lunes, 10 de julio de 2017

Gladys Vera y Astolfo Romero gaiteros de corazón




Gladys Vera y Astolfo Romero gaiteros de corazón

Gladys Mercedes Vera Mora de Calzadilla (1949-2015) la eterna reina de la gaita zuliana (1979), fue galardonada con todos los premios, durante más de cincuenta años en el ambiente gaitero donde era una de las mejores solistas. En 1971 empezó su camino de solista con la gaita. En 1985 actuó con Maragaita, durante cuatro años, siendo la primera mujer en cantar con Cardenales del Éxito desde 1992. En 1974 ganó el premio Gaita del Año en el Festival Virgilio Carruyo con el tema Mi orgullo, de Astolfo Romero. Le siguieron gaitas de gran calidad, como Estampas, también de Astolfo Romero y en 1976, Amor marginal, la danza de Víctor Hugo Márquez, que por su contenido social fue varias veces censurada en Venevisión. En 1978 obtuvo el primer lugar en el Festival de Cantantes y Compositores. Participó en el Festival Una Gaita para el Zulia con el tema Mi vieja plaza Baralt de Jesús Bravo González (1985). Fue exaltada a patrimonio musical del estado Zulia por el Decreto No. 13-A de la Gobernación del estado Zulia de fecha 23 de agosto de 1993. Junto a Neguito Borjas grabó un tema romántico titulado Cuando el amor se va. Otro tema de amor exitoso fue Mi entrega, compuesto por Ricardo Portillo, en 1991 con Maragaita. El maestro Juan Belmonte le escribió una suite gaitera titulada Gladys Vera, Perpetuum, que se estrenó con la Orquesta Sinfónica del Zulia en el teatro Bellas Artes de Maracaibo, el día 4 de noviembre de 1994, con su propia interpretación. En 1999 se integró a Los Colosales de Ricardo Cepeda hasta 2001. 
 Sus temas de mayor éxito fueron: Mi orgullo, Galante y coqueta, Por eso gaitas, La antorcha, Mis gratos recuerdos, Amor marginal, Déjame arrullarte, Mi gentilicio, Fuente divina, Siempre estaré contigo, Anhelo, Mi entrega, Y con emoción, Salve Reina, Cuando el amor se va (junto con Neguito Borjas) La arenita del río, Estampas, Nuevo Saladillo, La morenita, La protestona, Gaitera de antes, Lucero de la amistad, Dile a Rafael Rincón, Mi vieja Plaza Baralt, La promesa, Peldaños, Así es mi gaita, Juanita prende el fogón, La cabecera, Alguien en tu templo, Cuando habla mamá.

Fue invitada para grabar coros o compartir escenarios con los conjuntos Birimbao, Gran Coquivacoa, Los Compadres del Éxito, Racoa, Los Turpiales de Tamare, Proyecto Gaita, Trabuco Gaitero, Zagales del Padre Vílchez, Los Gaiteritos, Los Chiquinquireños y otros. En 1999 se integró a Los Colosales de Ricardo Cepeda hasta 2001. Desde finales del año 1979 Gladys había sido diagnosticada de lupus. “Que mi Dios y la Virgen te cubran con su manto mi amor”, era siempre su frase de despedida con sus familiares y amigos. Gladys, quien siempre será recordada por los zulianos, falleció el lunes 14 de septiembre del año 2015.

Astolfo José Romero Chacín nació el 8 de febrero de 1950 en La calle Jugo, de la parroquia Santa Lucía. A los 9 años aprendió a tocar cuatro. Dedicaba  sus gaitas a su madre, a la recordada Cira Elena. Le cantó a su abuela mamá Carmen, a los tíos, y a sus hijos. “Se dio a querer entre la gente y no es porque sea hijo mío, pero sé que no lo han olvidado y no lo van a olvidar fácilmente”, decía su progenitora, quien falleció en julio de 2011. Gaitas y parrandas compuso con facilidad este querido cultor del lenguaje sencillo, cargado de humor, muy a su forma de ser que le valió el calificativo de “El Parroquiano”. Su fe en la Chiquinquirá, sembrada en el seno familiar,  se acrecentó al fundar, junto a Reinaldo Cubillán, el conjunto Los Chiquinquireños.  Bendíceme/, Sagrada Virgen María, Chinita mía, Chiquinquirá, protégeme por los caminos que ando/ y donde yo esté cantando /voy renovando mi fe / acompáñame /en mi corazón tu mora  /y tu eterna ave cantora / humildemente seré.  (Gaita: Ave cantora). “Astolfo fue siempre un hombre mariano,  me lo encontraba en la Basílica cuando visitaba a la Chinita. Lo hacíamos por voluntad propia, por un llamado de fe”, comentó, en una oportunidad, “El Colosal” Ricardo Cepeda. Desde niño voy al templo /a rezarte una oración /y a llenarme de emoción / cada vez que te contemplo /soy fiel a mi devoción / que siento desde pequeño / y este amor chiquinquireño / que llevo en mi corazón / destello de luz celestial visión / divino es tu resplandor/ Madre de Jesús lazo de la unión / ilusión grande de amor (Gaita: Amor chiquinquireño).


Debutó con la agrupación infantil Los Invasores (1962); en Mérida (donde estudiaba a los 14  años) fundó  ‘Los Bomberos’ y ‘Los Canarios’ (1964); En  1971 entró  a ‘Santanita’ con el que logra catapultarse al estrellato, lo que condujo a su contratación por los Cardenales del Éxito. Destacó en Koquimba, Gran Coquivacoa, Las Estrellas del 2000 y Maragaita. Se preocupó por enseñar la cultura zuliana y desde la radio lo hizo en “La gaita antañona”. En la TV se le vio en el espacio  humorístico A la jaiba, y luego en “Entre gaitas y gaiteros”. En 1980, ya consagrado, ingresó a “La Universidad de la Gaita”. En 1983 en calidad de director musical entra a “Gaiteros de Pillopo”, conjunto con quienes grabará: El Barbero, Morrocoy, La Piñata y La Taguara de Bartolo. En 1986 regresaría triunfalmente a Cardenales del Éxito como cantante y director musical y cosechó éxitos como Entre Palos y Alegrías, La Florecita, El Burro y La Comae. En 1992 decide fundar el conjunto “La Parranda Gaitera”; agrupación con éxitos como La Flor de la Habana. Paralelamente trabajó de manera muy prolífica como compositor y arreglista para otros conjuntos gaiteros con canciones que también han permanecido en la memoria popular, como La Negra Cocoa Coa, Estampas, El Mercado de los Buchones, La Tienda de Tobías, Sabor Añejo, El Marciano, Ay Corazón, Bahía de Cata, Patrimonio Nacional y En Casa se Larga el Forro.

Como muestra, van algunas letras de las conocidas gaitas de Astolfo Romero: Si yo me encuentro un marciano /y lo llegara a agarrar /lo pelo y mando a bañar /y lo saco pa’ la calle / y no se lo enseño a nadie / si no me aflojan un real (Gaita, El marciano). San Antonio en Sanidad hoy ve las calamidades / que pasan los hospitales por tanta necesidad / y el ministro de Fomento tiene todo regulado / y aunque hay precios congelados hoy todo sigue en aumento. (Gaita. El gabinete del diablo). En casa se venden tetas /y mondongos especiales /periódicos, terminales /ganadores y dupletas / también se pone ampolletas /y la costura no falta / y mamá te echa las cartas /si le compráis la gaceta.(Gaita. En casa se larga el forro). En mi barrio El Empedrao/ Parroquia Santa Lucía/ había una barbería/ que era muy populachera/ te lavaban en ponchera/ la silla se reclinaba/ y Luis el perro pelaba/ al son de una periquera///Tenía gansos y patos/ diez palomas y gallinas / tres loros en la cocina/ dos perros y cuatro gatos./ La gente pasaba al patio/ a sentarse en las banquetas/ jugaban rifa y dupletas/ y se pasaban los datos. ///Ni El Barbero de Sevilla/El Maneto y Tagarín/se dieron ese postín/ de pelar con una hojilla/ el propio Jesús Delgado/ de la calle Soledad/ vio aquella modalidad / de Luis el perro asombrado/// Bajito y a lo cepillo/ a lo yankee con pollina/con talco y con brillantina/ valía tres reales sencillos./ De Monte Claro y Ziruma/ venían buscando a Luis/y él les hacía feliz/ un pela’o con totuma/// Y cuando Luis te afeitaba/en todo te complacía/al igual que Zacarías/que hasta perfume te echaba/Lo único que pasaba/con la máquina de mano/que se amellaba mi hermano/ y a templones te pelaba (Gaita, El Barbero). Sinónimo de zulianidad, autenticidad,  de artista integral e icono  chiquinquireño, Astolfo Romero falleció por un paro cardiaco a los 50  años el 20 de mayo del año 2000.

Maracaibo 10 de julio del año 2017

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