jueves, 26 de septiembre de 2024

El lamento por Ur

 

El "Lamento por Ur" es un poema sumerio que se considera una de las obras más importantes de la literatura antigua. Este poema refleja la tristeza y el dolor de la caída de la ciudad de Ur ante los elamitas alrededor del año 2000 a.C. A través de su estructura lírica, el poema expresa el sufrimiento del pueblo y la devastación de la ciudad, que había sido un importante centro cultural y religioso en Mesopotamia.

 

Sumeria es una región histórica de Oriente Medio, parte sur de la antigua Mesopotamia, entre los ríos Éufrates y Tigris. La civilización sumeria está considerada como la primera civilización del mundo. La procedencia de sus habitantes —sumerios— es incierta, existen hipótesis sobre sus orígenes y la relacionan con el período de Uruk, lo que descartaría invasiones o migraciones desde otros territorios lejanos. El término “sumerio” también se aplica a todos los hablantes de la lengua sumeria. La región era denominada “tierra de Súmer”.(ver).


 

El término “sumerio” es el nombre común dado a los antiguos habitantes de la baja Mesopotamia por los sucesores de “los sumerios” quienes fueron los “semitas acadios”. Los sumerios se llamaban a sí mismos “el pueblo de las cabezas negras”. Del período neosumerio existen seis composiciones, que pertenecen a un género literario determinado, y han denominado “lamentos por ciudades destruidas”. Además, permiten rastrear una evolución del género entre ellas.

 

Ur fue una antigua ciudad del sur de Mesopotamia. Originalmente, localizada cerca de Eridu y de la desembocadura del río Éufrates en el golfo Pérsico. Hoy en día, sus ruinas se encuentran a 24 km al suroeste de Nasiriya, en el actual Irak.​ En julio de 2016, la Unesco eligió el sitio arqueológico de Ur como Patrimonio Mixto de la Humanidad, como “parte de los vestigios arqueológicos de asentamientos sumerios en la Baja Mesopotamia, que florecieron entre el tercer y cuarto milenio a. C. en el delta pantanoso formado por los ríos Éufrates y Tigris

 

Si se toman en cuenta los motivos literarios, se puede identificar como antecedente de este género un texto de fines del período protodinástico. Existe un contexto para que ese género haya evolucionado hasta la composición de los seis lamentos. Las composiciones fueron denominadas -balags y eršemmas- y existen muchas copias desde el período paleobabilónico al seléucida. Vinculadas con los lamentos por motivos literarios y, por el dialecto emesal en el que están escritas, dichos vínculos permiten identificar no sólo la continuidad del género, sino que demuestran la vigencia de la liturgia para la que se lo utilizó en un lapso de aproximadamente veintidós siglos.

 

La Lamentación por la ciudad de Ur , resulta ser el poema sumerio que fue compuesto tras la caída y destrucción de Ur a manos del Imperio elamita. Represeta el final de la brillante tercera dinastía de la ciudad (aproximadamente en el 2000 a. C.). Constituye el texto más destacado del periodo hegemónico de Isin, el último pero el más esplendoroso periodo de la literatura sumeria. Contiene probablemente la primera, de cinco lamentaciones sobre ciudades de Mesopotamia, "balags" en la voz de sus dioses…

 

El poema describe la desolación de la ciudad, el llanto de sus habitantes y la pérdida de su grandeza. También se puede interpretar como un lamento por la pérdida de la conexión con los dioses y la tradición, ya que Ur era un centro de culto y devoción. El "Lamento por Ur" es significativo no solo por su contenido emocional, sino también por su estilo y su forma, que han influido en la poesía en diversas culturas a lo largo de la historia. Esta obra es un reflejo del impacto que las guerras y las invasiones tienen sobre las civilizaciones y sus legados culturales. Su estudio ayuda a entender mejor no solo la historia de Ur, sino también las emociones y experiencias humanas en momentos de crisis.

 

Dejando de lado los lamentos vinculados a la muerte del dios Dummuzi, los lamentos neosumerios han sido originados y desarrollados por los poetas de Sumer y Acad como una respuesta melancólica a un período de recurrente saqueo de su tierra, sus ciudades y sus templos. Las seis composiciones más antiguas que pueden encuadrarse en estos parámetros son la “Lamentación sobre la destrucción de Ur”; la “Lamentación sobre la destrucción de Sumer y Ur”; la “Lamentación sobre la destrucción de Nippur”; el “Lamento de Eridu”; el “Lamento de Uruk” y la “Maldición de Acad”. Las copias más accesibles de estas composiciones provienen del período paleobabilónico (ca.1800-1600 a.C.) cuando el sumerio ya no era la lengua vernácula, pues había sido reemplazado por el acádico; sin embargo, en la zona sur de la Mesopotamia -en particular en Sumer - continuó siendo preeminente en el lenguaje literario.

 

También se incluyen en la literatura pre y paleobabilónica numerosos himnos en honor de los reyes de la III dinastía de Ur (ca. 2120-2000 a.C.). Hay, además, catálogos literarios que se consideran pertenecientes a este período, mientras que muchos otros textos, particularmente los referidos a mitos y relatos épicos, parecieran ser anteriores al período paleobabilónico. Con este criterio, basado en el eje temático de las composiciones, se pueden rastrear hasta tiempos muy tempranos los antecedentes de este género literario.

 

En síntesis, este tipo de lamentos neosumerios pertenecen a un género literario que a través de un lapso de tiempo muy prolongado. las copias existentes, son del período paleobabilónico (siglo XIX a.C.) y las más recientes del período seléucida (siglo II a.C.) y podríamos remontarnos hasta la época protodinástica. Esta duración tan prolongada en la historia, evidencia un proceso de transmisión y recomposición de los textos. Hay una continuidad testimoniada por las copias y se puede percibir un trabajo de adaptación del género literario que va pasando de los lamentos por ciudades destruidas a los balags y eršemmas, donde la actuación de los sacerdotes kalû propició su utilización en las liturgias relacionadas con el aplacamiento de la ira divina.

 

Las lamentaciones, conocidas como "balags", constituyeron uno de los dos grandes géneros literarios sumerios. ​ En ellas los poetas describían desastres históricos y el sufrimiento de las personas y de los dioses, en este último caso se trataba de verdaderas elegías o canciones fúnebres. Estas composiciones están plasmadas en un conjunto de tablillas de arcilla escritas con caracteres cuneiformes. Las lamentaciones de Ur hacen referencia a un largo período de sequía y desertización que destruyó la ciudad acompañada de una terrible hambruna y consiguiente mortandad.


Las lamentaciones de Ur hacen referencia a un largo período de sequía y desertización que destruyó la ciudad acompañada de una terrible hambruna y consiguiente mortandad. Esta catástrofe natural actualmente se explica por haberse producido en el Océano Pacífico meridional un "mega-Niño" cuyos efectos estuvieron reflejados en la región de Asia en la cual se encontraba Ur, con una una drástica disminución de las precipitaciones. Catástrofes naturales acompañadas de una fuerte decadencia e inestabilidad del poder político de la ciudad.

 

Existe un texto, en el que un archivista de Urukagina (final del período protodinástico, siglo XXIV a.C.) registró una detallada lista de templos y santuarios de Lagaš que fueron quemados, saqueados y profanados. Esta compilación informativa fue efectuada con el propósito de que los responsables recibieran el justo castigo por parte de los dioses que habían sido ofendidos. Este texto considerado un antecedente del género, en particular por la forma en que los acontecimientos están presentados, con sus implicaciones de amargura y pesar, su tono de resignación a la voluntad divina y su fe en el castigo que recibirá el transgresor.

 

El lamento se compone de cuatrocientos treinta y ocho versos en once kirugu (secciones), dispuestos en estrofas de seis versos. Describe a la diosa Ningal, que llora por su ciudad después de suplicarle al dios Enlil que devuelva una tormenta destructiva. Intercaladas con los lamentos de la diosa hay otras secciones, posiblemente de diferente origen y composición; estos describen el pueblo fantasma en el que se ha convertido Ur, relatan la ira de la tormenta de Enlil e invocan la protección del dios Nanna ( Nergal o Suen ) contra futuras calamidades. Ningal, la esposa del dios de la luna Nanna, continúa recordando su petición a los líderes de los dioses, An y Enlil, de cambiar de opinión y no destruir a Ur. Lo hace tanto en privado como en un discurso ante la asamblea Annunaki

 

Samuel Noah Kramer realizó la primera edición completa de las Lamentaciones, compilando veintidós fragmentos diferentes. Esta edición fue publicada en 1940 por la Universidad de Chicago con el título Lamentation over the Destruction of Ur.


Maracaibo, jueves 26 de septiembre del año 2024

 

miércoles, 25 de septiembre de 2024

Mi tío en la guerra

He hablado en otras ocasiones en este blog, lapesteloca sobre mi tío Fernando C Tamayo (1890-1948). En febrero de 2013, hablé de su poesía trascribiendo al blog, a pesar de su extensión el “Romance del camarada muerto” (https://tinyurl.com/2nx63ebr). En el mes de marzo 2013, lo hice a propósito de los venezolanos guerreros en la Primera Guerra Mundial (https://bit.ly/2KTxVsk) y en  noviembre de 2016 escribí sobre las amapolas creciendo en Flandes (https://bit.ly/2LcfYWr). Otra vez volví a tocar el tema de la poesía en la guerra en junio del año 2019 (https://bit.ly/35CKvEt), y ha transcurrido ya un tiempo, desde cuando caí en la tentación nuevamente y escribí un relato más familiar, el día cuando cumplía 80 años, (https://bit.ly/2XBznVu) y hablé entonces sobre mi mamá y mi tío Fernando… 

 

Los Aliados durante la primera Guerra Mundial, tenían ya casi cuatro años combatiendo en una extenuante guerra de trincheras cuando los Estados Unidos enviaron al mando de sus tropas al general John Pershing, el mismo militar que persiguiera durante muchos meses a Pancho Villa en territorio mexicano. El mariscal francés Foch y el Jefe de las Fuerza Expedicionarias Británicas Douglas Haig habrían de recibir a Pershing al frente de nueve divisiones de soldados norteamericanos para ayudar a las 164 divisiones de franceses e ingleses que luchaban por contener la invasión de las 207 divisiones del ejército germano.

 

Los jóvenes “marines” llegaban acostumbrados a la estrategia de grandes cargas de la guerra de Secesión, armados con fusiles y ametralladoras, y sufrieron grandes bajas en los campos de Francia minados, llenos de trincheras y bajo el fuego inclemente de los nidos de ametralladoras enemigas, ellos padecieron los rigores de los gases tóxicos y les tocó luchar entre lluvias de obuses y de morteros alemanes. Pronto aprenderían los norteamericanos datos de los soldados aliados, a moverse en grupos, y a inventar estrategias convergentes para destruir las posiciones del enemigo. 

 

Serían las 5:30 de la mañana del 26 de septiembre de 1918, cuando después de un bombardeo de seis horas durante la noche anterior, más de 700 tanques aliados, seguidos de cerca por tropas de infantería, avanzarían contra las posiciones alemanas en el bosque de Argonne y a lo largo del río Meuse.​ Las Fuerzas Expedicionarias Estadounidenses del General Pershing habrían de desempeñar el papel principal del ataque, en lo que sería la ofensiva estadounidense más grande de la Primera Guerra Mundial.​​


Después de que unos 400.000 soldados estadounidenses habían sido trasladados con dificultad a la región del bosque de Argonne y a raíz del ataque dirigido por Estados Unidos en St. Mihiel, comenzó la denominada ofensiva Meuse-Argonne. El bombardeo preliminar, que utilizó unos 800 proyectiles de gas mostaza y fosgeno, mató a 278 soldados alemanes e incapacitó a más de 10 000. El avance de la infantería, fue apoyado por una batería de tanques y unos 500 aviones del Servicio Aéreo de Estados Unidos. 

 

Fernando quien había emigrado a los Estados Unidos, becado y había sido estudiante de ingeniería civil, profesor de español, deportista, y dibujante en la Universidad de Colorado, había decido hacerse ciudadano americano para irse a la Primera Guerra Mundial con sus compañeros y sus discípulos. Estaría en Francia adscrito al Cuerpo de Ingenieros y en el frente de batalla estuvo dirigiendo una compañía de Infantería. Aunque estuvo al principio, en el “sector defensivo” pasó luego al frente activo y le tocaría tomar parte en varios combates de importancia. Así concurrió a la última batalla de la guerra poco antes del armisticio y en la cual fue condecorado por sus servicios con la medalla de guerra de la “Meuse Argonne (https://bit.ly/3BgrPL8) y tras batallar “en algún lugar de Francia, a unos días del Armisticio” escribió el Romance del camarada muerto Sus estrofas iniciales acuden a mi mente con frecuencia, por lo que las he querido compartirlas hoy nuevamente con mis lectores:

 

Extraño que en mis recuerdos de esta madrugada fría/ no se agiten torvos cuervos de pasiones agresivas/ sino que en fugaces giros, las alegres golondrinas de mi añoranza/ pincelen en raudas policromías paisajes inolvidables de mis lejanas campiñas.

La niebla durmió en la selva/y, acre, la humarada pícrica/ que a la neblina emponzoña/ nos sofoca. Mis pupilas/ se esfuerzan por cotejar/ los “números” en las filas/ con la voz que dice –Aquí/sin el timbre de sonrisa/ que en mi mente conectaba/ la voz y fisionomía.- La humareda es una bruja que artera, me tantaliza: /Mañanitas de mi tierra, escalofríos de neblina,/oh, los cerros de Capacho/en mis montañas andinas!/Ansias de calor de nido.../ Dolor de esperanzas idas...  Broncas las bocas de acero/  lanzan “fuego de cortina”;/ los “Setenta y cinco” ladran/en bochinchera jauría;/ y silba muerte el aullido/  de granadas enemigas./  Madrugadas de Capacho...  escalofríos de neblina...Hace frío en Bois-le-Prètre... No puede ser cobardía.

Se han vestido los muchachos/ para un día de revista/ un “rendez vous” con la muerte/  amante a quien no la esquiva. Sin delatar la emoción/ me fijo, al pasar revista, /en cada rostro. Quisiera / grabarlos en la retina! /  Van en “misión especial”;/ son miembros del “Club Suicida”/ que han de cortar las hiladas/ en la alambrada enemiga/  al punto de la “hora cero”/  y a la señal convenida.”/  -Al removerse y dejar el rollo de sus cobijas /-Si vuelven, aquí estarán para quien venga a pedirlas/ I si no, pues... es...muchachos, que ya no las necesitan.     Good luck, boys, and give ém hell !/ Después, la orden de partida. (. . . )

Adjuntos los Ingenieros de Línea a la Infantería/ vamos en “segunda ola”./  Somos como almas perdidas en una escena dantesca. / La metralla nos fustiga;/ nos doblegamos, intensos;/ avanzar es la consigna/  y avanzamos... avanzamos.../  interrogaciones vívidas/  ante el dilema patente / de la Muerte o de la Vida. El castigo ineludible/ nos va raleando las filas/ pero, mecánicamente, / gritamos: -Guardar la línea !/  “Keep the line” y proseguimos/  la marcha, marcha infinita/ torturante, interminable,/ puestas el alma y la vista/  en una mancha borrosa,/ en una línea indecisa/ que nos dieron de “objetivo”/  de esta “operación sencilla”!   El shrapnel tamborilea/ nuestro paso desde arriba/  y las granadas regüeldan/   insaciables, y vomitan/  con horripilantes bascas,/  tierras y entrañas y vidas.”/( . . .)

Y fue llegando al camino/ chiquillo de la alegría,   que te vi: tenías abierta/ desgarrada, la camisa/           y rojos hilos de sangre, al respirar, te salían/ de un arabesco bermejo que en tu pecho se encendía. Con el semblante tranquilo / reposando parecías,   / reclinado en el talud  /a la vera de la vía... /  mientras que hilo tras hilo / se deshilaba tu vida. Fue un instante, nada más;/ un trance de pesadilla,/  la impresión fugaz de verte,/  camarada, en la agonía;/ más en la mente, quemada,/ la llevaré mientras viva./ Y maldije la crueldad,/  de la inflexible consigna/  de seguir.../ siempre seguir...  dejándote en la agonía! /  Groseras interjecciones,/ afiladas, asesinas,/  rebosaron en mis labios/  al maldecir, expresivas, /  la cáfila de vejetes,/  tahures de la política,/ que así lanzan a los pueblos  y a los hombres a la ruina!   Fue un instante, nada más; /  pues cuando la Muerte grita/ las impresiones más hondas/ en un instante se olvidan./  Al atardecer sangriento,  / consolidada la línea,  / el relevo nos prestaba  / un nuevo jirón de vida.  Regresamos cabizbajos,  / dilatadas las pupilas,  /hechas guiñapos las ropas  y las almas hechas trizas.

Cuando te hallé, ya no eras.  No había sol en tus pupilas / y el lodo había mancillado el oro de tus espigas. / La medalla de la Virgen sobre tu pecho pendía/  y, compasiva besaba  un hueco de tus heridas. Casco en mano, los sollozos/ mi oración enronquecían... /  Un instante, nada más,  y me sacudió la vida.   Para mí nunca habrás muerto, / chiquillo de la alegría;/  había paz en tu semblante/  que enmarcaba una sonrisa:/   esa tarde, camarada, /  rendido por la fatiga,/ te habías quedado dormido/  diciendo un Ave María. 

( Escrito en un lugar de Francia, Noviembre de 1918 ).

 

Fernando había nacido en Valencia el año 1890 y antes de cumplir el año se trasladó con sus padres a San Cristóbal. Fernando C. Tamayo ha sido uno de los poetas líricos más firmes y expresivos del Táchira. Fue el mayor de una familia de nueve hermanos, María Teresa, Albina, Eduardo, Cecilia, Josefina, Amalia, Francisco, Mercedes y María Amelia conocida cariñosamente como Maruja, mi madre. En los últimos años del régimen de Cipriano Castro cuando se alboreaba la larga dictadura gomecista, las circunstancias se dieron y al ser don Lorenzo muy amigo del Cónsul de Venezuela en Nueva York, a través de gestiones y de los buenos oficios del Cónsul amigo, le otorgarían una beca al joven Fernando para cursar estudios en los Estados Unidos. 

Al finalizar la guerra regresaría a Norteamérica y en el Colorado College volvería a ser profesor de español y se graduó de Filosofía y Letras.  Casó con una norteamericana, fue obrero en molinos para la extracción de oro, lavaplatos en un restaurant neuyorkino, actor de cine, cowboy, guionista de películas, director de Publicidad de la Columbia Pictures, premiado en 1935 con un Oscar de la Academia en Hollywood por el guion de la película “Sombras de Gloria”. Ejerció el periodismo en Nueva York y con una sólida cultura humanística, se transformaría en un erudito, versado en literatura y filología. Hablaba y escribía en inglés y en francés con la misma perfección que en español.

Fernando, regresaría a Venezuela en el año 1935, y con su esposa Katherine pasaron unas semanas en San Cristóbal, estuvieron de visita en Maracaibo, allí volvería a ver a su hermana menor, mi madre, y regresaría a Norteamérica. A finales de ese año, morirá don Lorenzo Tamayo de la Madriz y pocos meses después en 1939 fallecerá su madre doña Albina. Treinta y dos años después de haber dejado su tierra, para iniciar su vida de aventurero, Fernando, de vuelta en su casa recibe estos dos golpes del destino y se comporta “como un viejo soldado”, sin claudicar ante la vida y ante las letras... Continúa escribiendo poesía y acepta el cargo de director de un liceo, el “Rafael María Morantes” en el barrio San Carlos en las afueras de San Cristóbal. Treinta y dos años después de haber dejado su tierra, para iniciar su vida de aventurero, Fernando, de vuelta en su casa le toca el dolor de la muerte de sus padres.

Sería en 1945 cuando Fernando Tamayo, vería coronada una gran aspiración y a través de sus amigos del Grupo Literario “Yunke” se publicó su libro “Romances de mi Montaña”. De nuevo otra conflagración mundial estaba en marcha, y “los marines”, después de Pearl Harbor, habían zarpado para ir a morir en Battan, en Corregidor, en Guadalcanal, o en Las Filipinas, en el Pacífico Sur. Su esposa Katherine se caería accidentalmente sobre un rosal y también morirá de tétanos en San Cristóbal. Fernando, luego de la muerte de su esposa, empeoró de su condición pulmonar crónica como consecuencia de los gases en las trincheras, y regresó a la casona de sus padres en San Cristóbal.

Con su hermana Mercedes, el poeta estará un tiempo en Maracaibo, y deberá ser hospitalizado en el hospital Central Dr. Urquinaona varios días por su enfisema y fibrosis pulmonar. Tenía una gran ilusión para estar en un desfile de Veteranos de la II da Guerra que se daría en Miami, pero por motivos de salud no logró estar presente. El Hospital VE de Miami lo trasladó al Hospital de Veteranos de Nueva York donde moriría el 22 de agosto de 1948. Sus restos mortales, traídos a Venezuela, reposan con los de sus padres y de su esposa, en el cementerio de San Cristóbal, ante las montañas de los Andes Tachirenses que tanto amó. 

Maracaibo, miércoles 25 de septiembre del año 2024

martes, 24 de septiembre de 2024

Endometriosis

 

La endometriosis es una enfermedad en la que, en la parte exterior del útero, crece un tejido similar a la mucosa interior del útero que puede causar un dolor intenso en la pelvis y dificultar que se consiga un embarazo. Es una enfermedad crónica que cursa con un dolor intenso durante la menstruación, las relaciones sexuales, al defecar o al orinar que afecta en gran medida la vida de quien la padece; además, provoca dolor pélvico crónico, distensión abdominal, náuseas, fatiga y, en ocasiones, depresión, ansiedad e infecundidad.

 

La endometriosis provoca una reacción inflamatoria crónica que puede dar lugar a la formación de tejido cicatricial (adherencias, fibrosis) dentro de la pelvis y en otras partes del cuerpo. Se han descrito varios tipos de lesiones: -endometriosis superficial, cuando las lesiones se presentan principalmente en el peritoneo pélvico;- endometriosis quística de ovario (endometrioma), ubicada en los ovarios;- endometriosis profunda, ubicada en el tabique rectovaginal, la vejiga y el intestino;- en casos muy poco frecuentes, también se han hallado lesiones de endometriosis fuera de la pelvis.

 

Recientemente un equipo internacional de científicos utilizando técnicas avanzadas de biología molecular y aprendizaje automático ha creado un mapa celular detallado de el endometrio, que no es otra cosa más que una delgada capa de tejido que recubre internamente la cavidad del útero. Este estudio ha sido un logro, cuyos resultados se publicaron en la revista Nature Genetics y sirven para examinar una enfermedad de la que se conoce poco aunque afecta a más de 190 millones de mujeres en todo el mundo, la endometriosis.

 

Roser Vento-Tormo una investigadora de 37 años quien es una de las científicas que firma la publicación y trabaja en el Wellcome Sanger Institute de Reino Unido. Ella explica que existen varias razones por las que el estudio del endometrio está “históricamente postergado” y una de ellas, quizás la principal, es que “por lo general se invierte poco dinero en todo lo que tiene que ver con la salud de la mujer”, asegura Roser. También es cierto que el endometrio es uno de los sistemas más dinámicos y complejos del cuerpo humano, por lo que estudiarlo implica una serie de retos.


Imagínense ustedes a “un tejido que cambia su composición cada cinco días y se regenera por entero cada mes de forma perfecta y sin cicatrices”, dice Roser. Durante el ciclo menstrual, el endometrio se engrosa y prepara al útero para un posible embarazo, si este no ocurre, el tejido nuevo se desprende y sale a través de la menstruación. Ese proceso depende de millones de células que van cambiando su identidad y su función dependiendo del tipo de hormona con la que interactúan en cada momento del ciclo, afectando no solo sus propias características, sino también las de otras células, lo que genera un efecto en cadena que para los científicos es difícil de rastrear.

 

El nuevo mapa del endometrio funciona como una brújula. “Fue como crear un Google Maps del endometrio con el que podemos saber dónde está cada célula, de qué está compuesta y qué tipo de interacción tiene con las células que la rodean”, detalla Vento-Torno. Para lograrlo, los científicos recurrieron a la secuenciación de célula única, una técnica que permite analizar el material genético del ARN célula a célula. “Es como tener un pasaporte para cada unidad en el que se puede leer su composición, qué función cumple dentro del cuerpo y qué puede hacer a gran escala cuando interactúa con otras células”, detalla la autora.

 

Esta herramienta resulta ser particularmente útil para el estudio del endometrio porque se puede observar cómo las células van cambiando su identidad a lo largo de los días y cómo se afectan en el desarrollo de anomalías, como resulta en la endometriosis. En esta enfermedad, las células del endometrio salen del útero y desarrollan tejido fuera de él. Puede ser en los ovarios o en las trompas de Falopio, y en la mayoría de los casos provoca quistes y una inflamación crónica que se manifiesta en un dolor abdominal tan severo que resulta inhabilitante y otras complicaciones, como la infertilidad.

 

En el estudio, se analizaron más de 313.000 células endometriales colectadas de 63 mujeres en edad reproductiva. A las muestras obtenidas de participantes de estudios anteriores se sumaron 16 nuevos donantes. Del total de participantes, 30 tenían endometriosis y 14 estaban usando medicamentos hormonales, para el control de la natalidad o para el tratamiento de la enfermedad. Las hormonas, y los antiinflamatorios, son las dos medicinas para combatir los síntomas ya que la endometriosis, hasta el momento, no tiene cura.


El mapa va a ayudar a los científicos a entender mejor el sistema reproductivo femenino para desarrollar tratamientos personalizados. “Lo que produjimos fue un vocabulario común para integrar todos los datos del endometrio que existen y los que se produzcan en el futuro”, apunta Vento-Torno.

 

Estela Lorenzo, especialista de la Unidad de Endometriosis del Hospital 12 de octubre de Madrid, asegura que: “La revolución médica en la salud de la mujer tiene que venir a través de este tipo de exploraciones”. El atlas va un paso más allá de publicaciones anteriores, añade la experta, porque “habla, no solo del tipo de células que componen el endometrio, sino de cómo se desarrollan dentro de uno de los tejidos más peculiares y curiosos del cuerpo humano”.

 

Francisco Carmona, es un ginecólogo presidente de la Sociedad Española para el Estudio de los Miomas y la Endometriosis y especializado en endometriosis que lleva décadas indagando sobre la enfermedad y es optimista sobre el nuevo mapa. “En un futuro va a ser una herramienta a partir de la cual se va a poder generar un montón de nuevo conocimiento”, opina. Para los médicos, el endometrio es un rompecabezas de diez mil piezas. “Ahora, al menos”, -dice el Dr Carmona- “la medicina tiene un modelo común para, entre todos, intentar montar ese puzle”.

 

El mapa del endometrio es parte del Human Cell Atlas, una iniciativa internacional que pretende hacer un mapa celular de todo el cuerpo humano. Si lo logran, los científicos tendrían una base fundamental para diagnosticar, monitorizar y tratar una enorme variedad de enfermedades cuyos tratamientos hoy son inciertos y complejos.

 

Vento-Torno explica que: “La mayoría de los cambios en personas enfermas se dan en ciertas células secundarias que, en teoría, son para dar soporte. Al no dar soporte, no dan las señales correctas a las células estructurales y terminan afectando su función”.

 

Maracaibo, martes 24 de septiembre del año 2024.

lunes, 23 de septiembre de 2024

Del polvo del hogar


El día 8 de este septiembre revisando la prensa me he tropezado con un extraño reportaje de un señor curiosamente apellidado Gargantilla, quien, escribiendo en un diario de España, centraba su reclamo en el polvo flotante, y conste que no era polvo sideral corpusculado, era polvo real, uno que brilla, y es verdadero, un polvillo común, quizás perecedero, pero, indudablemente, aquel no era el por mi rememorado polvo flotante, el que tremolara en el suelto manto de una sutil neblina envuelto...

 

Pero yo estaba en casa y el supuesto polvillo no me ocultaba ningún extraño o tembloroso torreón. No. Era polvo, sencillamente, polvo, ¡de cajón! Polvo de ese que anda flotando y que termina siempre por adueñarse de nuestra casa, como si un ejército silente y camuflado, decidiese volverse microscópico y cual bruma, invadir cada rincón, y toda lisa superficie, cualquier objeto terminará al fin por cubrirse con una fina capa blanquecina, casi invisible pues parece nacer y crecer y siempre por más que limpies y sacudas vuelve a reaparecer, a revertirse y es una fija…


No es cosa del azar es como si renaciese para siempre allí estar, y tú lo notas cuando ya has terminado de limpiar. Cada una de esas diminutas partículas cual fragmentos de un algo inexistente, quizás podrás pensar que son recuerdos atrapados, suspensión temporal, aunque parezca inexistente y en realidad se convierte en cierta especie de guardianes o quizás confidentes, silenciosos, flotantes, que se conocen bien todas las superficies, que han esculcado todos los rincones, hasta los más intrincados recovecos, para invadir y tomar silenciosas nuestro hogar.


Es algo como aquel polvillo enamorado, el del “Amor constante, más allá de la muerte” que mencionara un día Francisco de Quevedo, “venas que humor a tanto fuego han dado, médulas que han gloriosamente ardido”, y recuerda uno entonces que bien nos lo dijera, “su cuerpo dejarán, no su cuidado”; y que serán al fin ceniza, más tendrán sentido; tantas minúsculas partículas, en sumatoria, “polvo serán, más polvo enamorado”.

 

¿Acaso ese polvillo son de un amor constante diminutas partículas que al soplo del aire tiemblan cual húmedas verdes e inquietas hojas de algún lejano almendro que en mi infancia crecía frondoso en “la casa de al lado”?… Eran almendrones, te dice la memoria y estarás hablando de otra cosa, nísperos, guayabas, no es posible, esas son estructuras tangibles, no es de ellas que tratamos, es del polvo, microscópicamente camuflado…

 

Pero el polvo no es nunca un simple hacinamiento de partículas, no son sencillamente microorganismos vivos que están dotados con aceradas finas espículas, es mucho más que eso, hay que dimensionar lo que sucede y entenderlo como un ecosistema activo y además sumamente dinámico, donde pululan millares de seres invisibles a nuestros ojos, pero que están allí, interactuando todos, conviviendo entre sí, y en su entorno todos amigablemente asociados…

 

Estarán las bacterias que van descomponiendo con precisos humores las células que aun flotaban pero ahora yacerán muertas, han sido despachadas e inertes no podrán percibir como irán siendo separadas, divulsionadas con gran cuidado, sus fibrillas textiles disgregadas mientras activamente las bacterias se ocuparán de ir liberando sus húmedos efluvios, que serán usados para licuar a otros microbichos, los que aun laten con esperanzador entusiasmo, otros que tienen esperanzas aun no idas, y quizás serán hongos que activamente crecerán sobre el polvo particulado, hasta ir creando un entramado de filamentos que les permitirá dejarle espacio a otros seres vivos, elementos que latiendo se decidan quizás a  explorar sus entornos.

 

Cuando los rayos de la luz del sol se cuelan por las ventanas es posible ver como se iluminan las partículas suspendidas en el aire, un verdadero universo microscópico en constante movimiento. El polvo ha hecho acto de presencia. De una manera  general, te han avisado que esto no es una patraña, y que el polvo, ese que flota en sutil trama, es invisible en parte es una mezcla de tus propias células, las que proceden de tu piel, con sus ácaros y hasta con algunas partículas de polen y de tierra, que tal vez llegaron en la suela de tu calzado…

 

Todo flota en el aire, ahora lo sabes, con bacterias, hongos y hasta con restos de alimentos y suspendido va tapizando todo el entorno de tu hogar y ahora tus muebles, otrora relucientes, para ti lucirán envejecidos por un fino manto de seres que han crecido sin que lo hayas notado y mirarás tus libros y quizás notes que sus títulos comienzan a ocultarse bajo cada vez más gruesas capas de partículas y las fotografías protegidas por el vidrio que cubre el marco sobre la mesa aquella se han teñido también y los personajes, obscurecidos, parecieran flotar en medio de una neblina opaca…

 

Pero para tranquilidad o para incrementar esa obsesión por la limpieza la composición del polvo puede variar según la ubicación del sitio donde estemos, de la época del año o de las actividades que realicemos en nuestra casa. Te pasaré  un dato que se suma a un detalle no tan sutil, textualmente me han dicho que “En este universo de polvillos flotantes los ácaros son reyes”…

 

De manera que hasta aquí hemos llegado en esta reláfica de limpieza y prosa poética para mostrar que no es poesía lo que creía el tipo aquel, el “ñingo” que decía… “Poesía es” …cuando llegan los uniformados a tu casa y terminan por golpearte hasta con el casco porque quien sabe lo que ocultáis vos en tu celular que no es tu celular subcutáneo –y te lo aclaro simplemente (no María) sino para facilitarte la cosa- lo de la buena alimentación, a eso me refiero, ¿Si?¿te acordáis?, umju, como la galleta (por eso te dicen Susy,) “tasgorda” y ser, o no ser, es que precisamente, allí es donde está el dilema, o si vos queréis, el inringulis de la jaiba o el meollo la cuestión ….

 

En Maracaibo, un “especial” de lapesteloca para el día lunes 23 de septiembre del año 2024

 

domingo, 22 de septiembre de 2024

El tenebrismo de Caravaggio

 


Michelangelo Merisi da Caravaggio (1571-1610), conocido como Caravaggio, fue un pintor  italiano, activo en RomaNápolesMalta y Sicilia entre 1593 y 1610. Caravaggio pintaba tras una detenida observación anatómica con un uso dramático del claroscuro que llegaría a ser conocido como tenebrismo.

 

El tenebrismo se convirtió en un elemento estilístico que llego a ejercer una influencia decisiva en la formación de la pintura del Barroco. La pintura de Caravaggio combinaba la observación realista de la figura humana, física y emocional, con un uso dramático de la luz oscureciendo las sombras y transfigurando objetos con la aparición de brillantes haces de luz. 


Caravaggio trabajaba muy rápido y utilizaba modelos del natural, prescindiendo de bocetos para trabajar pintando directamente sobre el lienzo. Así expresó vívidamente momentos y escenas cruciales, (https://tinyurl.com/mvsffrw4) a menudo con luchas violentas, tortura y muerte Su influencia fue profunda en el nuevo estilo barroco que emergió del manierismo de los grandes maestros como Pedro Pablo RubensJosé de Ribera, Rembrandt y Diego Velázquez. En la siguiente generación, al manifestar el profundo influjo que ejerció Caravaggio, fueron llamados “caravaggistas” o “tenebristas”.


Caravaggio “colocó la oscuridad (sombras) en el claroscuro”. El claroscuro había llegado a escena mucho antes del arribo de Caravaggio a la pintura, pero fue él quien le dio la técnica definitiva, oscureciendo las sombras y transformando el objeto en un eje de la luz, cada vez más penetrante. Caracterizado por su rapidez para ejecutar obras marcando las líneas básicas directamente sobre el lienzo con el extremo del mango del pincel, Caravaggio pronto se convirtió en un anatema para los ortodoxos, pues se negaba a idealizar las figuras y tampoco hacía bocetos ni dibujos preparatorios.

Las novedades de la obra pictórica de Caravaggio inspiraron toda la pintura del Barroco, y se incorporó el drama del claroscuro de manera que así, la evolución estilística provocada por el pintor italiano con los años dejaría de ser tendencia, pero con el paso del tiempo, en el siglo XX, resurgiría el interés por la pintura de Caravaggio reconociéndose su importancia en el desarrollo del arte occidentalSe ha dicho que “la pintura moderna comienza con la obra de Caravaggio”​.

En lo personal, Caravaggio no era el icono gay que algunos han tratado de crear en estos tiempos, había tenido una vida carente de afectos familiares cuando joven con mala conducta y terminaría envuelto en reyertas asesinado a un conocido mafioso local apellidado Tomassoni. Existe una novela “Una vida sagrada y profana” (Taurus) de Graham Dickson quien lo define como “un omnisexual” y su novela ha sido considerada como “el mejor intento por acercarnos a su compleja personalidad y explicarnos su mundo”.

La utilización simbólica de la luz fue usada por Rembrandt t Harmenszoon van Rijn quien fue quizás su mejor exponente (https://bit.ly/2QYihyv), Él usaba un estilo cercano al tenebrismo, pero más difuminado y sin los marcados contrastes de luz y sombras de los caravaggistas se puede decir que “Rembrandt inventó la luz, no como calor, sino como valor.” En sus imágenes predomina la oscuridad, iluminada en ciertas partes por un rayo de luz cenital de connotación divina. La luz rembrandtiana es reflejo de una fuerza exterior, que incide en los objetos haciendo que irradien energía. En Rembrandt la luz pasa a ser algo estructural, integrada en forma, color y espacio, y así se desmaterializa los cuerpos y juega con la textura de los objetos.

Hemos recientemente conversado sobre la tradición lumínica de la escuela veneciana, destacando su importancia en el compatriota de Rembrandt Johannes Vermeer (https://bit.ly/3CG9vOz) (1632-1675) quien imprimía a sus obras -en espacios interiores- una luminosidad pálida en unos ambientes plácidos y sosegados.​ Con una serie de puntos de pigmento realzaba los objetos, sobre los que aplicaba una luminosidad que hacía que las superficies reflejasen la luz de una forma especial (https://tinyurl.com/56ucb4xm). La luz de Vermeer suaviza los contornos sin perder la solidez de las formas, en una combinación de suavidad y precisión que pocos artistas más han logrado. Vermeer fue apodado “el pintor de la luz”.

Joseph Mallord William Turner (1775-1851) (https://bit.ly/3VcNq13) fue otro pintor, en este caso un inglés quien plasmaría los efectos de luz en la naturaleza, con cambios atmosféricos de gran dramatismo, como tormentas, marejadas, niebla, lluvia, nieve, o bien fuego y espectáculos de destrucción en paisajes en los que realizó numerosos experimentos sobre cromatismo y luminosidad, los cuales otorgaron a sus obras un aspecto de gran realismo visual. Regresando al Tenebrismo, este fue como una "nueva luz" que nació sobre temas muy diferentes, en ocasiones de forma simbólica y Caravaggio, representaría este fenómeno luminoso muy asociado a figuras humanas.

En este sentido de combinar la luz de la naturaleza con personajes de la vida real, destacaría varios siglos más tarde la obra de Joaquin Sorolla (1863-1923) (https://tinyurl.com/4jnyrbyj) en España, donde la pintura va a crear fuertes haces de luz incidiendo sobre los cuerpos de sus lienzos. La obra pictórica de Joaquín Sorolla ha pasado a la historia, por la captación de la luz en sus pinturas, por atrapar en sus lienzos las diferencias entre la luminosidad mediterránea y la cantábrica en instantes banales de la cotidianidad. Sorolla se mostraría como un pintor del ser humano en su esencia, lo que provoca la especial conmoción del espectador, por lo que se convertiría en referente de la cultura española de su época.

A diferencia de la luz del Tenebrismo, la luz del neoclasicismo vino a darnos idea de otro tipo de iluminación, particularmente en escenas exteriores, pero esta luz del neoclasicismo es una luz clara, fría y difusa, que baña las escenas con uniformidad, sin contrastes violentos; la luz delimita los contornos y el espacio, y otorga una apariencia de solemnidad a la imagen, en consonancia con los temas tratados. Jacques-Louis David (1758-1825) un artista neoclásico sobrio que subordinó completamente el color al dibujo. Estas características se notan en “El rapto de las sabinas”. Otros pintores como Johann Heinrich Füssli, (1741-1825) pintor contemporáneo con W. Blake, conocido por sus imágenes oníricas (https://bit.ly/3Mft8v) que mostrarían un estilo influido por el manierismo italiano con un tipo de iluminación de carácter teatral.​

El Tenebrismo tuvo gran influencia en movimientos posteriores, siendo la semilla más influyente en dar lugar a unos de los movimientos más relevantes en la historia del arte. Como mencionamos, es posible encontrar sus reverberaciones desde el Barroco hasta el impresionismo y se ha dicho que, las obras de Rembrandt habrían sido imposibles de no haber sido por el interés por la luz que introdujo el Tenebrismo en la pintura, lo que explica con facilidad la relevancia de este movimiento en la historia de la pintura como la conocemos hoy.

En Maracaibo el domingo 22 de septiembre del año 2024