Ariarates V marchó junto al procónsul romano Craso contra Aristónico, quien reclamaba el trono de Pérgamo. Fue liquidado junto con su ejército, lo cual trajo consigo luchas intestinas que marcaron el fin de la dinastía. 

Capadocia entonces eligió a un señor local llamado Ariobarzanes, con el apoyo de Roma, en 93 a. C. Sin embargo, Ariobarzanes no pudo comenzar su reinado hasta treinta años después, cuando Roma le allanó el camino al destronar a los reyes pónticos y armenios. En la guerra civil que Roma sostuvo antes de la ascensión al poder de Julio César, Capadocia cambió de bandos entre Pompeyo y César. Cuando terminó la dinastía de Ariobarzanes, ocupó el trono un noble de Capadocia, Arquelao Ktistes, y la región mantuvo su independencia tributaria hasta el año 17, cuando el emperador Tiberio redujo la región a provincia romana.  Dos legiones romanas formaron guarniciones permanentes bajo el emperador Vespasiano, quien buscaba proteger su provincia de Levante. Las guarniciones aumentaron; posteriormente se levantaron fortalezas bajo Trajano, quien además construyó vías militares en la región. En el siglo III, las relaciones comerciales entre Capadocia y las regiones de Esmirna y Éfeso estaban tan desarrolladas que se emitieron monedas con los nombres de estas ciudades.

A partir del siglo IV, Capadocia comenzó una transformación más, esta vez influenciada por los monasterios de Palestina y Egipto, cuyos modelos fueron seguidos en la introducción de la religión cristiana, bajo el patrocinio del Imperio Romano de Oriente. En los siglos VI y VII, aparecieron las primeras iglesias pintadas. Estas iglesias, eran excavadas en la roca que eran después decoradas y acondicionadas. Existen más de seiscientas iglesias de estas características en la región. El período iconoclasta del Imperio (años 725 a 843) tuvo su repercusión en las iglesias de Capadocia, y numerosas pinturas murales sufrieron daños, pues se prohibió la representación de todas las figuras sagradas.

Periodo selycida: :Los selyúcidas, antepasados directos de los turcos occidentales, llegaron a Capadocia a partir del siglo XI, después de la Batalla de Manzikert en 1071 donde derrotaron al ejército del Imperio romano de oriente. En 1082, los selyúcidas iniciaron una gran expansión urbanística construyendo mezquitas en Kayseri, Aksaray, Niğde y otras ciudades, y una academia de medicina en 1206. Además, construyeron numerosos «palacios de caravanas», especie de refugios para que las caravanas que transitaban la Ruta de la seda, Destaca el Caravansaray de Agzikarahan, construido en el siglo XIII.

En los siglos que siguieron, Anatolia fue escenario de conflictos entre los selyúcidas, Bizancio y los cruzados. Los selyúcidas sentaron las raíces del Imperio otomano, que vendría a existir a partir del siglo XV ( los turcos otomanos procedían de uno de los sultanatos) escindidos del estado selyúcida bajo el mando de un líder llamado Osmán I Gazi que daría el nombre de la dinastía otomana u osmanlí.. Tras la batalla de Manzikert en 1071, varios clanes turcos bajo el liderazgo de los selyúcidas comenzaron a establecerse en Anatolia . Con el ascenso del poder turco en Anatolia, Capadocia se convirtió lentamente en un tributario de los estados turcos que se establecieron al este y al oeste; parte de la población nativa se convirtió al islam y el resto formó la población griega capadocia restante . A finales del siglo XII, los selyúcidas de Anatolia habían establecido su dominio exclusivo sobre la región. Con el declive y la caída de los selyúcidas con base en Konya en la segunda mitad del siglo XIII, fueron reemplazados gradualmente por sucesivos estados gobernados por los turcos: 

Siglos XX y XXI: Capadocia siempre ha sido una zona de atractivo turístico importante, con afluencia de visitantes de la región y de países vecinos. La región llamó la atención de Europa y del resto del mundo en las décadas de 1930 y 1940, con la difusión de la obra del sacerdote francés Guillaume de Jerphanion, quien publicó los estudios que había hecho de las iglesias en Capadocia. Estos hechos llevaron a un drástico crecimiento en la demanda turística en la segunda mitad del siglo XX. Durante las décadas de 1970 y 1980, Capadocia afrontó una explosión de turistas que no podía ser satisfecha con la veintena de hoteles existente en la región. Según las cifras oficiales, en 2005 visitaron la región 850 mil turistas extranjeros y un millón de turistas nacionales.

Maracaibo, jueves 3 de abril del año 2025

miércoles, 2 de abril de 2025

Visitar Capadocia…


Capadocia es una región histórica de la Anatolia Central, en Turquía, que se caracteriza por tener una formación geológica única en el mundo y por su patrimonio histórico y cultural. Abarca partes de las provincias de Kayseri, Akasaray,  Niğde y Nevşehir. En 1985 fue incluida por la Unesco en la lista del Patrimonio de la Humanidad.

Desde hace miles de años ha habido asentamientos humanos en la región. Algunas civilizaciones antiguas florecieron aquí, como la hitita, o de otras regiones de Asia Menor; todas ellas han dejado su huella cultural en Capadocia, y para mañana podemos tratar de resumir su historia, pero las características geológicas del lugar son tan curiosas que han dado pie a que sus paisajes se describan a menudo como “paisajes lunares”. 

Su orografía, compuesta de la llamada toba calcárea, ha adquirido formas caprichosas tras millones de años de erosión y es lo suficientemente friable como para permitir que el ser humano construya sus moradas escarbando en la roca en vez de erigir viviendas trogloditas. De esta forma, los paisajes lunares están llenos de cavernas, naturales y artificiales, muchas de las cuales continúan habitadas.

La situación geográfica de Capadocia la hizo encrucijada de rutas comerciales durante siglos; también objeto de continuas invasiones, lo que llevaría a los habitantes de la región a construir refugios subterráneos donde ciudades enteras podían refugiarse en el subsuelo y subsistir durante muchos meses sin arriesgarse al exterior.

Estas ciudades subterráneas estaban construidas en varios niveles (la ciudad de Kaymaklı tiene nueve niveles subterráneos, aunque solamente cuatro están abiertos al turismo: el resto están reservados para la investigación arqueológica y antropológica) y equipadas con respiraderos, caballerizas, panaderías, pozos de agua y lo necesario para albergar poblaciones que podían llegar hasta 20 000 habitantes. Cuando estas ciudades subterráneas fueron usadas durante el cristianismo bizantino, algunas cámaras fueron adaptadas como templos y decoradas con iconografías en las paredes.

La región de Capadocia puede considerarse un círculo de 50 km de diámetro donde se encuentran, entre otras, las ciudades de Indolash y Sabiar, y numerosas poblaciones. La población en el área no llega al millón de habitantes, pero los asentamientos están tan cercanos unos de otros que dan la impresión de tratarse de una sola ciudad extendida por una región muy vasta. En muchos mapas, el nombre de Capadocia no se menciona, ya que no se trata de una demarcación política como tal. Más bien se trata de una región histórica que abarca porciones de varias provincias.

El paisaje único de Capadocia es el resultado de la acción de fuerzas naturales durante milenios. Hace 60 millones de años se formó la cadena montañosa del Tauro, en Anatolia meridional, al mismo tiempo que se formaba la cadena alpina en Europa. La formación de la cordillera del Tauro creó numerosas barrancas y depresiones en Anatolia central. Hace diez millones de años, estas depresiones fueron rellenadas por el magma y otros elementos volcánicos provistos por los numerosos volcanes en erupción de Anatolia central, especialmente los volcanes Erciyes, Keciboyduran, Develi, Göllü dağı y Melendiz.

Paulatinamente, las depresiones fueron desapareciendo, transformando la región en un altiplano. Sin embargo, el mineral que las rellenó no es muy resistente a la acción de vientos, lluvias, ríos y diferencias de temperatura, por lo que la erosión fue esculpiendo los numerosos valles por los cuales Capadocia es famosa.                                                                                                                                                 Algunas de las poblaciones más importantes son Ürgüp, Gülağaç,AksarayNevşehir y  Kayseri.  Algunos lugares sobresalientes son el Museo al aire abierto de Göreme, la ciudad subterránea de Kaymaklı, la ciudad subterránea de Derinkuyu, el valle de Zelve, Peribacalar vadisi (valle de las Chimeneas de las Hadas), Soğanlı vadisi, las ciudades subterráneas de Özkonak, Tatlarin, Mazı y Acıgöl, e iglesias como las de El Nazar y Aynalı.

Capadocia siempre ha sido una zona de atractivo turístico importante, con afluencia de visitantes de la región y de países vecinos. La región llamó la atención de Europa y del resto del mundo en las décadas de 1930 y 1940, con la difusión de la obra del sacerdote francés Guillaume de Jerphanion, quien publicó los estudios que había hecho de las iglesias en Capadocia. Estos hechos llevaron a un drástico crecimiento en la demanda turística en la segunda mitad del siglo XX.

Capadocia tiene un papel especial en la tradición cristiana. Durante los primeros años de la religión cristiana, Capadocia fue una región fértil para su expansión, en especial de Antioquía, la primera comunidad cristiana, fundada por San Pedro. Muchos de los primeros cristianos habitaban Capadocia durante los siglos II y III, y para el siglo IV, varios santos habían nacido en Capadocia: San MamésSan Basilio el Grande y su hermano San Gregorio de Nisa (nacidos en Cesarea de Capadocia), San Gregorio de Nacianzo, el Viejo y San Gregorio de Nacianzo, el Joven. También Pablo de Tarso efectuó tres viajes a través de Capadocia, entre los años 44 y 58. También se dice que San Jorge fue nativo de Capadocia, hijo de un soldado del ejército romano del siglo III. En la Edad Media, la leyenda de San Jorge y el dragón tomó forma, y el santo se convirtió en patrono de múltiples estados y coronas en Europa, como la Corona de Aragón, y los reinos de Portugal e Inglaterra. La cruz de San Jorge se encuentra todavía en las banderas de Georgia e Inglaterra, y también en el escudo de Barcelona y de Aragón.

Durante las décadas de 1970 y 1980, Capadocia afrontó una explosión de turistas que no podía ser satisfecha con la veintena de hoteles existente en la región. Los pobladores comenzaron a rentar cuartos y transformar sus propiedades para poder acoger a los visitantes, mientras nuevas instalaciones eran construidas, respetando a los paisajes y la naturaleza, y sin contradecir al folclore local. Según cifras oficiales, ya en 2005 visitaron la región 850 mil turistas extranjeros y un millón de turistas nacionales. Esta demanda ha revitalizado la actividad económica en la región, pues no solo la industria del turismo y la gastronomía se benefician, sino que además los productores locales de cerámica, textiles y artesanías encuentran un mercado amplio y receptivo.

Turquía, en realidad se ha vuelto en la actualidad muy popular entre los viajeros que buscan esa mezcla de cultura milenaria, tradición, ruinas, modernidad, hermosas playas, y los increíbles paisajes de Capadocia que pueden visitarse en globo aerostático y, por supuesto, siempre estará Estambul con sus bellas mezquitas, las especias y el Gran Bazar

 

Maracaibo, miércoles 2 de abril del año 2025